7 de septiembre de 2019 | Cancún, México | Libna Stevens, División Interamericana
Definir el futuro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Interamérica durante los siguientes cinco años es el tema central de la semana en la que decenas de los principales administradores del territorio se reúnen en Cancún, México. Casi trescientos líderes de la iglesia que representan a 24 uniones o principales regiones eclesiásticas, como así también de los 152 campos locales, comenzaron una serie de reuniones el 6 de septiembre de 2019 para orar juntos, reflexionar sobre el crecimiento y tomar decisiones de continuar con la misión de alcanzar mejor a las personas con el evangelio.
“Estamos aquí para definir el camino que necesita la Iglesia Adventista en Interamérica para finalizar la tarea para 2020-2025 mirando hacia adelante”, dijo el pastor Elie Henry, presidente de la Iglesia Adventista en Interamérica al dirigirse a los líderes de la iglesia. “Es importante que comprendamos y alineemos nuestros objetivos y blancos de la iglesia local, el campo local, la unión y la división para que cada entidad existente en el territorio pueda involucrarse plenamente para contribuir mejor al desarrollo de toda la organización”. El alineamiento al que hace referencia el pastor Henry fue el denominado“I Will Go” de la Iglesia Adventista mundial, el énfasis misionero estratégico para 2020-2025.
La idea es no hacer todo el trabajo de planificación estratégica durante los siguientes cinco días, dijo el pastor Henry, sino crear un marco que brinde una buena oportunidad “de evaluar lo que estamos haciendo, asegurarnos de que nuestros miembros de iglesia estén involucrados en vivir cada día el evangelio”.
Las sesiones también constituirán una oportunidad de evaluar el desarrollo de la iglesia en las áreas de evangelismo, educación, servicio comunitario, prácticas de mayordomía y la financiación de la misión de la iglesia.
Implica definer los principios, definir objetivos claros y ver de qué manera el crecimiento de la iglesia encaja como parte de la misión en cada nivel de la iglesia.
El pastor Lowell Cooper, ex vicepresidente de la Iglesia Adventista mundial, recordó a los administradores de la iglesia de su propósito de alinear sus energías con un propósito definitorio y eterno.
“El propósito de nuestra reflexión es pensar hacia dónde estamos”, dijo Cooper. “Si no conocemos nuestro propósito en la vida, nos arriesgamos a ser irrelevantes, a ser un obstáculo en lugar de una ayuda”.
Cooper señaló los puntos clave de que la misión de Dios es la fuente de toda la misión de la iglesia, de que la misión de Cristo ilustra la misión de Dios, y de que el pueblo de Dios tiene que reflejar su misión, y de que la misión de la iglesia necesita un estudio y una expresión bien estudiada.
Cooper repasó la declaración de misión de la División Interamericana: “Glorificar a Dios, y bajo la influencia del Espíritu Santo, llevar a cada converso a que experimente una relación personal y transformadora con Cristo, permitiendo que el creyente llegue a ser discípulo para compartir el evangelio eterno con todos”.
“Recuerden que la misión de Dios es de calidad, no solo de cantidad”, dijo Cooper.
Durante los siguientes días, los administradoresy líderes de las instituciones de la iglesia analizarán los desafíos que enfrenta el territorio de la iglesia, establecerán principios para fortalecer el ministerio del pastor, definir objetivos claros respecto del crecimiento de la feligresía y la retención de los miembros, buscarán cómo mantener activos a los miembros en la vida de la iglesia, y cómo fortalecer el sistema financiero de la iglesia, entre otros.
Los líderes de la iglesia mirarán también a los casi cien años de adventismo en el territorio de la División Interamericana desde que fue establecido en 1922.
Para saber más sobre la Iglesia Adventista de Interamérica, sus programas e iniciativas, visítenos en interamerica.org
Traducción de Marcos Paseggi