En Sudamérica, los dirigentes oran en medio del estado de inestabilidad política en Bolivia
El 11 de noviembre de 2019, durante las reuniones de fin de año de la División Sudamericana (DSA), en Brasilia, Brasil, el presidente de la Unión Misión de Bolivia, Hiram Kalbermatter, explicó cómo la situación actual en Bolivia está afectando a los miembros de iglesia en todo el país. Imagen: Gustavo Leighton, Noticias de la División Sudamericana
12 de noviembre de 2019 | Brasilia, Brasil |Jefferson Paradello, División Sudamericana y Adventist Review
Los medios de comunicación internacionales han estado dando a conocer diariamente las noticias sobre la situación de inestabilidad política y civil por la que atraviesan últimamente 11 millones de bolivianos. De acuerdo a los informes en los noticieros, la mayoría de los problemas se iniciaron a partir de los resultados disputados de una elección nacional ocurrida el 20 de octubre de 2019, aun cuando los residentes ya estaban experimentando cierto grado de inestabilidad.
Después de la elección, los disturbios sociales se hicieron extensivos a todo el país, afectando con ello la vida de los residentes en toda la nación, incluyendo a miles de miembros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
En un informe especial, el 11 de noviembre de 2019, durante las reuniones de fin de año de la División Sudamericana (DSA), en las oficinas centrales de la iglesia, en Brasilia, Brasil, el presidente de la Unión Misión de Bolivia, Hiram Kalbermatter, explicó algunos detalles acerca de la situación actual en todo el país y de la forma como esto estaba afectando a los miembros de iglesia.
“Los miembros están enfrentando tiempos difíciles en Bolivia” dijo el presidente Kalbermatter. “Hay restricciones en cuanto a acudir al trabajo y asistir a las reuniones de la iglesia. Se han suspendido las clases en muchas de nuestras escuelas adventistas”.
El presidente de la Unión Misión de Bolivia, Hiram Kalbermatter, ora por Bolivia, sus residentes y los miles de miembros adventistas que viven en esa nación. En las reuniones de fin de año, los dirigentes de la Iglesia Adventista en Sudamérica, enfatizaron la necesidad de orar sin cesar por las autoridades de gobierno, dirigentes y miembros de la iglesia. Imagen: Gustavo Leighton, Noticias de la División Sudamericana
Unidos en oración
A la luz de los últimos acontecimientos, los dirigentes de la Iglesia Adventista en Sudamérica están solicitando a los miembros de la iglesia que oren específicamente por la intervención de Dios en estos asuntos.
“Era claro que la situación no iba a tener una solución humana”, dijo el presidente Kalbermatter “Hace tres semanas, los miembros de la iglesia en todo el país comenzaron a orar, pidiendo a Dios que ayudara a los dirigentes del país a encontrar una solución”.
El presidente Kalbermatter dio a conocer que el sábado 9 de noviembre de 2019, miles de miembros de iglesia ayunaron y oraron en favor de su nación. El domingo 10 de noviembre se hizo aparente un avance, aun cuando la situación, según se cree, está todavía lejos de lo ideal.
Al dirigirse a los dirigentes y delegados de la DSA, el presidente Kalbermatter animó a cada uno a mantener a Bolivia en sus oraciones, al movilizarse el país en pos de un incierto futuro.
El presidente de la División Sudamericana, Erton Köhler, secundó la petición hecha por el presidente Kalbermatter.
“Estamos enfrentando desafíos en cada uno de nuestros países”, dijo en referencia a los ocho países que forman esta región sudamericana de la iglesia Recordemos que cuando tomamos las cosas de Dios en forma seria, honesta y cono oración, el Señor se encarga de todos nuestros problemas”.
El presidente Köhler animó también a los delegados a la reunión de fin de año, a seguir confiando en Dios, porque él está al control.
“Dios todavía está al mando”, dijo el presidente Köhler. “Levantémonos y pongamos de manifiesto que somos un pueblo de paz y esperanza”.
La original version (versión original) de esta noticia se publicó en el news site (sitio de noticias) en portugués, de la División Sudamericana.
Traducción – Gloria A Castrejón