2 de abril de 2015, por Jarrod Stackelroth, South Pacific Adventist Record
El número de templos adventistas destruidos por el huracán tropical Pam se ha elevado, de 18 a 53, mientras los dirigentes de la iglesia consideran el costo de la tormenta que afectó el 14 de marzo a la República de Vanuatu, en el Pacífico Sur.
Fueron además destruidos muchos edificios en seis escuelas adventistas y cientos de miembros de iglesia perdieron sus hogares, incluyendo 20 pastores y 100 maestros.
Los diezmos y las ofrendas disminuirán significativamente durante algún tiempo, siendo que de un ochenta a un noventa por ciento de los miembros de iglesia practican la agricultura de subsistencia dentro de una economía basada en cultivos comerciales pagados en efectivo. Para muchos, sus cultivos, y con ellos su sustento, han desaparecido totalmente y se espera que su recuperación tome un buen tiempo.
“Muchas Iglesias, tanto en forma permanente, como semipermanente y temporariamente, han sido destruidas, algunas en forma parcial y otras completamente”, dijo Nos Terry Mailalong, presidente de la Iglesia Adventista de la Misión de Vanuatu.
Mientras el gobierno podría proveer apoyo para la reconstrucción de las escuelas; y las agencias tales como ADRA se esfuerzan por mantener a la gente alimentada y bajo techo, no hay dinero para reconstruir los templos que han sido destruidos.
La Misión de Vanuatu solamente contaba con seguro para su oficina principal en la capital local de Port Vila.
Los dirigentes de la Iglesia Adventista en esta región del Pacífico solicitan las oraciones y el apoyo en favor de la iglesia en Vanuatu, al comenzar el proceso de reconstrucción.
“Vamos a necesitar que nuestros hermanos y hermanas nos ayuden a reconstruir por lo menos nuestras iglesias y escuelas, sin mencionar nuestros hogares”, dijo el presidente Terry Mailalong. La amplitud del daño está más allá de nuestras capacidades”.
Los pastores de todas las asociaciones ministeriales de la División del Pacífico Sur y de la Unión Asociación Australiana están ayudando a proveer Biblias y libros para aquellos pastores que han perdido sus recursos; y las escuelas adventistas de toda Australia esperan hacer lo mismo en favor de los maestros y las escuelas.
Se ha establecido un fondo al cuidado de la División del Pacífico Sur para ayudar en la reconstrucción de las iglesias y escuelas adventistas que han sufrido daños. Esas donaciones no son deducibles de impuestos y pueden hacerse llegar a través del sitio electrónico Adventist eGIVING, bajo la opción denominada “Vanuatu Cyclone Pam Assistance” (Asistencia con respecto al Ciclón Pam en Vanuatu).
ADRA ha establecido también un fondo de ayuda en relación al Desastre en la República de Vanuatu, pero el dinero donado a este fondo financiero se utilizará para apoyar los proyectos de ADRA en Vanuatu y no para reconstruir templos.