12 de abril de 2021 | Silver Spring, Maryland, Estados Unidos | Por: ADRA Internacional

El viernes 9 de abril, La Soufrière, el pico montañoso más elevado en la isla de San Vicente y las Granadinas, erupcionó, forzando la evacuación de más de veinte mil personas. Las cenizas y el humo llenaron por completo el cielo, cubriendo los vecindarios y las calles de la isla el sábado, y extendiéndose hasta otras islas como Barbados. Se espera que las cenizas caigan en los próximos días y posiblemente semanas, y que lleguen hasta Jamaica y partes de Sudamérica, según los funcionarios locales. Los funcionarios también esperaban que se produzca otra gran erupción.

La Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) está trabajando con las autoridades locales en el Caribe para coordinar los esfuerzos asistenciales.

“Hemos descubierto que hay grandes faltantes en las necesidades básicas, lo que incluye alimentos, agua, artículos de higiene y juegos de artículos de limpieza y equipos de protección individual”, dice Alexander Isaacs, director de ADRA en la Unión del Caribe. “Las necesidades son amplias, y estamos trabajando sin descanso para hacer que estos artículos lleguen a los afectados”.

ADRA ha estado trabajando con las iglesias adventistas locales de la Unión Caribeña y las autoridades locales para establecer refugios y distribuir de 200 a 300 comidas por día. Al menos diez escuelas e iglesias adventistas han sido designadas como refugios oficiales para albergar a los evacuados. Debido a la demanda creciente, las distribuciones de alimentos se duplicarán en los próximos días como parte de los esfuerzos de respuesta.

“La erupción impactó severamente las cosechas y los árboles y clausuró el suministro de agua y las líneas de electricidad de toda la isla. Una gran preocupación es la calidad del aire en la isla, lo que podría tener un impacto sobre las personas que sufren problemas respiratorios. Otra cuestión es tener que hacer frente también a las infecciones de COVID-19, lo que sigue siendo una amenaza para los que están viéndose forzados a evacuarse y congregarse en refugios”, dice Isaacs.

La erupción más letal del volcán La Soufrière de la que se tenga registro se produjo el 6 de mayo de 1902, provocando la muerte de casi 1600 personas, según un informe de noticias. La última erupción en producirse en la isla tuvo lugar en abril de 1979, pero no se reportaron muertos.

Para colaborar con la respuesta de emergencia de ADRA en la isla de San Vicente y las Granadinas, visite ADRA.org/Disasters.

Traducción de Marcos Paseggi

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