28 de octubre de 2012 – Portland, Jamaica….Nigel Coke/IAD
En Jamaica, la Iglesia Adventista de los distritos nororientales de St. Mary y Portland recibió un duro golpe como resultado del paso del Huracán Sandy el pasado 24 de octubre de 2012.
Las estimaciones y evaluaciones preliminares han revelado que entre el 65 al 75 por ciento de las propiedades de la iglesia han sido parcial o severamente dañadas por el huracán de Categoría 1.
«Hemos sentido la ira del Huracán Sandy de una manera sumamente contundente», dijo el pastor Arlington Woodburn, presidente de la iglesia en la región Norte de Jamaica. «Todas las áreas de nuestra vida socioeconómica se han visto afectadas. A pesar de ello, agradecemos a Dios de que no se informen de muertos o heridos entre nuestros miembros y obreros».
La iglesia adventista de Boston, en la ciudad de Portland, tenía una estructura de metal sostenida por una lona y un techo de zinc que fueron demolidos. Algunos de los 62 miembros decidieron sin embargo reunirse, y llevar a cabo el culto sabático bajo un árbol de huaya (conocido también como mamoncillo o limoncillo). «Los miembros no están tristes», exclamó Damion Clarke, pastor de la iglesia de Boston. «Están regocijándose en el Señor y creen que Dios tiene un plan especial para su vida al haber permitido que suceda esto. A partir de este contratiempo, ellos están planificando un templo mejor en un terreno que les pertenezca, dado que el que tienen ahora es alquilado».
Según Clarke, el plan es volver a levantar la estructura en las próximas semanas para asegurarse de tener un techo sobre sus cabezas.
En toda la región, otros templos y algunos hogares de los miembros también han sufrido daños estructurales o parciales al techo. El campamento «Camp Don», de propiedad de la Iglesia Adventista y que se encuentra en Robins Bay (St Mary), sufrió daños hasta en el ochenta por ciento de su estructura, según las estimaciones de los dirigentes de la iglesia en la zona.
A pesar del contratiempo, la iglesia de la región nororiental está organizando esfuerzos humanitarios para ayudar a los necesitados.
«Aunque hemos sido muy afectados por la tormenta, como iglesia estamos organizando la ayuda para personas que necesitan alimentos, prendas de vestir y reparación de techos, gracias a la colaboración del departamento de servicios comunitarios, diversos grupos de servicio y la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) en Jamaica», dijo Clarke.
Mientras tanto, el pastor Woodburn está solicitando la ayuda de generadores para las oficinas administrativas de la Asociación y el campamento.
En el distrito de Portland, en la región nororiental, alrededor del 45 por ciento de los miembros han estado entre los más afectados por el Huracán Sandy, que ha arrasado con todo, dejando un sendero de destrucción. Muchas partes de esa sección de la isla aún carecen de electricidad, y algunas de las rutas se encuentran en estado intransitable como resultado de los daños o de la caída de árboles y postes de electricidad. Los techos de algunos hogares, iglesias y empresas también se han visto afectados por la catástrofe, y lo mismo se aplica a las comunidades agrícolas de la región.
Los líderes de la iglesia aún están evaluando los daños por cuestiones de aseguración, añadió Woodburn. La región Nororiental de Jamaica cuenta con aproximadamente 28.000 miembros que se reúnen en 103 congregaciones en los distritos de St. Mary y Portland.
Traducción de Marcos Paseggi