6 de marzo, 2007 Brasilia, Brasil …. [ASN/Personal de ANN]
Los adventistas de Brasil están atravesando un momento difícil después que una niñita de 20 meses fue hallada estrangulada en la pila bautismal de una iglesia adventista de Joinville, Santa Catarina, Brasil, el pasado 3 de marzo. Los líderes presentaron una declaración donde denuncian este crimen atroz y reiteran el compromiso de la Iglesia Adventista con la seguridad y el bienestar de todos los niños.
«La Iglesia Adventista de Santa Catarina se presenta ante el público, a la luz de este desafortunado episodio para expresar … al estado que la iglesia repudia con vehemencia este horrendo acto contra esta niña», expresa una parte de la declaración dada a conocer este 6 de marzo.
Según la agencia Associated Press, la niña habría sido sustraída por su asesino de una sala donde junto con otros niños bajo supervisión participaba de actividades sabáticas de adoración. La agencia también agrega que el asesino se identificó como el padre de la niña ante el requerimiento de una de las supervisoras.
Cuando la administración eclesiástica local supo del crimen, se pusieron en contacto inmediato con la policía y solicitó que se clarifique todo el suceso y que el o los criminales sean castigados de conformidad con la ley local. De acuerdo con la Constitución del Brasil, las iglesias están abiertas al público, y los directivos eclesiásticos no quieren de ninguna manera interferir con la investigación criminal. La comunidad adventista local también está cooperando con la investigación, que aún deben detener al sospechoso.
La declaración oficial agrega que la Iglesia Adventista es conocida en todo el mundo «por predicar contra la violencia y que está a favor de los valores cristianos que honran la familia y respetan a los niños».
«La Iglesia está del lado de la policía y del sistema de justicia en la búsqueda de la resolución completa de este crimen», afirman los líderes en la declaración. «Dejamos en claro que el crimen ocurrió más allá de nuestro conocimiento y que estamos colaborando de todas las formas posibles con la investigación desde el momento mismo en que éste fue descubierto».
La declaración culminó con la seguridad de que los feligreses y directivos extienden sus sinceras condolencias y oraciones con la familia de la víctima.
En la región Sudamericana, la Iglesia Adventista lleva a cabo cada año la campaña «Romper el silencio», que busca prevenir la violencia contra los niños al crear conciencia respecto del tema.
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