July 13, 2016 | Juba, South Sudan | Adventist Review staff
13 de julio de 2016 | Yuba, Sudán del Sur | Adventist Review
Unos 1500 desplazados internos se han refugiado la semana pasada en el complejo de la Iglesia Adventista/ADRA en Yuba, la capital de Sudán del Sur, después de renovados episodios de violencia en la ciudad.
Cientos de personas han perdido la vida desde que los soldados rivales comenzaron a pelear en esa ciudad africana el jueves pasado. Salva Kiir, presidente de Sudán del Sur, hizo un llamado al cese del fuego el lunes, pero muchas personas se han mantenido alejadas de sus hogares mientras esperaban para ver qué sucedía.
ADRA dijo que la mayoría de los desplazados en el complejo adventista eran mujeres, niños y ancianos de la comunidad circundante.
“El templo, los salones de clase, y hasta las galerías están repletas al tope de su capacidad, y las torrenciales lluvias han añadido preocupaciones adicionales”, dijo ADRA en una declaración. “La violencia continua, sin embargo, implica un probable incremento del número de personas que buscan seguridad”.
ADRA estaba trabajando para brindar alimentos de emergencia, refugio y agua, a la vez que se ocupa de las instalaciones sanitarias e higiénicas de los desplazados alojados en el complejo.
Entre los choques, unos siete mil residentes huyeron a los sitios de protección de las Naciones Unidas, mientras que otros miles buscaron refugios en las iglesias y las escuelas, dijeron los informes de noticias.
Sudán del Sur, el país más reciente del mundo, que celebró el quinto aniversario de su independencia del vecino Sudán durante el último fin de semana, ha experimentado mucha violencia en su breve existencia.
“Hay también faltantes generalizados de alimentos este año, y algunas zonas de Sudán del Sur podrían, según informes, estar al borde de la hambruna”, dijo ADRA.
Traducción de Marcos Paseggi