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Dwayne Leslie inaugura la Cumbre Internacional de Libertad Religiosa 2016 en Washington. Imágenes de María Bryk/Newseum

26 de mayo de 2016 |  Washington D.C., Estados Unidos | Bettina Krause

En medio de un deterioro de la libertad religiosa en diversas partes del mundo, la Iglesia Adventista reunió a una amplia base de organizaciones defensoras de la libertad religiosa y líderes de gobierno para analizar maneras de hacer que el tema ocupa un lugar más destacado en la agenda pública.

La Cumbre Internacional de Libertad Religiosa 2016, llevada a cabo Centro de Libertad Religiosa del Newseum en el centro de Washington D.C., se enfocó en lo que ha llegado a ser una preocupación clave para los defensores de la libertad religiosa: la relativamente escasa atención de los medios y política que se da a los crecientes índices de discriminación y persecución religiosas.

El Centro de Investigaciones Pew estima que en el mundo, unos 5 mil millones de personas en el mundo sufren restricciones significativas a la libertad religiosa, y una de cada tres personas vive en lugares donde la libertad religiosa está seriamente restringida.

“Hay clamores de los perseguidos que nos rehusamos a oír”, dijo Frank Wolf, ex miembro del Congreso de los Estados Unidos y uno de los oradores destacados en la conferencia.

Wolf, un importante defensor de leyes contra la libertad religiosa durante los 36 años que pasó en el Congreso, ahora trabaja en estrecha colaboración con la Iniciativa Wilberforce para el Siglo XXI, una organización  que crea conciencia sobre las violaciones a la libertad religiosa en el mundo.

Wolf describió visitas a Irak, Nigeria, Sudán y China, donde se encontró de primera mano con las trágicas consecuencias de la persecución de parte de regímenes represivos y de los motivados por el fanatismo y la intolerancia religiosos.

“Necesitamos tener muy claro en qué tiempos estamos viviendo”, dijo Wolf, quien instó a los presentes a que no permitan que los perseguidos lleguen a ser “víctimas anónimas y sin rostro de guerras distantes y cárceles de nombres difíciles de pronunciar”.

Participación en un panel de discusión sobre estrategias de participación en la libertad religiosa internacional (de izquierda a derecha): Michael Wear, exdirector  de actividades de enlace con la fe de la campaña 2012 del presidente Barack Obama; Brian Bachman, asesor principal del embajador general, Secretaría de Libertad Religiosa Internacional del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Elizabeth Cassidy, codirectora interina de políticas e investigaciones de la Comisión Estadounidense de Libertad Religiosa Internacional; y Chris Sieple, presidente emérito del Instituto para la Participación Global.

La conferencia del 24 de mayo reflexionó en el compromiso de más de 150 años de la Iglesia Adventista con la defensa de la libertad religiosa y de creencia para todas las personas, sin importar su religión, dijo Dwayne Leslie, director asociado del departamento de relaciones públicas y libertad religiosa de la iglesia, que organizó el evento.

El interés en la conferencia excedió las expectativas, dijo Leslie. Se habían hecho planes en un comienzo para 120 asistentes, pero los registrados pronto superaron ese número y cubrieron la capacidad de 250 lugares. El tremendo interés, dijo Leslie, deriva mayormente del enfoque práctico que adoptó la conferencia.

“Al hablar con la gente durante el día, escuché que estaban formando nuevas relaciones, descubriendo nuevas ideas sobre qué hacer para comunicar su mensaje, y comenzando a pensar en términos de colaborar con otros para impulsar los objetivos compartidos”, dijo.

Leslie espera que este enfoque pragmático y enfocado en los resultados para la defensa de la libertad religiosa sea un legado a largo plazo de la conferencia.

“El estado de la libertad religiosa en el mundo está claro”, dijo. “Pero el enfoque de esta cumbre fue preguntar: ¿Cómo podemos defender mejor la libertad religiosa? ¿Cómo podemos ser más efectivos a la hora de crear conciencia sobre la discriminación y persecución, y para movilizar una respuesta? ¿Cómo podemos comunicar nuestro mensaje y obtener logros?”

Leslie, que reconoce la importancia fundamental que tienen los medios, incluyó a varios destacados periodistas en el diálogo. E. J. Dionne Jr., un renombrado comentarista político y columnista sindicado del periódico The Washington Post, fue el segundo orador destacado de la conferencia. Dionne lanzó una advertencia respecto del peligro que entraña permitir que las actuales guerras culturales de los Estados Unidos estrechen la comprensión sobre las cuestiones globales de la libertad religiosa.

“En la esfera internacional, es cuestión de vida o muerte”, dijo.

Otros periodistas que hablaron durante la conferencia fueron Lynn Sweet, directora de la oficina del periódico Chicago-Sun Times en la ciudad de Washington; Doyle McManus, columnista sindicado del periódico Los Ángeles Times; y David Cook jefe de oficina de la revista Christian Science Monitor en la ciudad de Washington. En un panel de discusión de composición variada, los participantes reflexionaron sobre la relativa falta de atención que dan los medios a cuestiones de libertad religiosa internacional, y ofreció consejos a los defensores de la libertad religiosa en pro de una participación más efectiva con los medios.

La Cumbre Internacional de Libertad Religiosa 2016 estuvo patrocinada conjuntamente por la Iglesia Adventista y el Centro de Libertad Religiosa del Newseum. El evento fue financiado por donantes adventistas que querían apoyar y mejorar los esfuerzos en pro de la defense de la libertad religiosa. La conferencia fue transmitida en vivo tanto por el Newseum como por ABC News. El video de toda la conferencia estará disponible a partir del mes que viene en el sitio web del Centro de Libertad Religiosa del Newseum, en religiousfreedomcenter.org.

Traducción de Marcos Paseggi

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