Asistentes escuchan la discusión sobre el tema de la ordenación de la mujer en el Congreso de la Asociación General el miércoles pasado. Imagen de Elsie Tjeransen

Publicado el 10 de julio de 2015 | San Antonio, Texas, Estados Unidos | Andrew McChesney, Adventist Review/ANN

El presidente de la Asociación General Ted N. C. Wilson dijo el viernes que el voto que se tomó esta semana sobre el tema de la ordenación de las mujeres significa que “se mantienen los reglamentos en vigencia”.

Wilson dijo a los delegados al Congreso de la Asociación General en San Antonio, Texas, Estados Unidos, que el voto el miércoles simplemente establece que las divisiones no pueden tomar decisiones sobre la ordenación de la mujer.

Wilson dijo que el voto no tiene nada que ver con la ordenación de las mujeres como ancianas de iglesia, una práctica que se basa en los reglamentos que la iglesia tiene en vigencia hace varias décadas.

Asimismo, expresó, el voto no estuvo relacionado con los ministros comisionados que, según los reglamentos de la iglesia, pueden ser hombres o mujeres.

“De manera que, tengamos en claro lo que se votó el miércoles”, dijo Wilson. “Ahora estamos de regreso a nuestra comprensión original, por lo que insto claramente a todos a que se adhieran a lo que se ha votado. Pero no coloquen en el voto otras cosas que no son mencionadas en él. Necesitamos ser justos, necesitamos ser abiertos, y necesitamos aceptar lo que se votó en el Congreso de la Asociación General”.

Wilson pidió a los presidentes de división que clarifiquen el significado del voto del miércoles en sus territorios.

Poco después de que Wilson habló, el presidente de la División Norteamericana, Daniel R. Jackson, dio a conocer una declaración diciendo que la división “acatará el voto de la iglesia mundial”.

Jackson dijo que la división reconocía que “el voto prohibió a las trece divisiones de la iglesia que tomen sus propias decisiones en relación con la consideración la potencial implementación de la ordenación de las mujeres al ministerio evangélico”.

A pesar de ello, añadió, la moción no impide que las mujeres trabajen como pastoras de iglesia comisionadas, ni que sean ancianas ordenadas en la iglesia local, o que sean ordenadas como diaconisas.

“Dado que la moción no impide estas cosas, seguimos por lo tanto animando a las que han estado cumpliendo funciones en algunos de esos cargos a que lo sigan haciendo”, dijo Jacson.

Y añadió: “Es vital entender que la División Norteamericana continuará siguiendo las directivas que se encuentran en el Manual de Reglamentos Eclesiástico-Administrativos de la Asociación General, que permite que las asociaciones y uniones otorguen una licencia a las mujeres como ministras comisionadas en el ministerio pastoral. También continuaremos estimulando la utilización de los servicios de las mujeres como ancianas locales y diaconisas ordenadas”.

El viernes, Wilson dijo que ha pedido a las divisiones que atiendan las cuestiones específicas que han surgido en sus territorios. No dio mayores aclaraciones, diciendo tan solo que los líderes de la Asociación General esperaban que todo anduviera bien, y que esperaba la ayuda de las divisiones en esas cuestiones.

Wilson también dijo que los líderes de la división tienen el espíritu de respetar lo que la Asociación General vota durante sus congresos.

Las decisiones tomadas durante un Congreso de la Asociación General tienen la más alta autoridad dentro de la iglesia.

Wilson, mientras tanto, buscó poner fin a las preocupaciones de algunos miembros de la iglesia, que piensan que una revisión al “Manual de la iglesia”, que los delegados aprobaron horas antes ese viernes, podría limitar la autoridad o las actividades de la Asociación General.

“La razón de esta redacción es prevenir que cualquier […] apelación frívola pase por todo el sistema”, dijo Wilson.

La enmienda da a las divisiones el derecho de poner fin a una disputa antes de que llegue al nivel de la Asociación General. Los niveles en los que puede considerarse una apelación en la división incluyen a la iglesia local, la asociación y la unión correspondientes.

Wiolson dijo que de todas maneras, la Asociación General suele trabajar por medio de las divisiones y sus varios niveles para resolver las apelaciones.

“De manera que, por favor, no imaginen cosas que, en mi opinión y mi forma de ver la situación, jamás están allí”, dijo.

Traducción de Marcos Paseggi

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