En Colombia, la Iglesia Adventista prepara a los niños para ser los líderes del futuro
Los niños y adolescentes de iglesias locales de los siete campos regionales de la región Colombiana del Norte demuestran sus conocimientos de las doctrinas bíblicas, y predican y cantan en frente a una congregación numerosa, durante un programa donde mostraron sus talentos especiales, en el Auditorio de la Universidad Adventista de Colombia en Medellín, Colombia, el pasado 1 de noviembre de 2014. Imágenes de Shirley Rueda
13 de noviembre de 2014 | Medellín, Colombia | Shirley Rueda/DIA
Zoraida Pérez, directora de Ministerios del Niño y el Adolescente de la Iglesia Adventista en la región Colombiana del Norte, habla a los finalistas durante la competición de talentos del pasado 1 de noviembre de 2014.
La preparación de los niños y adolescentes para el liderazgo en la iglesia es algo que los líderes de la Iglesia Adventista en la región Colombiana del Norte toman muy en serio, dado que decenas de jóvenes de la región participaron en una muestra de talentos en Medellín, Colombia, el pasado 1 de noviembre de 2014.
La competencia anual reunió a niños y adolescentes de las iglesias locales de los siete campos de la región Colombiana del Norte, para que demostraran sus conocimientos de las doctrinas bíblicas, predicaran y cantaran frente a una gran congregación en el Auditorio de la Universidad Adventista de Colombia.
Mientras algunos finalistas respondían una serie de preguntas en terminales informáticas, otros predicaron ante un panel de jueces sobre el sábado como día de reposo. Varios solistas y grupos musicales también mostraron sus talentos.
«El día dio énfasis al hecho de que la iglesia tiene un futuro maravilloso si sigue cultivando los dones y talentos que poseen los niños», dijo Zoraida Pérez, directora de Ministerios del Niño y el Adolescente de la Iglesia Adventista en la región Colombiana del Norte y organizadora del evento.
Un joven predicador participa en la demostración de talentos.
“Creemos que la capacitación e inspiración de los miembros más jóvenes de nuestras iglesias para colaborar con la misión de predicar el evangelio es fundamental para preparar a la nueva generación de líderes», dijo Pérez, quien agregó que hay cientos de padres y líderes de los ministerios del niño y el adolescente que trabajan arduamente para enseñar a los niños de Jesús y de cómo servir a la iglesia así como él lo hizo.
Melisa Arteaga García, quien obtuvo el primer lugar en la categoría de niños predicadores, dijo sentirse feliz por haber ganado, pero mayormente porque pudo tocar los corazones de los que asistieron al evento. «Cuando predico, siento el poder de Dios y su Espíritu a mi lado».
Liliana Landazabal fue la ganadora en la competencia de doctrinas bíblicas, y dijo sentir que era más que ganadora, dado que mientras estudiaba su Biblia, aprendió muchas cosas y también a orar más.
En una época cuando los padres están tan desconectados de sus hijos, y no suelen invertir en educarlos con valores cristianos por sobre todas las cosas, el programa enfatizó el éxito que pueden tener tanto los padres como los líderes de los ministerios del niño y el adolescente si trabajan juntos para moldear la vida de los niños en la iglesia, dijo Dinorah Rivera, directora de Ministerios del Niño y el Adolescente de la Iglesia Adventista en Interamérica.
Dinorah Rivera, directora de Ministerios del Niño y el Adolescente de la División Interamericana, dijo que invertir en acontecimientos como este ayuda a motivar a los niños para que mejoren sus capacidades de servir a la iglesia.
“No solo estamos ayudando a nuestros niños a prepararse para ser los líderes de la iglesia en el futuro gracias a estas iniciativas y actividades, sino que también estamos mejorando sus capacidades de servir a la iglesia en el presente», dijo Rivera, que ha participado en decenas de eventos de capacitación de niños y adolescentes en diversos lugares de Interamérica tan solo este año. «Invertir en la capacitación de los niños significa preservar a la iglesia en el presente y el futuro».
Natalia Salcedo obtuvo el principal premio musical, y todos los demás finalistas que participaron recibieron también premios, además de verse motivados a continuar usando sus talentos en las iglesias de sus comunidades.
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Traducción de Marcos Paseggi