Kigali, Ruanda …. [John T.J. Banks/ANN Staff]
La Iglesia Adventista del África Central (AUCA) pronto estará reubicada en un nuevo predio de 45 hectáreas en Masoro, en las cercanías de Kigali. El Pastor Jan Paulsen, presidente mundial de la Iglesia Adventista, participó en la colocación de la piedra fundamental el pasado 12 de mayo.
El nuevo predio reemplazará al anterior que ha sido ocupado por las fuerzas armadas del país. El gobierno le ha comprado a la iglesia el predio anterior. Las clases se está llevando a cabo en unas instalaciones del centro de Kigali que resultan muy pequeñas para la matrícula, que es de 840 estudiantes, que en el futuro seguirá como un predio de extensión.
“Estaban los que decían que debíamos abandonar el proyecto de tener una universidad en Ruanda otra vez, debido a la incertidumbre política del país, pero no deberíamos ni podemos hacerlo”, dijo Paulsen durante el evento. “La pérdida de nuestra propiedad todavía me causa profunda tristeza, pero la misión de la iglesia nos impulsa a avanzar”.
Jozsef Szilvasi, rector de la AUCA, dio la bienvenida al Pastor Paulsen y a otras visitas distinguidas, diciendo: “La Universidad disfruta de una excelente reputación tanto en los ojos del gobierno como en los de la comunidad, y tal es así que el predio actual en la ciudad seguirá siendo utilizado para proyectos de educación continua”.
Al dirigir la palabra, Paulsen dijo que “si bien otras universidades tienen valor académico, una universidad adventista tiene un valor agregado, que es lo espiritual. Creemos en el desarrollo integral del individuo en la búsqueda de la excelencia”.
El líder de la iglesia mundial citó entonces el comentario del físico Albert Einstein: “La tarea suprema del docente es despertar el gozo de la expresión creativa, el gozo de hallar el conocimiento, de promover los descubrimientos y de hallar a Dios”. Y añadió: “Queremos que nuestra educación sea el testimonio supremo de su grandeza. Mi llamado a los docentes es, utilicen vuestra influencia con sabiduría y de la mejor manera que puedan”.
Entre los asistentes a la ceremonia estuvieron David Kay, funcionario consular norteamericano de Kigali, que dijo: “El Pastor Paulsen hizo algo maravilloso hoy por la iglesia y por Ruanda. Sus comentarios superaron mis expectativas”.
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