Más de 600 mujeres dirigentes adventistas, de la iglesia en Interamérica, se reúnen para celebrar la histórica Convención de Ministerio de la Mujer, en Miami, Florida, del 29 al 31 de agosto de 2013. Imagen por Abel Márquez- DIA

3 de septiembre de 2013 – Miami, Florida, Estados Unidos…Libna Stevens-DIA

El acercamiento a la comunidad ocupó un lugar central durante la más grande Convención de Ministerio de la Mujer celebrada en Miami, Florida, la semana pasada.

Más de 600 mujeres dirigentes adventistas se reunieron a fin de ser habilitadas para aceptar el serio desafío de conectarse con otros fuera de sus Iglesias, grupos pequeños y hogares.

Cecilia Iglesias, directora de Ministerio de la Mujer en Interamérica, apeló a las mujeres dirigentes a continuar su visión de permitir que el mundo sepa acerca del amor de Jesús. Imagen por Libna Stevens/DIA

“Estamos unidas en la visión de dejar que el mundo sepa acerca del amor de Jesús”, dijo Cecilia Iglesias, directora de Ministerio de la Mujer de la iglesia en Interamérica y principal organizadora del evento. “Debes ser un testigo al servir a quienes lo necesitan en dondequiera que estés, manteniendo una estrecha relación con Jesús y actuando como él actuó”.

Ese mensaje fue dirigido no solamente al selecto grupo de mujeres dirigentes presentes en la convención, sino que tenía el propósito de llegar hasta aproximadamente 2.4 millones de activas mujeres dirigentes en la iglesia, en las más de 10,000 iglesias esparcidas por las 22 regiones de la iglesia en México, Centroamérica, el Caribe, Indias Occidentales, Antillas Francesas, Colombia y Venezuela, dijeron las organizadoras.

La convención no se ocupó solamente de sustentar espiritualmente a las asistentes, dar reconocimiento a mujeres dirigentes de actuación sobresaliente, de interconexión y entrenamiento, sino también de presentar un desafío a las mujeres dirigentes adventistas en Interamérica a permanecer firmes en su compromiso de evangelizar a través de sus ministerios y actividades.

“Hemos sido llamados a servir, y cuando el Señor te llama a servirle, no permitas que nadie te convenza de que porque eres una mujer, las cosas tienen que ser diferentes”, dijo el Pastor Israel Leito, presidente de la iglesia en Interamérica, al reflexionar sobre las mujeres fuertes mencionadas en la Biblia.

“Las mujeres añaden fortaleza a la misión”, dijo el Pastor Leito. “No permitan que su sensibilidad, su consideración y cuidado, su espíritu compasivo, su actitud solícita y sus fuertes emociones, se vean como debilidad”.

“Esta es la iglesia de Dios, esta es tu iglesia, así que nunca te olvides de cumplir tu misión en esta iglesia”, añadió el Pastor Leito.

La misión de traer a 40,000 nuevos miembros a la iglesia es un blanco que tiene a mujeres de todo el territorio de Interamérica trabajando con el propósito de lograrlo para el final de este año, de acuerdo con Cecilia Iglesias.

Dijo además que más de 22,000 nuevos miembros han sido traídos a la iglesia como resultado directo del trabajo de mujeres adventistas en marzo de este año. Y se esperan aún más en el 2014, cuando la iglesia mundial se movilice más en su enfoque de llevar el evangelio a las grandes y pequeñas ciudades en todas partes.

Ese nuevo enfoque de llegar a todas esas comunidades y ciudades debe utilizar diferentes métodos de evangelización, dijeron las dirigentes.

La directora mundial del Ministerio de la Mujer de la Iglesia Adventista, Heather-Dawn Small, instó a las mujeres a salir de su elemento donde se sienten cómodas y acercarse a la gente en la comunidad.
Imagen por Libna Stevens -DIA.

“Cuando se trata de evangelizar como iglesia, estamos descubriendo que no siempre podemos hacerlo de la misma manera”, dijo Heather-Dawn Small, directora de Ministerio de la Mujer de la iglesia adventista mundial. “Necesitamos salir de nuestro elemento donde nos sentimos cómodas y acercarnos a la gente de la comunidad”.

Se trata de salir del edificio e ir a la comunidad, enfatizó la directora mundial.

“Dios nos está llamando a “tocar vidas”, a tener contacto, no se trata solamente de predicar, no solamente de enseñar; no es solamente dar un estudio bíblico, es ministrar en favor de la gente, mezclándose entre ella y trayéndola a los pies de Jesús”, añadió la directora mundial.

Relacionarse con las personas significa identificarse con las necesidades de la gente en la comunidad, aprendiendo qué es lo que creen, cuáles son sus valores y entendiendo su dolor a fin de que puedan ser ayudadas, explicó la directora mundial.

También les recordó a las mujeres dirigentes su papel a desempeñar a fin de crear conciencia y defender la causa de poner fin a la violencia hacia la mujer y los niños a través de la iniciativa adventista EnditNow EnditNow. Animó además a las mujeres a inspirar a otros a involucrarse y participar en programas de alfabetización, servicios a la comunidad, centros de salud, evangelismo de la amistad y a conectarse con las mujeres de su comunidad.

Raquel Arrais, directora asociada de Ministerio de la Mujer de la iglesia adventista mundial, les habló a las mujeres sobre la conexión con Dios y otros al seguir el llamado a esparcir la esperanza, independientemente de experimentar muchos temores como mujeres dirigentes.

Raquel Arrais, directora asociada de Ministerio de la Mujer de la iglesia mundial, alentó a las mujeres a sobreponerse a sus temores y debilidades y usar sus capacidades y talentos peculiares para dirigir con el corazón, con Dios y con su Santo Espíritu. Imagen por Libna Stevens/IAD

“Tienes que ser una mujer valiente para vencer sobre el cansancio, el dolor, las dudas, el temor a fallar en el matrimonio, como madre, como dirigente, como amiga, y aferrarte de tu relación personal con Dios”, dijo Raquel Arrais. “El temor paraliza tu potencial, así que debes continuar avanzando a pesar de tus temores y continuar tu misión de compartir con otros la esperanza”.

Raquel Arrais desafió a las mujeres a vencer sus temores y debilidades y usar sus capacidades y talentos peculiares para dirigir con el corazón, con Dios y con su Santo Espíritu.

Para María Lourdes Alemán, aceptar y reconocer sus temores y permitir que Dios aleje de ella su dolor, al dirigir a más de 20,000 mujeres en la región Central de Nicaragua, ha sido un gran desafío durante los últimos cinco años. María Lourdes perdió a su hijo de 15 años de edad por causa de una enfermedad y admite haber llorado su muerte y sobrevivido a través de ello en su matrimonio y el cuidado de sus otros dos hijos. Solamente fue capaz de sobrevivir al aferrarse a las promesas de Dios contenidas en la Biblia. Sin embargo, siente que hay algo más aun, al reflexionar en los mensajes de Raquel Arrais.

“Necesitamos permitirle al Espíritu Santo que obre en nosotros y a través de nosotros, a fin de que podamos dirigir en forma más eficaz al acercarnos a la vida de los demás”, dijo María Lourdes. Es un descubrimiento, añadió, refiriéndose a aquel por el que pasó a través del dolor y la aflicción y que la ha ayudado a ministrar de corazón en favor de muchos que han sufrido la pérdida de un ser amado.

Delegadas del Norte de México oran juntas durante una de las varias sesiones de oración durante la convención. Imagen por Libna Stevens

La convención incluyó seminarios para las mujeres sobre fortalecimiento de su hogar, sobre cómo alcanzar a personas de diferentes idiomas y culturas, sobre reavivamiento espiritual, ética y liderazgo, creación de grupos pequeños, evangelización de persona a persona, así como varias sesiones de oración.

Norma Villegas, directora de Ministerio de la Mujer de la iglesia en el Norte de México, se sintió inspirada con la posibilidad de que las 9,000 mujeres dirigentes que supervisa en 14 estados de la república, puedan conectarse cada una con una persona.

“Como sabemos, algunas veces pensamos en cubrir tanto, cuando simplemente, al conectarnos con alguien en nuestro vecindario o comunidad, puede eventualmente dar como resultado que a largo plazo, una persona se una a la iglesia”, dijo Norma Villegas. Dijo también que ella no fija blancos de evangelización en su territorio, porque en las ciudades postmodernistas del Norte de México, los métodos tradicionales de evangelización no surten mucho efecto en la población.

El enfoque de Norma Villegas es entrenar a las mujeres a través de seminarios semanales virtuales con sus líderes, sobre enriquecimiento de su vida espiritual y sobre cómo conectarse en forma más eficaz con mujeres profesionales de clase alta en el Norte de México. Lo que nos ha funcionado en la ciudad de Monterrey es impartir clases de cocina vegetariana en restaurantes y otros lugares clave, añadió.

Además, la convención la ha motivado a enlistar a más mujeres y atraerlas hacia el ministerio de Dorcas y de servicio a la comunidad, para ejercer un impacto mayor en cárceles, centros de adicción, asilos de ancianos y hospitales en el territorio que supervisa.

La evangelizadora Mildred Robinson (derecha), de St. Thomas, posa con Cecilia Iglesias (izquierda) al recibir un reconocimiento por su liderazgo en la evangelización, que ha traído a más de 3,000 nuevos miembros a la iglesia. Ella fue parte del grupo de 44 mujeres que fueron honradas durante una ceremonia especial el sábado 31 de agosto de 2013. Imagen por Libna Stevens/IAD

Durante el evento, se reconoció a 44 mujeres por su liderazgo sobresaliente en la evangelización.

Entre ellas se encontraba Mildred Robinson, de St. Thomas, por conducir 32 campañas de evangelización y guiar a 3,000 nuevos creyentes a la iglesia en el Caribe y otras partes del mundo. Mildred Robinson, quien es anciana ordenada y predicadora laica, alentó a las mujeres presentes a llegar a su potencial máximo en la labor de esparcir el evangelio.

En su experiencia, la labor de conectarse con las necesidades de la comunidad, tales como en casos de divorcio y adicción a drogas, ha ayudado en el éxito de las campañas de evangelización, dijo Mildred Robinson.

Dijo además: “Simplemente necesitamos ser bondadosos con las personas y acercarnos a suplir sus necesidades en su sufrimiento. A veces, como iglesia, tendemos a reservarnos tanto”, añadió.

El reservar las cosas solo dentro de la iglesia es precisamente el mensaje del cual las dirigentes de Ministerio de la Mujer desean alejarse.

“Deseamos dar a conocer que los adventistas somos personas que amamos y cuidamos de la gente, que deseamos ayudar a los demás y qué sí, deseamos que la persona sea salva, pero también que su estómago esté lleno, y deseamos saber que se ha aliviado su dolor. Queremos ser como Jesús”, indicó la directora mundial al concluir la convención.

“Todos podemos ser testigos en favor de Jesús y mantener ardiendo la flama de la predicación del evangelio”, señaló Cecilia Iglesias, al mencionar los proyectos próximos de enlistar a mujeres adventistas jóvenes para trabajar en conjunto con la Agencia de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) y continuar certificando a miles de mujeres dirigentes para un mayor impacto evangelizador en el 2014.

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Traducción por Gloria A. Castrejón

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