Miles de familias fueron evacuadas y a las comunidades cercanas se les pidió que tomen precauciones extremas cuando el volcán Taal comenzó a arrojar lava incandescente y cenizas sulfúricas el domingo 12 de enero de 2020, a alrededor de las 17:30. La erupción está afectando varias provincias en la región sur de la isla de Luzón, en el norte de las Filipinas.
La isla volcán, uno de los volcanes más activos de las Filipinas, se encuentra en el medio del cráter y ofrece una vista imponente cuando se la observa desde la cresta de Tagaytay en Cavite, en el norte de las Filipinas.
Varias instituciones adventistas se encuentran a aproximadamente veinte kilómetros del cráter. La sede de la División de Asia-Pacífico Sur (SSD), las oficinas del Centro de Evangelismo Digital de Radio Mundial Adventista (AWR-CDE), el campus del Instituto Internacional Adventista de Estudios Avanzados (AIIAS), la Universidad Adventista de las Filipinas, la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) en Filipinas, la sede del Movimiento de los Mil Misioneros, las oficinas de la Misión Adventista de Cavite, y varias iglesias han sido cubiertas por las cenizas del volcán. El trabajo fue suspendido el lunes debido a la catástrofe.
En el presente, los informes de funcionarios del gobierno no hablan de pérdida de vidas.ADRA Filipinas se encuentra evaluando la situación para hallar maneras de extender con efectividad su ayuda a los afectados por la erupción. Los directivos prometieron realizar actualizaciones periódicas de la situación.
El Instituto de Vulcanología y Sismología de las Filipinas (PHIVOLCS) elevó el nivel de alerta a Nivel 4, lo que significa que en horas o días es posible una erupción explosiva peligrosa. El volcano Taal mostró un incremento de actividad, comenzando con una erupción de cenizas y vapor, que alcanzaron un kilómetro por sobre su cráter.
PHIVOLCS informó de 47 temblores menores hasta el lunes 13 de enero por la mañana. Los residentes dentro de un radio de 14 kilómetros del cráter del volcán se vieron forzados a evacuarse debido al elevado riesgo de un tsunami volcánico y a la exposición excesiva a los elementos del volcán.
Se movilizó a unidades del gobierno local para ayudar a la evacuación y a la distribución de bienes asistenciales para las familias desplazadas por la catástrofe. Se informó asimismo que las autoridades de vuelos en Manila, la capital del país, han suspendido temporariamente todos los vuelos.
La versión original de esta noticia fue publicada por la División de Asia-Pacífico Sur en su sitio de noticias.
Traducción de Marcos Paseggi