30 de marzo de 2016 | Philipsburg, San Martín | Royston Philbert/DIA
Un Café Bíblico en la isla caribeña de San Martín Neerlandesa está contribuyendo para que los jóvenes sigan interesados en estudiar la lección de Escuela Sabática cada semana. Ya durante casi un año, más de una veintena de adultos de la iglesia adventista de Philipsburg dedican tiempo a saborear juntos la Palabra de Dios y conectarse en un ambiente que enfatiza la amistad.
El Café Bíblico funciona una vez al mes, y es parte del ministerio para los jóvenes que está a cargo de la clase de Escuela Sabática de Jóvenes. “Es una atmósfera relajada en la que compartimos nuestras perspectivas y hallamos un verdadero amigo en Cristo”, dijo Kimasha Williams, que es maestra de la Escuela Sabática de Jóvenes y una de las organizadoras del Café Bíblico. “Todo comenzó cuando nos dimos cuentas de que necesitábamos otra manera de hacer que los jóvenes se interesaran en la lección de la Escuela Sabática, por lo que comenzamos la clase el viernes por la noche.
Es más que un café, dijo Williams. “Es un ministerio misionero con los jóvenes de nuestras congregaciones y comunidades”, añadió.
El café también ha hecho que jóvenes de otras congregaciones adventistas también se acerquen para analizar temas de importancia para ellos y que les ayudan a edificar su fe. Las sesiones son dirigidas por jóvenes que entienden la necesidad de experimentar un encuentro personal con Dios. “Ministrar a los corazones de los demás, orar y estudiar la Biblia son privilegios sagrados”, dijo Kevin Simon, que es maestro de la Escuela Sabática”. “Los ángeles están presentes y llegan al corazón y dirigen a las personas hacia Cristo, de manera que estamos involucrando a los jóvenes para que analicen juntos la lección de Escuela Sabática y otros temas”.
Vashni Cuvalay, pastor de la iglesia adventista de Philispburg, señala que el principal beneficio que brinda el Café Bíblico a la iglesia es la oportunidad de establecer una buena relación con los jóvenes, y esto les ayuda a cimentar su fe al tiempo que crecen en Cristo. “Ellos se están preparando para contribuir al progreso de la iglesia”, añadió. “En un mundo lleno de odio, violencia y sufrimiento, Dios nos está ofreciendo su don de la vida eterna”, dijo Clara George, una de las jóvenes líderes. “Si podemos mostrar el amor que Cristo tiene por nosotros, los corazones responderán a ese amor y sentirán deseos de seguirlo de conformidad con la conducción divina”.
Aunque en el presente al Café Bíblico asisten mayormente los miembros de la iglesia, esta iniciativa está abierta también a cualquier joven de la comunidad de entre 18 y 35 años, además de los jóvenes de las otras seis congregaciones de la isla.
Traducción de Marcos Paseggi