Mayaguez, Puerto Rico - 25 sept 2017
24 de septiembre de 2017 | Mayagüez, Puerto Rico | Libna Stevens/DIA
Los líderes adventistas de Puerto Rico finalmente están comenzando a ponerse en contacto con los habitantes después de que Huracán María azotó la isla el 20 de septiembre de 2017. La tormenta de Categoría 4 trajo vientos de hasta 250 kilómetros por hora, provocando la muerte de diez personas, derribando las líneas eléctricas y las torres de telefonía celular, inundando las calles y afectando la infraestructura de la isla como nunca antes.
“En la historia de nuestro país, jamás ha habido un fenómeno semejante, una destrucción tan grande como la que ha causado el Huracán María”, dijo Luis A. Rivera, administrador del Hospital de Bella Vista y tesorero de la Iglesia Adventista en Puerto Rico. “Paralizó toda la isla de costa a costa, y recién ahora estamos desacelerando un poco y tratando de comunicarnos con algunos habitantes de la isla”.
“El Hospital de Bella Vista, que es una institución de la iglesia, está funcionando con generadores, alojando a 62 pacientes en este momento y ofreciendo servicios limitados”, dijo Rivera en un diálogo por teléfono. El desafío se producirá en los próximos días, cuando comiencen a faltar alimentos, medicamentos, oxígeno y combustible para los generadores, dijo Rivera.
Rivera dijo que habló en San Juan con Ricardo Rossello, gobernador de Puerto Rico, durante las reuniones de Gestión de Emergencias en el día de hoy. “Le hice saber que nuestro hospital está funcionando bien hasta el momento, y que podemos atender a los pacientes”, dijo Rivera.
En lo que respecta a los miembros de iglesia, no hay mucha información disponible, algo que preocupa a los administradores de la División Interamericana que han estado tratando de alcanzar a los principales líderes de la iglesia en la isla.
“Sabemos que nuestros miembros y el pueblo de Puerto Rico tiene necesidades básicas”, dijo el pastor Israel Leito, presidente de la Iglesia Adventista en Interamérica. “Estamos preocupados por ellos y queremos que sepan que no han sido olvidados, porque hemos estado orando por ellos diariamente”.
Junto con la Universidad de Loma Linda, la División Interamericana está liberando fondos para ayudar en las operaciones del Hospital de Bella Vista después del paso de María, dijo el pastor Leito. “Los líderes de la iglesia en Puerto Rico ya han solicitado fondos de emergencia de la sede del territorio para ayudar a los miembros que están necesitados después de la tormenta”.
Se sabe que hay una tremenda inundación en muchos pueblos de la isla, dijo Rivera. “Es seguro que muchos han perdido todo lo que tienen, pero aún no hemos podido recibir informes sobre los miembros de parte de los pastores distritales”, dijo.
Rivera dijo que trató de trasladar al pastor José Alberto Rodríguez, presidente de la Iglesia Adventista en Puerto Rico, pero que aún no ha podido contactarlo porque le resultó imposible viajar por la zona montañosa en las cercanías de Mayagüez, donde vive Rodríguez, explicó Rivera.
“Ahora que se está restaurando las comunicaciones en diversas regiones, esta semana estamos esperando saber de las diversas sedes e iglesias, y evaluar de qué manera los miembros de iglesia se han visto afectados”, dijo Rivera. Ahora espera tener informes de los 140 pastores de la isla.
El doctor Obed, rector de la Universidad Adventista de las Antillas, ubicada en Mayagüez, se comunicó por medio de una declaración oficial en la página de Facebook de la institución el sábado 23, donde informó que los 210 estudiantes y el personal que vive en el campus se encuentran bien. El campus no sufrió inundaciones durante el paso de la tormenta.
“La infraestructura de la universidad no ha sufrido daños, y todos los edificios están funcionando con generadores. El comedor estudiantil continúa con sus operaciones, y los estudiantes están siendo alimentados de manera adecuada”, expresó en la declaración. “La universidad tiene suministros suficientes y alimentos en abundancia para sostener sus operaciones”.
La declaración explicó que la universidad está trabajando con los líderes municipales de Mayagüez y varias agencias del estado para garantizar el bienestar de los estudiantes. La institución espera reiniciar las clases en los próximos días.
David Sebastian, director de comunicación de la Iglesia Adventista en Puerto Rico, dijo que las dos estaciones de radio administradas por la iglesia se vieron afectadas y aún no han regresado al aire. Dijo que Rivera ha logrado hablar en nombre del hospital en las estaciones de radio comerciales.
A Rivera le preocupa que, debido a la escasez de combustible en la isla, las operaciones del hospital se podrían ver comprometidas. Aun así, cree que es un buen momento para que el país inicie la reconstrucción.
“Veo lo que ha sucedido en nuestro país como una oportunidad como la de Nehemías de reconstruir. Es el momento para que nuestro país comience la reconstrucción, porque ha estado tan dividido que es bueno unir esfuerzos y mirar hacia el futuro con esperanza, avanzando en preparación para el cielo”, dijo Rivera.
Las escuelas adventistas de la isla seguirán cerradas hasta que se quiten los escombros y se restaure la energía eléctrica. Se espera que los líderes de la iglesia se reúnan esta semana para finalizar sus evaluaciones y ayuda a los miembros y las comunidades necesitadas.
“Estamos tan agradecidos a nuestra familia de Interamérica y a los amigos de Norteamérica que nos han estado llamando y han estado orando por nosotros”, dijo Rivera. “Esto nos da fuerzas para avanzar en medio de esta difícil situación”.
La Iglesia Adventista de Puerto Rico tiene más de 33 mil miembros que se reúnen en 311 iglesias. La iglesia administra un hospital, una universidad, dos estaciones de radio y varias escuelas primarias y secundarias.
Si usted quiere donar a los esfuerzos de asistencia por el huracán en Puerto Rico, póngase en contacto con la sede de la División Interamericana AQUÍ, o envíe su dirección electrónica a la Unión Puertorriqueña AQUÍ
Traducción de Marcos Paseggi