Desde el nacimiento hasta el último aliento, estos servicios conectan a las familias más allá de los muros del hospital.

14 de noviembre de 2021 | Florida, Estados Unidos | Por AdventHealth Communications

La pandemia de COVID-19 ha forzado a las instituciones de atención a la salud a adaptarse en muchos sentidos, incluyendo entre ellas al sistema de salud AdventHealth en los Estados Unidos, aplicando innovaciones en los servicios de atención mental y espiritual, además de la atención física. El proveer apoyo emocional y espiritual ha sido un punto focal al enfrentarse las familias a situaciones de temor, ansiedad, pérdida, luto y dolor.

Una de estas innovaciones ha sido la nueva configuración de las visitas de familiares. Esta iniciativa, liderada por el equipo de experiencias del consumidor de AdventHealth, comenzó con el envío de cientos de tabletas electrónicas a instituciones en todo el sistema de salud, programada cada una con una aplicación telehealth (telesalud) adaptada específicamente para visitas virtuales.

Los equipos locales que incluyen capellanes, dirigentes de experiencia y otros miembros reubicados del equipo, donaron equipo de protección personal. Estas personas entraron a salas de pacientes a las que muchos otros no podían entrar a fin de ayudar a los pacientes a sentirse conectados con sus seres amados a quienes extrañaban más.

Amrita Budhu, una especialista en conexiones virtuales de AdventHealth, facilita una visita virtual para la familia Williams. [Imagen: AdventHealth]

Actualmente continúan evolucionando los protocolos referentes a la pandemia, pero los  dirigentes de AdventHealth ven todavía los beneficios de los servicios de visitación virtual

“Nuestros líderes de experiencias del consumidor y nuestros socios en atención pastoral, vida infantil y otros sectores, han realmente dado un paso adelante durante esta época desafiante al extender nuestra misión en formas innovadoras”, dijo Pam Guler, vicepresidente y administrador principal de experiencias del consumidor de AdventHealth. “El valor de la visitación virtual es innegable y nuestra organización está llevando a cabo conversaciones clave referentes a cómo mantener disponible este servicio más allá de la pandemia de COVID-19”.

Una madre ve a su bebé recién nacida por primera vez

Amrita Budhu es una especialista en conexiones virtuales quien conecta a las familias con bebés que permanecen en la unidad neonatal de cuidados intensivos. En el apogeo del surgimiento de la variante Delta, esta especialista estaba facilitando aproximadamente 15 encuentros virtuales por día.

Amrita Budhu dijo que le encantaba su trabajo porque con él puede establecer una relación con las familias de los bebés, haciendo algunas veces hasta 30 llamadas con ellos antes de que sean dados de alta. Una de las madres con las que ha trabajado es Kimya Williams.

El equipo de conexión virtual en AdventHealth Orlando en la Florida, Estados Unidos. [Imagen: AdventHealth]

Kimya Williams enfermó de COVID-19 mientras estaba embarazada de su hijo. Su condición se deterioró hasta desarrollar neumonía y tuvo que dar a luz a su bebé mientras permanecía en un respirador artificial. Cuando recuperó la conciencia, la primera vez que vio a su hijito, que se encontraba en una unidad de cuidado intensivo, fue a través de una visita virtual.

“No podía creer que lo había tenido”, dijo. “Había estado en ese aparato y no lo podía creer hasta que me lo mostraron. Fue realmente impactante y tuve que ajustarme a la experiencia. Ahora no puedo llenarme lo suficiente de él”.

Kimya Williams y su familia viven aproximadamente a una hora y media de distancia por carretera, del hospital. Aun si pudiera haber tenido visitantes, el traslado de una hora y media al hospital hubiera sido mucho para sus otros hijos. Las visitas virtuales resultaron ser muy útiles mientras estaba todavía en el hospital, al poderse conectar con su familia en casa y con el bebé en la unidad de cuidado intensivo en el hospital; y ahora, después de haber sido dada de alta, ya se encuentra en su casa atendiendo su familia, pero sigue todavía conectándose para ver a su bebé recién nacido.

“La mejor decisión que mi familia pudo haber tomado fue la de llevarme a ese hospital”, dijo.  “Me encantan las visitas virtuales con AdventHealth y toda la mañana espero su llamada”.

Esta madre visitó recientemente la Torre Ginsburg de AdventHealth Orlando, en Florida, en donde fue una paciente, para mostrar su aprecio a la enfermera que cuidó de ella y a los miembros del equipo ambiental que la inspiraron y alentaron su fe a través de la cual pudo salir adelante. Amrita Budhu, la especialista en conexiones virtuales de esta madre, fue la que le sirvió de guía por las instalaciones.

Miembros del equipo AdventHealth Palm Coast, Jennifer Mellow, Wendi Coheley y Eddie Goncalves con las tabletas electrónicas usadas para realizar una ceremonia virtual de ungimiento de un paciente. [Imagen: AdventHealth]

“Eran definitivamente lágrimas de gozo”, dijo Amrita Budhu.

Una familia de iglesia unge a su amado hermano y amigo  

Wally y Mary Ellen Fox, residentes por muchos años en el estado de Georgia, se jubilaron después de más de 30 años de labor en la Academia de Georgia-Cumberland, viviendo seis meses del año en su casa en Georgia y los otros seis meses en Florida. Muy queridos por su comunidad, nunca perdieron contacto con la familia de la iglesia y sus amigos en Georgia.

En el mes de agosto, la pareja contrajo COVID-19. Mary Ellen mejoró, pero Wally tuvo que ser llevado a sala de emergencia de AdventHealth Palm Coast, fue entonces admitido y eventualmente intubado.

Para el tiempo cuando Jennifer Mellow, representante de experiencias del paciente, se encontró con él, Wally estaba intubado en la unidad de cuidado intensivo. Mary Ellen, quien se encontraba en la zona de Palm Coast; y su hija y nietos en Georgia, estuvieron muy estrechamente involucrados en su atención desde el mismo principio. La familia hizo un poster de su vida, a fin de que el personal del hospital pudiera conocerlo y se unieron virtualmente a través de llamadas diariamente facilitadas por la representante Mellow.

Amigos y familiares en Florida se unieron en oración en favor de Wally. El pastor de su iglesia en Georgia se comunicó con Eddie Goncalves, capellán sénior de AdventHealth Palm Coast, con la idea de llevar a cabo una ceremonia virtual de ungimiento. Con todo el aspecto tecnológico en su lugar, el capellán Goncalves solicitó la ayuda de Jennifer Mellow y Wendi Coheley, gerente de experiencias de pacientes.

El equipo instaló tres dispositivos para esta ceremonia. Las tabletas electrónicas se dispusieron de tal manera que todos los participantes en la llamada pudieran verse y escucharse mutuamente y se sintieran como si se encontraran en la misma sala.

“Sé que se pueden hacer cosas asombrosas por medio de la tecnología, pero no estaba muy segura de cómo podía llevarse a cabo el ungimiento”, dijo Mary Ellen al recordar el evento. “Fue muy significativo; fue todo un consuelo tener a tantas personas orando en su favor”.

La ceremonia incluyó sesiones de oración por perdón y sanidad y la aplicación del aceite de la unción en la frente del paciente Wally Fox.

“Para los cristianos, los ungimientos proporcionan un gran consuelo”, dijo el capellán Goncalves. “Representan la seguridad de que esta persona ha servido a Dios y está ahora en manos de Dios. Tiene que ver con entrega y sometimiento y pedir la intervención de Dios, si es su voluntad”.

Al final de la ceremonia, la representante Mellow se quedó en la sala del paciente, con una tableta electrónica, a fin de ofrecerle a la familia un último momento de privacidad con el paciente Wally Fox.

“Parecía como si se estuvieran abrazando aun cuando se encontraban en diferentes estados del país”, dijo. “Se podía percibir que se sentían en paz porque hicieron lo que él hubiera querido que hicieran”.

Wally Fox falleció una semana después del ungimiento. Su familia llegó a tiempo para estar físicamente a su lado, agradecidos por la tecnología que los mantuvo conectados hasta ese momento.

“Cada día hay alguien que necesita personas que se conecten con ellos”, dijo Wendi Coheley. “Nuestra labor ahora es no dejar que esta tecnología se deje de lado porque disminuyen los casos de COVID -19. Pienso en las familias que viven fuera del estado, en los nietos pequeños que no pueden venir al hospital. Hay muchas formas como se pueden utilizar estos servicios para apoyar nuestra misión y apoyar al paciente”.

Traducción – Gloria A. Castrejón

 

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