13 de abril de 2015 | San Antonio, Texas, Estados Unidos | Andrew McChesney – Adventist Review
Un total de 6,192 personas recibieron más de 10 millones de dólares en forma de cuidados de salud adventistas en forma gratuita, en el estadio de San Antonio, informaron los organizadores el viernes, al perfilarse ahora hacia la siguiente mega clínica gratuita en el Estado de Washington, Estados Unidos, este verano.
La lluvia torrencial del viernes de mañana no impidió que más de 1,700 médicos, dentistas y otros voluntarios atendieran a centenares de pacientes para concluir tres días de trabajos en el estadio Alamodome.
“Este evento tuvo un éxito tremendo”, dijo a la Adventist Review Costin Jordache, un vocero del evento Your Best Pathway to Health (Tu mejor camino hacia la salud).
“1,700 cristianos adventistas de todos los Estados Unidos saturaron prácticamente la ciudad de San Antonio con tangible amor cristiano y trajeron esperanza y sanidad a más de 6,000 residentes de esta ciudad”, dijo Costin Jordache. “No podríamos estar más emocionados”.
Este evento se propuso presentar a la Iglesia Adventista del Séptimo Día a los residentes de la ciudad de San Antonio, justamente antes de la gran reunión de negocios de la iglesia, la sesión de la Asociación General que se celebrará en el mismo estadio en el mes de julio.
La clínica dio pie a una amplia cobertura de los medios de comunicación locales y un diluvio de palabras de amable reconocimiento por parte de pacientes agradecidos y de la alcaldesa de San Antonio, Ivy Taylor.
“Una excelente visita ayer al evento ‘Your Best Pathway to Health’, celebrado en el Alamodome,” fue el mensaje enviado por Twitter un par de horas antes de cerrar la clínica el viernes de tarde.
Durante una visita guiada el jueves, la alcaldesa Ivy Taylor conversó con voluntarios y habló con pacientes en la larga fila que se extendía en torno al edificio.
“Deseo agradecer a la Iglesia Adventista del Séptimo Día por traer este estupendo recurso a nuestra comunidad”, dijo la alcaldesa en una entrevista grabada en vídeo por la División Norteamericana, coorganizadora del evento. “Puede verse cuántas personas están aquí para aprovechar las ventajas de estos cuidados de salud gratuitos”.
Calculando las cifras
La gente comenzó a formarse en fila el martes al mediodía, mucho antes de que la clínica abriera a las 7:00 a.m. del miércoles; y centenares esperaron afuera las noches subsiguientes.
La alcaldesa le había pedido a Your Best Pathway to Health —el principal organizador, el cual constituye un servicio de ASI (Servicios e Industrias de Laicos Adventistas), que atendieran por lo menos a 6,000 personas a cambio de usar el estadio sin costo alguno.
Los voluntarios fueron más allá de las expectativas al atender a 2,617 pacientes para el tiempo en que se cerraron las puertas el primer día, a las 4:00 p.m. El segundo día se atendió un total de 2,025 pacientes, y un total de 1,550 el tercer día, en que la clínica operó solamente hasta las 2:00 p.m., dijo C. Jordache, vicepresidente de Comunicación de la Asociación Central de California de la Iglesia Adventista.
Los cirujanos llevaron a cabo 360 operaciones quirúrgicas —300 cirugías sencillas en el mismo Alamodome, y 60 más complejas en el Central Texas Medical Center, que es parte del Sistema Adventista de Salud y copatrocinador del evento, añadió el vocero.
Las fuertes lluvias no lograron afectar los trabajos del último día de la clínica, añadió. La administración del Alamodome invitó a los cientos de personas que esperaban afuera, a entrar al edificio siguiendo filas acordonadas que serpenteaban dentro del estadio.
“Estamos muy agradecidos con Alamodome al organizar esta medida, dijo.
Dijo también que se iban a necesitar varios días para computar el valor exacto de los cuidados de salud provistos en la ciudad de San Antonio.
“Your Best Pathway to Health” (Tu mejor camino hacia la salud) está haciendo ahora los preparativos para su tercera clínica gratuita de dos días de duración, en Spokane, Washington. Esta clínica, a llevarse a cabo el 3 y 4 de agosto, coincidirá con la convención anual ASI, que se celebrará también en esa ciudad de 200,000 habitantes. Los organizadores no han determinado todavía a cuántas personas prestarán servicios en Spokane.
La primera clínica gratuita proveyó servicios para casi 3,000 personas, con un costo de 5.2 millones de dólares en servicios de salud gratuitos en San Francisco y Oakland, California, en abril de 2014.
Frustración y Gratitud
El montaje de este enorme acontecimiento en San Antonio se desarrolló sin mayores complicaciones, aunque varias personas escribieron a la Adventist Review para expresar su frustración acerca de las largas filas y lapsos percibidos en la comunicación.
“Este evento fue realmente un tanto injusto para las personas que esperaban en la fila para servicios dentales”, escribió una persona el viernes, en respuesta a un artículo de la Adventist Review acerca de este evento. “La gente esperó durante horas, solamente para que se le dijera que los turnos ya estaban tomados por la otra fila”.
Las filas de espera se dividían en dos: una para los servicios dentales y la otra para la atención médica. La fila para servicios dentales fue significativamente más larga durante todos los tres días.
“Esperé en la fila desde las 5:00 a.m. hasta la 1:00 p.m.”, escribió otra persona. “Les tomó considerable tiempo informarnos que ya no iban a tomar más pacientes…tal vez el año entrante”.
Costin Jordache dijo que los voluntarios hicieron lo mejor que pudieron para coordinar el flujo de miles de personas y de alertar con buena anticipación a aquellos al final de las filas, antes de cerrar las actividades cada día, acerca de que no tenían ya muchas posibilidades de recibir tratamiento. Los voluntarios les comunicaron a aquellos que no tenían ya probabilidades de recibir el tratamiento deseado, acerca de los servicios con filas de espera más cortas y animaron a las personas a considerar cambiar de tratamiento.
Sin embargo, muchos pacientes estuvieron llenos de gratitud, incluyendo a una mujer de 60 años que escribió a la Adventist Review para brindar “muchas, pero muchísimas gracias”.
“Necesitaba atención médica y un par de lentes y estoy extremadamente feliz y agradecida con la atención recibida”, dijo esta mujer, quien solamente dio su nombre de pila, Celia.
“Tengo 60 años, no tengo seguro médico y actualmente mi ingreso es sumamente bajo”, escribió. “He procurado en vano atención médica de bajo costo en esta zona, pero no había podido encontrar ninguna. Solo quiero que sepan que su bondad y su ayuda son grandemente apreciadas”.