13 de julio de 2021 | Miami, Florida, Estados Unidos | Libna Stevens, Noticias de la División Interamericana
Los líderes adventistas del séptimo día en Cuba no han logrado conectarse con los miembros de iglesia, en momentos en que las protestas contra el gobierno han escalado en toda esa nación insular.
“Esta es una situación sin precedents aquí”, dijo el pastor Aldo Pérez, presidente de la Iglesia Adventista en Cuba. “Necesitamos la fortaleza de Dios porque estamos viviendo por fe”.
Las protestas, que comenzaron el 11 de julio, son resultado de los cortes de energía eléctrica, las cuarentenas continuadas debido a la pandemia del coronavirus, y la escasez de alimentos y medicamentos.
Cada día se han reportado más de seis mil nuevos casos de COVID-19, y el número de muertes continúa incrementándose. Muchos miembros han sido contagiados por el virus, pero se han recuperado. Pérez informa que desde el año pasado, cinco miembros de iglesia perdieron la vida por el COVID-19. Las iglesias permanecen cerradas, y las oficinas de las uniones y asociaciones solo hace poco reanudaron horas de oficina limitadas, dijo Pérez.
Por el momento no hay conexión de Internet en la isla. Internet es la principal forma de comunicación entre los líderes y los miembros de iglesia, y se usa para los cultos, las oraciones, los estudios bíblicos y para hacer circular información importante.
“Sé que nuestro país está muy perturbado en medio de los desafíos que enfrenta la nación, pero Dios continúa fortaleciendo a su iglesia durante tiempos difíciles”, dijo Pérez.
La escasez de alimentos, el aumento de los precios de la comida y la falta de medicamentos ha hecho que los líderes movilicen a sus miembros para ayunar y orar con más fervor, en especial durante las últimas dos semanas, dijo Pérez. Un vecino llegó pidiendo asistencia médica y, gracias a un contenedor que había llegado desde la Universidad Andrews, pudimos darle algo de aspirina”.
Más allá de las dificultades experimentadas, el pastor Pérez dijo que Dios está obrando milagros entre su pueblo. Durante los últimos dos sábados, se han llevado a cabo vigilias de oración en toda Cuba. El sábado 10 de julio, toda la iglesia de la isla se dedicó a ayunar y orar, y muchos desde España y los Estados Unidos se les sumaron para orar por paz, protección y una mayor fe.
La única manera en que Pérez ha logrado comunicarse con los líderes de las cuatro asociaciones regionales de la isla ha sido mediante líneas telefónicas fijas o algún celular. “A muchos de los administradores de la iglesia se les está haciendo difícil alcanzar a los pastores distritales de sus territorios desde ayer, por lo que continuamos animándolos a que nos mantengan informados para que continuemos orando y enfrentando las necesidades según podamos”, dijo Pérez.
La Iglesia Adventista de Cuba cuenta con más de cien pastores distritales que dirigen unas 345 iglesias y supervisan a unos dos mil grupos pequeños.
Durante años, la iglesia ha disfrutado de buenas relaciones con el gobierno, añadió Pérez. “Continuamos pidiendo a nuestros miembros que se mantengan seguros y que no se entrometan en cuestiones políticas, pero que apoyen plenamente al pueblo de Cuba por medio de la oración”.
“Dios nos está sustentando con su mano. Solicitamos las oraciones de todos nuestros hermanos y hermanas de Interamérica y del mundo para que no nos sintamos solos, y para ver la obra de Dios al traer paz y reconciliación a nuestra nación”, dijo Pérez.
Hay tantas personas que quieren ayudar y que envían asistencia, pero Pérez dijo que clamar a Dios como familia adventista en todo el mundo pidiendo fortaleza y protección es lo mejor que alguien puede hacer por el momento. “Todos estamos afectados, no solo en la iglesia, y toda nuestra nación necesita de oraciones, por lo que apreciamos todo el ayuno y oración que puedan hacer en nuestro favor.
“Los reinos de este mundo son temporarios, y tenemos que alistarnos para el reino eterno que Dios nos ha preparado”, dijo Pérez.
Traducción de Marcos Paseggi