6 de diciembre, 2007 Binfield, Bracknell, Berkshire (Ansel Oliver y Helen Pearson/ANN)
Una conferencia de un día de duración en Newbold College, institución de la iglesia adventista del séptimo día, expone reacciones a las leyes antiterroristas –incluyendo propuestas de legislación sobre privacidad y discursos que estimulan el odio–que podrían afectar la libertad de credos religiosos en los sitios de trabajo y la sociedad.
Líderes de iglesia y expertos en libertad religiosa se reunieron el 25 de noviembre para la conferencia de «Libertad Religiosa en Europa Desde 9/11″ en el Centro Newbold para Diversidad Religiosa y Cultural.
La mesa redonda de 40 expertos y académicos incluyó un miembro de la Cámara Alta (The House of Lords), profesores de las universidades de Buckingham y Reading, junto con líderes de iglesia del Reino Unido y de la sede mundial de la iglesia cerca a Washington, D. C.
Algunos presentadores enfocaron en instancias de países adoptando o considerando legislación contra el discursar que promueve el odio, incluyendo el odio religioso. Las críticas de tales leyes han manifestado que la religión no debe ser excepción de escrutinio.
El grupo anunció también la preocupación a la resistencia moderna de prácticas religiosas, incluyendo el uso del velo islámico en algunas escuelas en Europa.
«La responsabilidad de apoyar la libertad religiosa es de todos los concernidos», dijo Jonathan Gallagher, portavoz de la iglesia adventista en las Naciones Unidas. «Negarle libertad religiosa a otros es negarla a uno mismo».
Caroline Cox, baronesa y vocera delegada de la Cámara Alta (House of Lords) de Inglaterra describió su visita a Nigeria, Sudán e Indonesia y sus observaciones respecto a los efectos de jihad (guerra de extremistas) en esos países. «Las iglesias cristianas han sido lentas para responder al asunto de la esclavitud infantil y la manipulación a la ayuda humanitaria como armas de conversión al Islam», dijo ella.
Don McFarlane, presidente de la iglesia adventista en Gran Bretaña, citó las respuestas adventistas a la legislación sobre orientación sexual en Inglaterra como un caso para estudiar a fin de considerar la reacción de la iglesia a las amenazas contra la libertad de confesiones, especialmente en las prácticas al emplear personas en instituciones de la iglesia.
McFarlane dijo que estaba animado al ver «un grupo variado de adventistas–profesionales y miembros de diferentes países –expresando preocupación por la libertad religiosa en el Reino Unido y fuera. Los adventistas del séptimo día han hecho historia al tomar el liderazgo en estos asuntos y deberíamos continuar haciéndolo».