Miembros de iglesia de la región central se movilizan para ayudar a residentes de Cebu City.
7 de febrero de 2022 | Filipinas | Nadeth Quinto, Unión Asociación Central de Filipinas y División Asia-Pacífico Sur.
Varias semanas después de que el tifón Rai devastara las principales ciudades en las partes central y sur de Filipinas, la Iglesia Adventista del Séptimo Día, a través de varias organizaciones en todo el país, continúa brindando asistencia a familias grandemente afectadas por tal calamidad.
Miles de familias recibieron paquetes de alimentos el 31 de enero de 2022, en el gimnasio de la Academia Adventista Cebu, proveyendo con ello lo suficiente para sostener a los evacuados por varios días.
Esta iniciativa pudo hacerse posible a través del liderazgo de la Asociación Central Visayan (CVC), en coordinación con los pastores de distrito y los Servicios Adventistas a la Comunidad (ACS) encabezados por el coordinador de CVC ACS, Donato P. Barcenas y James B. Rubrico Sr., el coordinador ACS de la Unión Asociación Central de Filipinas (CPUC).
«Los paquetes de alimentos incluyen cinco kilos de arroz, cinco paquetes de tallarines, cinco latas de sardinas, un paquete de tallarines locales y una barra de pan de canela”, dijo el coordinador Barcenas.
“La recuperación tras esta calamidad es todo un desafío, pero nosotros continuamos orando y encontrando formas en las que podamos ser de ayuda a esas familias en su jornada hacia la recuperación”, añadió.Los dirigentes de la División Asia-Pacífico Sur (SSD) y de CPUC, también estuvieron presentes y participaron en la distribución.
Eliezer T. Barlizo Jr., presidente de la Iglesia Adventista en la región central de Filipinas, agradeció a los líderes de la división por su presencia, su amor y su apoyo. Elogió también a la administración, directores y pastores de distrito de la CVC por su iniciativa y esfuerzo unificado.
Charles L. Nogra, presidente de CVC, expresó también su gratitud a Dios por la oportunidad de poder compartir las bendiciones de Dios, juntamente con los dirigentes tan apoyadores de SSD, CPUC y CVC.
“Aquellos que están dispuestos a extender su ayuda, favor de ponerse en contacto con nuestros dirigentes de la misión local y unión para prestar su ayuda en favor de nuestros hermanos que están en necesidad”, dijo el presidente Nogra. “Cebu City y Bohol sufrieron mucho a causa del tifón Odette [Tifón Rai]. En un informe, nos enteramos de que en cuatro distritos en Bohol, un 90 por ciento de nuestros hermanos, están sin casa. Todavía no hay servicio eléctrico en la provincia. Así que continuemos ayudando y orando por ellos”.
El presidente de SSD, Saw Samuel expresó también su gratitud a Dios porque no hubo pérdidas de vidas humanas y por el espíritu de resiliencia observado entre los miembros de la iglesia.
“Doy gracias a Dios por esta oportunidad de estar con nuestros dirigentes de la unión y asociación; de sentarnos juntos y combinar nuestros esfuerzos en la reconstrucción de nuestras iglesias y de nuestras instituciones, a fin de que posamos seguir llevando adelante la misión que Dios nos ha confiado de avanzar”, dijo el presidente Samuel. “Continuemos haciendo nuestras las bendiciones y la orientación de nuestro fiel y poderoso Dios. Juntos, vamos a reconstruir esta ciudad. Juntos, vamos a reconstruir nuestra iglesia. Juntos, continuaremos llevando adelante la obra que se nos ha encomendado en la región central de Filipinas; y juntos, apresuraremos la venida de nuestro Señor. Que Dios los bendiga”.
Los recipientes de la ayuda se mostraron felices y expresaron su gratitud a Dios por su fidelidad en medio de las pruebas que están enfrentando.
«Esta distribución de alimentos nos ayuda mucho a nuestra familia, porque ahora podemos tener alimentos para nuestra cena. Por ello damos gracias a Dios por su Providencia”, dijo Liezelda Valiente, después de recibir el paquete de alimentos.
Otra persona que recibió la ayuda, de nombre Elaine Panoncia, de Talisay City, dijo que no esperaba recibir el paquete de alimentos, pero que Dios proveía misericordiosamente para satisfacer sus necesidades. “Estoy muy agradecida a Dios por las bendiciones. Muchas, muchas gracias a todos los patrocinadores y organizadores”, dijo.
La versión original de esta historia se publicó en el sitio de noticias de la División Asia-Pacífico Sur.
Traducción – Gloria A. Castrejón