13 de marzo de 2015 | Quiche, Guatemala | Andrew McChesney, editor de noticias, Adventist Review, y Libna Stevens/DIA
Un hombre de 110 años de Guatemala bien podría ser el más anciano que ha sido bautizado en la Iglesia Adventista del Séptimo Día y un ejemplo, dijeron los líderes de la iglesia, de que jamás es demasiado tarde para aceptar a Cristo.
Joaquín Tzoc y su nueva esposa, Petronilla, de 98 años, se convirtieron en los primeros de su extensa familia en unirse a la Iglesia Adventista, cuando fueron bautizados en el pueblo montañoso de San Andrés Sajcabajá, cerca de la frontera con México.
“Los líderes de la iglesia recordaron a los que fueron testigos del bautismo que jamás es demasiado tarde para entregar la vida a Cristo», dijo Gustavo Menéndez, director de comunicación de la Iglesia Adventista en Guatemala.
A sus 110 años, Tzoc tiene la misma edad que el José de la Biblia cuando falleció. Moisés, el líder israelita, solo tenía diez años más cuando ascendió al Monte Nebo, miró con gran anhelo a la Tierra Prometida que estaba más abajo, y falleció.
Tzoc nació en 1905, el año en que Albert Einstein introdujo su famosa ecuación E = mc2, y el zar Nicholas II desactivó una revolución sangrienta en el Imperio Ruso.
También en 1905 nacieron Howard Hughes, el magnate estadounidense que falleció en 1976, y María von Trapp, la cantante austríaca que fue la inspiración del musical «La novicia rebelde» (falleció en 1987).
Elena G. White, una de las fundadoras de la Iglesia Adventista, aún estaba viva, y seguiría escribiendo y predicando por una década más.
Los miembros de iglesia visitaron a Tzoc en muchas ocasiones en su hogar remoto en las montañas a lo largo de los años, pero él siempre rechazó la idea del bautismo o de contraer matrimonio con su compañera, con quien había vivido durante décadas. Decía que era demasiado tarde para casarse, porque ya era muy viejo.
Entonces se enfermó y perdió la vista.
«Los hermanos le dijeron que Dios usó su situación», dijo Menéndez. «Así fue que se casó, y se bautizaron juntos».
Decenas de personas de la iglesia adventista Agostadero se agolparon alrededor de una piscina, en la que el pastor Aníbal Pérez y otro miembro de iglesia ayudaron a Tzoc para que pudiera ingresar a las cristalinas aguas a fines de enero. Él y su esposa fueron bautizados el mismo día.
El matrimonio tiene cinco hijos y veinte nietos.
La Iglesia Adventista no lleva una estadística de los centenarios que son bautizados, dijo David Trim, quien está al frente de la Secretaría de Archivos, Estadísticas e Investigaciones de la iglesia.
«No recolectamos estadísticas de muchas cosas», dijo el viernes. «Esta sería una estadística interesante».
Traducción de Marcos Paseggi