La obra asistencial apoyará a las víctimas y ayudará a reconstruir estructuras dañadas.
13 de junio de 2024 | Goyang City, Corea del Sur | División Asia-Pacífico Norte y Adventist Review
Un mortal ciclón llamado Remal golpeó las zonas costeras de Bangladés el domingo 26 de mayo y se estacionó por varias horas en dicho territorio. El ciclón Remal tocó tierra en Mongla Port en el sur de Bangladés y en la zona costera de Sagar Island en Bengal Occidental, India, trayendo consigo fuertes lluvias y vientos de hasta 135 kilómetros por hora.
De acuerdo con las autoridades locales, el ciclón destruyó 35,483 casas habitación, dañó 115,992 más y afectó a 3.75 millones de personas en Bangladés. Devastó así mismo cultivos, desarraigó árboles, derribó postes de electricidad, rompió barreras y arrasó viveros de peces.
Casa de un miembro de iglesia dañada severamente por el ciclón el 26 de mayo. [Imagen: División Asia-Pacífico Norte]
Miles de personas, incluyendo miembros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, fueron forzados a refugiarse en hogares de sus vecinos o a pasar las noches a cielo abierto. Las casas de muchos miembros de iglesia, aproximadamente de más de 600 de ellos, quedaron dañadas o destruidas. El ciclón afectó también sus cultivos y sus peces, dejándolos sin hogar y luchando por encontrar cómo cubrir sus necesidades.
Muchos miembros de iglesia están actualmente sufriendo por la falta de agua potable, condiciones sanitarias, alimentos y albergue. Won Sang Kim, presidente de la Unión Misión de Bangladés, de la iglesia adventista, dijo: “En un país en el que el 91 por ciento de la población es de creencias musulmanas, los adventistas del séptimo día son extremadamente pobres y vulnerables”. Y añadió: “Suplico fervientemente que les proporcionemos a estas personas la esperanza que necesitan para mantenerse en su fe y reconstruir su vida”.
El daño causado por el ciclón Remal ha afectado a miles de personas. [Imagen: División Asia-Pacífico Norte]
Los dirigentes reconocieron que la situación continúa siendo apremiante. “Se requiere apoyo urgente a fin de ayudar a las comunidades afectadas a recuperarse del devastador desastre natural”, dijeron.
ADRA Corea es parte de la red ADRA International, el brazo humanitario de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. ADRA proporciona socorro y desarrollo asistencial a personas en más de 130 países, independientemente de su etnicidad, afiliación política, género o creencia religiosa. “Al trabajar en conjunto con comunidades, organizaciones y gobiernos locales, somos capaces de proporcionar programas culturalmente relevantes y lograr capacidad y aptitud local para un cambio sustentable”, dijeron los dirigentes de ADRA.
La versión original de esta noticia se publicó en el sitio de noticias de la División Asia-Pacífico Norte.
Traducción – Gloria A. Castrejón