Iglesia Mundial: El tesorero informa sobre el pulso financiero de la iglesia como fuerte y estable.

Silver Spring, Maryland, Estados Unidos, 12 de abril de 2007… [Elizabeth Lechleithner/ANN]

Tómele el pulso financiero a la iglesia adventista del séptimo día mundial, y lo encontrará fuerte y estable. «Dios está bendiciendo a sus miembros fieles mientras ellos, con gozo, traen al Señor sus diezmos y ofrendas», dijo Bob Lemon, tesorero de la iglesia mundial el 11 de abril.

Los miembros del Comité Ejecutivo de la Asociación General de la iglesia se reunieron de todo el globo, para la reunión de negocios de primavera de la iglesia mundial.

Pese a un año de 52 sábados, en lugar de 53, los diezmos aumentaron a un ritmo constante a nivel mundial, registrando 1,6 mil millones de dólares para el 2006, 10 por ciento de aumento en comparación con los 1,45 mil millones del año pasado. La porción del diezmo mundial que pasa por la oficina principal de la iglesia para cubrir costos operativos y ayudar a financiar la obra de la iglesia alrededor del globo, fue cerca de 84 millones de dólares, un aumento de casi el 6 por ciento comparado con 79 millones en el 2004.

Afectando un poco estas «tremendas» estadísticas del diezmo, está la devaluación del dólar, anotó Lemon. Las tasas de conversión de moneda afectan a cerca de 46 por ciento de los diezmos globales recibidos en moneda diferente al dólar.

Sin embargo, Lemon dijo que el crecimiento sustancial y consistente de las ofrendas misioneras como porcentaje del diezmo durante los dos años anteriores es tranquilizante. Las ofrendas misioneras mundiales para 2006 indican que la tendencia de estabilidad en el aumento sigue. De hecho, entre el 2002 y el 2006, las ofrendas misioneras de fuera de la región de la División Norteamericana crecieron de 24 millones de dólares a 32, un aumento de 33 por ciento.

Hablando del incremento del 70 por ciento en las devoluciones del diezmos de fuera de la División Norteamericana durante los mismos cuatro años, dijo Lemon: «Aunque el incremento [en las ofrendas misioneras que de fuera de la División Norteamericana] no se ha mantenido con la misma tendencia de incremento en diezmos, va en la dirección correcta».

Lemon anotó que por 25 años, las proporciones de ofrendas misioneras en Norteamérica estuvieron alrededor de 21 millones de dólares, aún cuando el diezmo aumentó cada año. Pero desde 2005, el incremento porcentual en las ofrendas misioneras en la región ha sobrepasado el aumento porcentual en diezmos, tendencia que Lemon estima prometedora.

Las estadísticas de este año revelan, además, que las ofrendas de la División Norteamericana aumentaron en 6 por ciento comparándolas con el año 2005, mientras las donaciones de fuera de la División Norteamericana continúan al frente a toda velocidad, en un incremento de 13 por ciento.

Gary Krause, director de la Oficina de Misión Adventista en la sede de la iglesia mundial, dijo que el aumento en las ofrendas misioneras indican una «pasión creciente por la misión en los miembros de la iglesia, y una confianza creciente en que las ofrendas misioneras están marcando una diferencia».

«Usamos cada canal de comunicación que podemos descubrir, para ‘guiar la mirada' hacia las ofrendas misioneras y mostrar el sorprendente impacto que éstas están teniendo alrededor del mundo al transformar vidas para Jesús», añadió Krause. Uno de esos canales es la Web del departamento, www.adventistmission,org, donde la feligresía puede ‘conocer' la gente impactada por sus ofrendas en forma directa.

«Aún hay una gran obra que hacer para alcanzar a todas las naciones», dijo Lemon a los delegados, al concluir su informe. En particular, especificó partes del mundo donde, de acuerdo con el presidente de la iglesia mundial, pastor Jan Paulsen, la iglesia adventista es «poco numerosa».

Lemon urgió a los oficiales de la iglesia a redoblar la asignación de la porción del presupuesto de la iglesia para llegar a la Ventana 10/40, región que comprende áreas mayormente sin entrar en el África Occidental, el Medio Oriente y Asia, donde está concentrado más del 60 por ciento de la población mundial.

Durante la década de 1940, explicó Lemon, tanto como el 40 por ciento de los diezmos y ofrendas totales de la iglesia fluyeron a través de la oficina principal de la iglesia y fueron administrados por ésta, donde los fondos se canalizaron, luego, a áreas más necesitadas.

Ahora, sin embargo, las oficinas locales de la iglesia supervisan la mayor parte de la distribución del diezmo y las ofrendas, dejando menos de 7 por ciento para que la oficina mundial lo distribuya. Mientras los oficiales de la iglesia aplauden la administración en niveles locales, tanto como sea posible, una infraestructura local insuficiente de la iglesia en la Ventana 10/40 implica escasés de recursos para apoyar el desarrollo de la obra en la región.

«Necesitamos prestar especial atención a la dirección de una porción cada vez mayor de nuestros recursos en fondo común, hacia partes del mundo donde tenemos muy pocos miembros, pero donde vive una porción significativa de la población mundial», dijo Lemon.

Lemon también apeló por un cambio en el patrocinio misionero de la iglesia en los territorios de la Ventana 10/40. Aplaudió el programa misionero interdivisión de la iglesia para ayudar a mantener la unidad de la iglesia a través de una misión común, pero sugirió que éste no se vea como método principal para alcanzar las regiones mundiales dominadas por creencias diferentes al cristianismo.

La iglesia haría bien, urgió Lemon, en considerar intensificar la financiación de más esfuerzos alternos de alcance que puedan mostrar, al fin, ser más efectivos, tales como capacitar personal local en cómo llegar a la gente, y patrocinar pioneros de Misión Global.

Al cerrar el informe de tesorería del año fiscal 2006, el tesorero saliente de la iglesia mundial, Steve Rose, bosquejó el uso que la iglesia propone dar a su presupuesto suplementario de 10 millones de dólares para el año 2006. Los oficiales de la iglesia aprobaron asignar 2 millones de dólares del excedente para la Ventana 10/40. Los 8 millones restantes irán a varias entidades e iniciativas de la iglesia, muchas de las cuales, también, impactan directo la Ventana 10/40.

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