ADRA colabora para capacitar a los prestadores de salud mental en San Martín neerlandesa
El Equipo Internacional de Intervención en Salud de la Conducta de la Universidad de Loma Linda, su par de Trinidad and Tobago, y los líderes de ADRA Caribe y prestadores de salud mental en la isla de San Martín neerlandesa posan para una fotografía durante la capacitación psicosocial llevada a cabo en Philipsburg, del 8 al 9 de mayo de 2018. Fotografía por cortesía de la Asociación Norteña del Caribe
12 de junio de 2018 | Santa Cruz, Islas Vírgenes de los Estados Unidos | Asociación Norteña del Caribe/División Interamericana
La Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) en el Caribe fue uno de los organizadores hace poco de una capacitación psicosocial para profesionales de salud mental en la isla de San Martín neerlandesa, para ayudar a desarrollar la resiliencia en la comunidad, en momentos en que la isla sigue recuperándose de tres huracanes que la azotaron el año pasado. La capacitación se convirtió en la tercera mayor intervención de ADRA en la isla, dijeron los líderes de ADRA.
Más del 80 por ciento de los hogares de la isla aún están dañados y están cubiertos con lonas. Además, la reconstrucción ha sido lenta y la vida de las familias aún se ve alterada, de manera que se ha llamado a ADRA para apoyar la capacitación, dijo Alexander Isaacs, director de ADRA Caribe.
“Poco después de la devastación de las tormentas, ADRA respondió con necesidades básicas tales como alimentos, agua, artículos de higiene, platos de comida en forma diaria durante meses, y el envío de otros artículos hasta fines de diciembre”, dijo Isaacs. ADRA también coordinó una capacitación de un día con el Equipo Internacional de Intervención en Salud de la Conducta de la Universidad de Loma Linda, con psicólogos que ofrecieron servicios en varias instituciones educativas de la isla.
La capacitación de San Martín reunió a más de 35 profesionales de la salud y la salud mental de varias organizaciones de gobierno y no gubernamentales. Fueron expuestos a la neurociencia de la resiliencia y al conjunto de habilidades que son necesarias para lograr estrategias positivas de afrontamiento.
“Se puede ver cómo las personas afectadas siguen con la necesidad de una reconstrucción de sus vidas”, dijo Isaacs. “Muchos aún no tienen trabajo, y siguen sufriendo alteraciones en la vida diaria, por lo que ADRA sigue a disposición de ellos en San Martín, para ayudarlos”.
ADRA Caribe coordinó con el gobierno de San Martín, el Equipo Internacional de Intervención en Salud de la Conducta de la Universidad de Loma Linda, y su par de Trinidad and Tobago, un equipo de situaciones traumáticas de salud entrenado por la Universidad de Loma Linda.
Por su parte Emil Lee, ministro de Salud de San Martín neerlandesa, felicitó a ADRA por su apoyo a la isla a lo largo de los meses, y agradeció a la organización adventista por introducir el modelo de ADRA a la comunidad, uno que el gobierno planea implementar.
“Creemos que por medio de este trabajo conjunto, las familias se verán fortalecidas y estabilizadas, dado que muchas de ellas aún están sufriendo estrés”, dijo Ruth Douglas, coordinadora local de ADRA en San Martín.
La capacitación incluyó el uso de un modelo diseñado psicológicamente, el Modelo de Resiliencia Comunitaria (CRM), que enseña a los individuos a manejar mejor las situaciones de estrés y traumáticas de la vida al hacer uso de técnicas de cuidado personal que impiden que esas situaciones “atraquen” el sistema nervioso, dijeron los organizadores.
La capacitación también enseñó a los participantes que los beneficios inevitables de que se obtienen mediante el uso de técnicas de resiliencia que incluyen una fe mayor y un esfuerzo más marcado por ser buenos ciudadanos.
Vashni Cuvalay, un pastor adventista que ha estado ayudando a coordinar con otros miembros de iglesia que trabajan como voluntarios en las islas después de las tormentas, dijo que el carácter práctico de la capacitación hace que sea fácil ayudar a los niños y a las familias que están atravesando situaciones de estrés después de una catástrofe.
“Esto ayudará a que la iglesia esté capacitada para ayudar a los miembros y las familias necesitadas”, dijo Cuvalay.
Como resultado de la reciente capacitación, el Ministerio de Salud Pública, Desarrollo Social y Trabajo se ha contactado con ADRA para programar el desarrollo mayor de capacidades dentro de unos meses, que estará dirigido a los profesionales locales que trabajan en el área de atención psicológica, dijo Isaacs.
El ministerio identificará un conjunto más amplio de psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales, enfermeras y otros prestadores similares para desarrollar las capacidades apropiadas de cuidado personal, lo que les permitirá manejar mejor las necesidades de la población a la que sirven.
Han sido momentos muy difíciles para muchos residentes de las islas del Caribe, dijo Isaacs. ADRA seguirá participando en proyectos en sociedad y ayudando a San Martín todo lo que sea posible, para contribuir a la reconstrucción de la vida de la gente, dijo Isaacs.
Para saber más del trabajo de ADRA en San Martín y el resto de las islas de la Asociación Norte del Caribe, visite northcaribbeanconference.org
Traducción de Marcos Paseggi