4 de abril de 2024 | Santo Domingo, República Dominicana | Bernardo Medina y Libna Stevens, Noticias de la División Interamericana
La Iglesia Adventista del Séptimo Día en la República Dominicana celebró hace poco los esfuerzos de cientos de pastores de las iglesias locales, miembros laicos, estudiantes de teología, líderes regionales y evangelistas invitados desde los Estados Unidos, en la finalización de una intensa campaña de evangelización que culminó el 23 de marzo de 2024. Sus esfuerzos resultaron en más de ochocientos bautismos; los líderes esperan que en las próximas semanas se bauticen otros cientos.
El evento fue parte de una iniciativa anual dirigida por la Unión Dominicana, que incluyó a los líderes de las seis asociaciones de la isla, en las que miles de miembros activos colaboraron con estudios bíblicos, visitas y actividades de impacto comunitario, además de otras iniciativas, seis meses antes de la finalización de las campañas de evangelismo. Este año, el impacto de evangelización tuvo lugar en la región oriental de la isla.
Miles atestaron el Campamento Adventista Palmira Davis en Hato Mayor para disfrutar de música, mensajes espirituales, testificar cien bautismos y escuchar informes sobre los esfuerzos de evangelización, el pasado 23 de marzo de 2024.Traer esperanza
“No escatimamos ningún tipo de esfuerzo o recursos para cumplir con la misión de predicar el evangelio”, dijo el pastor Teófilo Silvestre, presidente de la Unión Dominicana. “Como iglesia, estamos comprometidos para cumplir nuestra misión de llevar las buenas nuevas de salvación a cada comunidad, y estamos convencidos de que esos tipos de programas transforman vidas, dan esperanza a los hogares, rescatan a los jóvenes de las drogas y, como resultado, traen la vida eterna”.
Todas las 230 congregaciones organizadas en 36 distritos se mostraron activas en las campañas de evangelización, reportó el pastor Geuris Paulino, presidente de la Asociación Dominicana del Este. Muchas de las iglesias más pequeñas y cercanas entre sí combinaron sus congregaciones durante la campaña.Treinta y cinco estudiantes de teología y pastores locales y regionales predicaron en la semana antes del 15 de marzo antes de que los cincuenta predicadores, incluidos pastores de la División Interamericana, administradores de la Unión del Atlántico de la División Norteamericana, como así también administradores y líderes departamentales de la unión, las asociaciones y los pastores locales, dirigieran en las iglesias locales.
Estategia anual continuadaLa estrategia anual continuada para apoyar los esfuerzos de evangelismo en una asociación diferente al fin del primer trimestre fue diferente este año, dijo el pastor Silvestre. “Antes, solo se incluía a administradores y directores de departamento y de las instituciones, pero este año, añadimos los estudiantes de teología con su decano y el rector de la universidad, además de predicadores de nuestra división y de fuera de la isla”.
Bajo el lema “Confía en él”, los esfuerzos de evangelización se enfocaron en la espiritualidad, el evangelismo y el desarrollo para impulsar el cumplimiento de la misión, dijeron los líderes de la iglesia.
El pastor Melchor Ferreyra, director de ministerios personales de la División Interamericana, habló en la iglesia adventista Central de Higuey, donde decenas de miembros de iglesia trajeron a más de doscientos colegas de negocios, empleados y amigos a las reuniones diarias vespertinas de evangelización. Ferreyra habló sobre confiar en Dios en medio de las luchas y desafíos diarios en sus emprendimientos laborales y en la vida misma. “Quedé muy impresionado al ver que tantos miembros de iglesia y empresarios trajeron sus obreros y sus amigos cada noche”, dijo Ferreyra.Uno de esos invitados incluyó al director nacional del SWAT Rafael E. Reyes Castillos, quien viajó varias horas desde Santo Domingo, la ciudad capital, para visitar la iglesia el sábado por la mañana. Fue invitado por un amigo que es miembro de iglesia. Fue su primera visita a una iglesia adventista. “Pidió una oración especial y se quedó todo el culto”, dijo Ferreyra. Cuando se hizo el llamado a pasar al frente al final del sermón, él se paró y avanzó hasta el frente, donde se le regaló una Biblia y el libro El conflicto de los siglos y se oró por él. “Si tuviera que elegir una iglesia, escogería ser miembro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día”, dijo Castillos.
Miles de visitasAl igual que Castillos, se invitó a miles a que asistan a los esfuerzos de evangelización en las iglesias de la asociación. El trabajo de los instructores bíblicos, los laicos, los líderes de grupos pequeños y los pastores locales continuará alcanzando y discipulando a nuevos contactos, como parte del ministerio de seguimiento después de la campaña.
“Casi hemos alcanzado el cincuenta por ciento del blanco establecido de 2098 bautismos en el año”, dijo Paulino. Lo que marcó la diferencia respecto de nuestros esfuerzos anteriores es cómo los pastores de la iglesia y los laicos experimentan el espíritu de integración, dedicación y asombroso trabajo en equipo a lo largo de todos sus esfuerzos, explicó. “Veo unos miembros de iglesia más motivados y comprometidos, que sienten celo por la misión”.
El número de visitas por noche en todas las iglesias llegó a casi 15 mil, añadió Paulino. “Nunca antes hemos visto algo así”, expresó. Eso significa que hay cientos de estudios bíblicos de seguimiento ahora, explicó. La iniciativa de este año sobrepasó el impacto del último trimestre del año, en el que seiscientas personas se unieron a la iglesia, reportó.Una ola de evangelismo
“Alabamos a Dios y vemos que esta ola maravillosa [de evangelismo] continuará hasta las próximas etapas de impacto con los niños, los adolescentes y los jóvenes, seguidos de los esfuerzos de evangelismo de ministerios de la mujer que se completarán este año”, dijo Paulino.
Hay tanto ímpetu por cumplir con la misión, dijo Ferreyra. “Ver el gozo que tenían al predicar y la dedicación que mostraron marca una real diferencia”. Durante una mañana dedicada a seminarios y presentaciones, Ferreyra recordó a los pastores que tienen que continuar con el proceso tradicional que enseña la Biblia para ganar a otros para preparar, plantar, cultivar, cosechar y conservar los nuevos creyentes. “La iglesia tiene que llegar a ser un centro de nutrición para los creyentes, para que la comunidad pueda ser alcanzada con el evangelio”, dijo. “No necesitamos reinventar nada: solo necesitamos redescubrir los principios bíblicos de la Iglesia Primitiva y aplicarlos a esta sociedad posmoderna”.El pastor Roberto Herrera, director de mayordomía de la División Interamericana, habló en la iglesia adventista Villaverde 1 en La Romana, durante la semana, para animar a los pastores locales y miembros activos de iglesia para que sigan comprometidos y así Dios pueda usar sus dones y talentos. Para ello, tienen que redoblar sus esfuerzos en pro de la misión.
Además de ello, los predicadores invitados de la Unión del Atlántico incluyeron a los pastores Pierre E. Omeleter (presidente), Ted A. Huskins (secretario ejecutivo), Elias F. Zabala (tesorero), además de los pastores Henry Beras y José Joseph (vicepresidentes).Hacia el final de la celebración, los líderes de la iglesia entregaron una antorcha simbólica de evangelismo que continuará en la región sur del país el año próximo.
Para saber más sobre la Iglesia Adventista en la República Dominicana, ingrese a adventistas.org.do.
Traducción de Marcos Paseggi