24 de junio de 2021 | Silver Spring, Maryland, Estados Unidos | Ted N.C. Wilson, President de la Asociación General de los Adventistas del Séptimo Día

¡Saludos hermanos y hermanas! Como Adventistas del Séptimo Día, probablemente han escuchado hablar de los mensajes de los tres ángeles que se encuentran en Apocalipsis 14:6-12. Después de todo, estas proclamaciones han estado en el corazón del mensaje y la misión de los Adventistas del Séptimo Día desde el comienzo de este movimiento. Estos mensajes son proféticos, ilustran la confiabilidad de la Palabra de Dios y proclaman las advertencias más serias que se encuentran en las Escrituras.

El mensaje del primer ángel lleva el evangelio eterno a todo el mundo; un llamado a adorar a Dios como Creador y anunciando la hora de Su juicio. El segundo se basa en el primero, proclamando que Babilonia, un sistema falso de adoración que rechaza la proclamación del primer ángel, acepta los engaños de Satanás y se une al mundo, ha caído. El mensaje del tercer ángel saca a la luz la marca de la bestia, en contraste con el verdadero sábado de Dios como el sello de Dios, instando a las personas a no recibir la marca.

Como Adventistas del Séptimo Día, estamos familiarizados con el contenido de estos mensajes, pero ¿con qué frecuencia los proclamamos fuera de las reuniones públicas de evangelismo?

 Elena de White comparte esta importante declaración:

«Los ángeles son representados volando en medio del cielo mientras proclaman al mundo un mensaje de amonestación, un mensaje que tiene relación directa con la gente que vive en los últimos días de la historia de esta tierra. Nadie escucha la voz de estos ángeles, porque son símbolos que representan al pueblo de Dios que está trabajando en armonía con el universo del cielo. Hombres y mujeres, iluminados por el Espíritu de Dios, santificados por la verdad, proclaman los tres mensajes en su orden.» (Notas Biográficas, p. 470)

Claramente, todos estamos llamados a proclamar estos mensajes que salvan vidas, pero ¿cómo hacerlo de una manera angelical? Aquí hay tres aspectos prácticos a tener en

Cuenta:

  1. Creer en los mensajes personalmente y permirteles transformar nuestro corazón.

No podemos presentar auténticamente un mensaje como verdadero si nosotros mismos tenemos dudas. Ahora es el momento de estudiar cuidadosamente los mensajes de los tres ángeles y profundizar en su significado. Pero el conocimiento mental no es suficiente; deben penetrar el corazón.

Se nos advierte que “El enemigo utilizará todos los medios para desarraigar la confianza de nuestros creyentes en los pilares de nuestra fe, en los mensajes del pasado, que nos han colocado sobre la elevada plataforma de la verdad eterna y que han establecido y han dado carácter a la obra…

Aquellos que sostienen en forma teórica la verdad, con la punta de los dedos, por así decirlo, que no han introducido sus principios en el santuario íntimo del alma, sino que han mantenido la verdad vital en el atrio exterior, no verán nada sagrado en la historia pasada de este pueblo, que ha hecho de ellos lo que son, y los ha establecido como obreros misioneros fervientes y determinados en el mundo…

La verdad para este tiempo es preciosa; pero aquellos cuyos corazones no han sido quebrantados sobre la roca, Cristo Jesús, no verán ni entenderán lo que es la verdad. {NB 471, 472}

Amigos, creamos en la Palabra de Dios y permitámos que haga una obra de reforma en nuestros propios corazones.

  1. Permitir que el Espíritu de Dios nos llene de un amor profundo y cristiano por todos.

El tema del amor de Dios permea la Biblia. Leemos en 1 Juan: “…Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él. » (4:16). «Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros.» (4:11).

En Lucas 10 vemos el amor de Dios ilustrado tanto en una forma práctica como espiritual. Cuando se le preguntó «¿Quién es mi prójimo?» (vs.29), Cristo respondió con la historia del Buen Samaritano, quien hizo todo lo posible para cuidar con compasión las

necesidades del herido de una manera muy práctica. Más adelante, encontramos a Jesús en la casa de María, Marta y Lázaro. Marta está molesta porque María no está ayudando con los aspectos prácticos de la reunión, sino que está escuchando las palabras de Jesús. Jesús reprende suavemente a Marta mientras elogia a María, quien «ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.» (vs. 42).

Si bien debemos hacer lo que podamos para aliviar el dolor y el sufrimiento, qué importante es proporcionar «esa buena parte, que no se nos quitará», que fluye de las palabras de Cristo, particularmente en «La Revelación de Jesucristo» donde encontramos estos mensajes transmitidos desde un profundo amor por toda la humanidad y para ser compartidos con ese mismo espíritu.           

  1. Utilizar métodos basados en la Biblia para compartir el mensaje completo.

Dios nos ha bendecido con muchas formas de llegar a las personas, incluso durante el COVID-19. Se han encontrado muchos métodos creativos en línea a través de las redes sociales, grupos pequeños, YouTube, Zoom y más. Llegar a la gente a través de la literatura, impresa y en línea, es otro método muy importante para difundir el mensaje de los tres ángeles. Les insto a que compartan estos mensajes celestiales de todas las formas posibles según los dirija el Señor.

Se nos ha dicho que «En un sentido muy especial, los adventistas del séptimo día han sido colocados en el mundo como centinelas y transmisores de luz. A ellos ha sido confiada la tarea de dirigir la última amonestación a un mundo que perece. La Palabra de Dios proyecta sobre ellos una luz maravillosa. Una obra de la mayor importancia les ha sido confiada: proclamar los mensajes del primero, segundo y tercer ángeles. Ninguna otra obra puede ser comparada con ésta y nada debe desviar nuestra atención de ella. {9TI 17.1}

Amigos, Dios está cambiando los corazones de quienes escuchan estos maravillosos mensajes. El Espíritu Santo se mueve en las mentes de las personas que necesitan tomar una decisión por Cristo, ¡y qué privilegio es el nuestro de ser usados como instrumentos de Dios para alcanzar a otros para Él! Solo confiando completamente en Jesús y el poder del Espíritu Santo podremos lograr algo. Dios nos está preparando para algo muy inusual que pronto sucederá: el derramamiento de la lluvia tardía del Espíritu Santo.

Dejemos que la segunda venida de Cristo y los mensajes de sus tres ángeles sean proclamados por todos los adventistas del séptimo día alrededor del mundo, ¡porque Jesús vendrá pronto!

Oremos juntos. Padre que estás en los cielos, muchas gracias por compartir el maravilloso libro de Apocalipsis a través de tu siervo, Juan, quien entendió en esa isla de Patmos las cosas maravillosas que le estabas revelando, las cuales necesitaríamos saber en este momento de la historia de la tierra.

Por favor, Señor, ayúdanos a proclamar los mensajes maravillosos de los tres ángeles de Apocalipsis 14 y el cuarto ángel de Apocalipsis 18, llamando a la gente a volver a tu verdadera adoración, como el verdadero Dios y Señor. Ayúdanos a ver a Cristo y su justicia, que realmente es el núcleo mismo de los mensajes de esos tres ángeles. Gracias, Señor, por ayudarnos a compartir estos mensajes de manera práctica con los demás, y gracias, porque la promesa de Jesús pronto regresará, se hará realidad muy pronto, anhelamos ver a Jesús venir, y es en el nombre de nuestro maravilloso Salvador, Jesucristo, que te pedimos todo esto, amén.

Top news

Líderes adventistas aprueban iniciativas claves y plan estratégico para 2025-2030
Un mensaje para los últimos días
Junta de la Universidad de Montemorelos reafirma su compromiso y planes de crecimiento