4 de agosto de 2015 | Birmania | Myo Chan y Teresa Costello, ANN, y Adventist Review
Los obreros asistenciales adventistas están distribuyendo alimentos y otros artículos esenciales en Birmania después de que una gran inundación se cobró la vida de al menos 46 personas y afectó a más de 210 mil.
La inundación, que es producto de seis semanas de las lluvias del monzón, también dañó al menos 32 iglesias adventistas, muchas de las cuales están sumergidas bajo el agua.
El gobierno de este país sudasiático ha apelado a la comunidad internacional para que lo ayuden a enfrentar los resultados de la catástrofe.
«Dado que se pronostican más lluvias del monzón para este mes, la Iglesia Adventista de Birmania está preparada para continuar sus tareas asistenciales y llevar el consuelo de Cristo a los que están en crisis», expresaron en una declaración los líderes de la iglesia.
No se pudo saber inmediatamente detalles sobre los daños que sufrieron los templos adventistas. Los miembros de iglesia se dedicaron a ayudar a los que perdieron todo en la inundación antes que ocuparse de sus iglesias, dijeron los líderes.
Voluntarios de Servicios Comunitarios Adventistas han distribuido artículos esenciales a unas quinientas personas en cuatro zonas occidentales que se han sido declaradas zonas catastróficas.
Los líderes de la iglesia local están en coordinación con Servicios Comunitarios Adventistas para enviar médicos y obreros de salud que puedan ofrecer su ayuda, dijo Than Tun Aye, tesorero de la Iglesia Adventista en la Misión Central de Birmania.
Los voluntarios también están organizando un plan de distribución de alimentos para dos mil personas desplazadas por las inundaciones en el sudeste.
Mientras tanto, la sede de la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales en Birmania está trabajando con equipos del gobierno y grupos no gubernamentales para brindar una respuesta conjunta a la emergencia, lo que incluye alimentos y agua, para satisfacer necesidades o cubrir huecos que haya en la ayuda, dijo Brendon Irvine, el director de ADRA Birmania.
«También se ha planificado una respuesta más abarcadora de la red de ADRA Internacional de hasta cincuenta mil dólares una vez que emerjan detalles más claros sobre las necesidades continuadas de la gente», dijo.
Traducción de Marcos Paseggi