Purvis, Mississippi, Estados Unidos …. [[Aaron Beaumont/Bev Stout/Personal de ANN]

Cuatro días después de un devastador huracán que golpeó con furia la costa sur del golfo de los Estados Unidos, más de 100 estudiantes, docentes y personal de la Universidad Andrews, una institución adventista en Berrien Springs, Michigan, llegaron al área para ayudar a proveer ayuda.

La caravana vehicular, que incluyó dos buses, una camioneta y un camión lleno de productos de consumo llegaron a la Academia Bass Memorial, un escuela de internado adventista, a poca distancia fuera de Purvis, Mississippi, cerca de 50 millas de la costa del golfo, el viernes 2 de septiembre.

A pesar de la extensa cobertura de los medios noticiosos dedicada al huracán, miembros del equipo de socorro de Andrews dijeron que ellos no estaban preparados para la total devastación.

«Asumí que ustedes deberían haber estado tan cerca como 50 millas de Nueva Orleáns para encontrar una situación tan precaria. Había señales de tránsito, cables eléctricos y postes de cables telefónicos tirados por todas partes. Se podían ver hileras de hasta 50 árboles quebrados», recuerda Frances Faehner, vicepresidente para Servicios del Estudiantado de la Universidad Andrews.

El grupo de Andrews su unió con «Adventist Communities That Serve» (ACTS) — Comunidades Adventistas al Servicio» — un equipo voluntario de reacción para desastres del estado de Florida, encargado de los centros de distribución de alimentos en la Academia Bass Memorial y en la cercana Purvis. El personal en las dos cocinas sirvió cerca de 5,000 comidas por día a una comunidad que necesitaba alimentos desesperadamente. Andrew Moreno, estudiante de ministerio se vio a sí mismo involucrado como cocinero jefe en la cocina de la Academia Bass Memorial, donde empleó cerca de tres días completos, «solamente cocinando todo el día. Siempre se nos solicitaba por alimentos, pero era asombroso cómo todo se mantenía multiplicándose», recordaba Moreno. «Yo me mantenía diciendo ‘nos vamos a quedar sin esto’, pero siempre que necesitábamos algo, un camión aparecía con más».

Acompañados de la asistencia de la comunidad, los voluntarios de Andrews trabajaron para ayudar a Bass Memorial a recuperarse del severo daño causado por la arremetida del huracán Katrina. Durante el huracán, tres edificios de la Academia Bass Memorial sostuvieron daños considerables de techado, y el recinto estaba lleno de escombros.

El grupo unió sus fuerzas con 40 estudiantes de la Universidad Adventista del Sur, Tennessee (Tenesí), que habían llegado a la academia horas antes, recogiendo escombros y removiendo alfombras, tejas e insolación.

Los estudiantes de Andrews también se unieron a los voluntarios de ACTS en un centro de distribución de turnos
en el recinto de Bass Academy donde había carros alineados por más de una milla esperando en calor por tan necesitados insumos.

«La gente pasaba con el baúl de sus carros abierto, y nosotros, literalmente, les llenábamos el baúl con materiales de consumo», dice Erica Slikkers, estudiante del último año en relaciones públicas.

«A cualquiera que ayudáramos se iba tan agradecido — la gente estaba siempre llorando. Era una gran amalgamación de gente, no solamente de estratos pobres, pero también personas que manejaban buenos autos. De repente ellos quedaron sin nada — en el mundo, para ellos, había sido revolcado y puesto al revés», agregó Erika.

Las víctimas del huracán no fueron las únicas tocadas por los esfuerzos de los estudiantes. El pastor Glenn Russel, profesor asociado de religión y uno de los coordinadores del proyecto, dijo, «Para mí, la mayor inspiración fue ver a los estudiantes supliendo necesidades reales, y el increíble trabajo que realizaron — sus energías, sus habilidades, y su dedicación me fue de inspiración como maestro».

Otra institución educativa adventista está, también, prestando ayuda al servir como núcleo central para recolectar insumos de ayuda para desastres para los centros de servicio comunitario adventistas en Estados Unidos. El colegio universitario, Columbia Union College, ubicado en el área de Washington D.C. tuvo docenas de estudiantes ayudando a colectar y clasificar insumos para desastrados causados por huracán durante el fin de semana del Día del Trabajo.

La Universidad Andrews y Columbia Union College están ofreciendo un año de enseñanza escolar gratis a estudiantes adventistas que estaban matriculados en una universidad o colegio universitario, cuyas operaciones fueron afectadas por el huracán.

Derechos Reservados 2005 por Red Adventista de Noticias (Advetntist News Network).

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