Informe del tesorero destaca compromiso para apoyar la misión de vanguardia

Paul H. Douglas y su equipo agradecen a Dios por los resultados financieros positivos en medio de una alta volatilidad.

16 de octubre de 2024 | Silver Spring, Maryland, Estados Unidos | Marcos Paseggi, Adventist Review

Más de trescientos miembros de la Junta Directiva (EXCOM) de la Asociación General de los Adventistas del Séptimo Día escucharon el Informe del Tesorero el 14 de octubre como parte del Concilio Anual 2024, llevado a cabo en la sede de la denominación en Silver Spring, Maryland, Estados Unidos.

Durante el informe, el tesorero Paul H. Douglas compartió una visión general de la posición financiera de la Asociación General, mientras que el tesorero asociado Timothy Aka y el subtesorero Ray Wahlen reportaron respectivamente sobre las tendencias macroeconómicas y el presupuesto de asignaciones y subvenciones mundiales para 2025. Wahlen también reportó sobre el uso de fondos de diezmos en 2023.

Una presentación de video también destacó el papel del personal de tesorería en la misión, en un momento en que la Iglesia Adventista celebra 150 años desde que envió su primer misionero de ultramar.

Tendencias macroeconómicas

Después de la introducción a cargo de Douglas, Aka, quien había estado ausente debido a serios problemas de salud, agradeció a Dios y a sus colegas. “No estaba seguro de que tendría esta oportunidad otra vez”, dijo Aka al dirigirse a los miembros de la EXCOM. “Me siento tan agradecido de que estar aquí, y aprecio tanto todas sus oraciones”.

Aka analizó algunas tendencias económicas y la manera en que estas afectan el ministerio de la Iglesia Adventista. Destacó que, si bien la economía global ha estado creciendo, la inflación también ha estado aumentando en todo el mundo. Destacó la tendencias actuales en los países que afectan más el presupuesto de la Asociación General, lo que incluye a Australia, Brasil, Canadá, Alemania, México, las Filipinas y los Estados Unidos.

Estos siete países contribuyen con aproximadamente el 75 por ciento de los diezmos que se envían a la Asociación General y el 65 por ciento de las ofrendas, dijo Douglas. “Alabamos a Dios por la fidelidad de todos nuestros miembros, pero damos especial atención a las realidades macroeconómicas de estos países, porque las realidades que afectan a estos países afectarán en efecto el panorama financiero de la sede de la Iglesia Adventista”.

Panorama financiero

Douglas se sintió complacido de reportar que la posición financiera de la Asociación General es sólida. “Es importante que estemos en una posición sólida, porque no solo servimos sino que también apoyamos al campo mundial para garantizar que esta misión, en efecto, pueda seguir adelante”.

Reportó que el efectivo y las inversiones, que representan el 83 por ciento de los activos totales, se han incrementado un 6,2 por ciento entre agosto de 2023 y agosto de 2024. Aunque los diezmos han disminuido levemente respecto de los montos presupuestados a agosto de 2024, las ofrendas se han incrementado un 24,5 por ciento respecto de los montos presupuestados.

De igual manera, el capital operativo (los activos corrientes menos el pasivo corriente) ha llegado a 16,6 meses, en comparación con los 6 meses que se ha votado según el reglamento. Los activos líquidos (los que pueden convertirse fácilmente en efectivo) alcanzaron 13 meses, en comparación con los 3 meses que establece el reglamento. “Dios ha provisto para su iglesia, y le damos a él toda la gloria por los recursos que tenemos para llevar a cabo la obra para la cual hemos sido escogidos”, dijo Douglas.

Presupuesto y misión

Cuando Douglas introdujo la presentación del presupuesto 2025 que dirigió Wahlen, destacó una vez más el renovado énfasis en los gastos orientados a propósitos específicos. “Quiero asegurarles hoy que nuestro proceso y prioridades presupuestarias serán sometidas a un período de estudio deliberado, con el resultado esperado de que la Asociación General misma ejemplificará para la iglesia lo que significa poner nuestro dinero donde se encuentra la misión”, dijo Douglas.

Wahlen concordó con él. “Al preparar el presupuesto, seguimos conscientes de la misión que el Señor ha colocado sobre cada nivel de su iglesia. Por ello, hemos procurado tomar en cuenta el impacto de nuestras actividades financieras a lo largo de todo el sistema”, expresó.

Un enfoque conservador

Como sucedió en el pasado, añadió Wahlen, los directivos financieros de la iglesia mundial han tomado un enfoque definidamente conservador al momento de presupuestar, algo fundamental para este ambiente macroeconómico que sigue siendo altamente volátil, expresó. La iglesia también ha asumido una perspectiva global, dado que por ejemplo, en el presente, solo el 21 por ciento de las ofrendas mundiales son dadas en dólares estadounidenses (lo que hace que el presupuesto sea más susceptible a las fluctuaciones monetarias).

Wahlen reportó que el trabajo con el presupuesto requirió incorporar cuatro ítems principales: el impacto de continuo cambio en los porcentajes de contribución de diezmos (las contribuciones de la División Norteamericana se han visto reducidas, mientras que las contribuciones de otras divisiones se han incrementado según el reglamento), las fluctuaciones monetarias en diversas monedas de las divisiones, los patrones de contribuciones posteriores a la pandemia, y las asignaciones.

A pesar de los desafíos, el presupuesto ha sido balanceado, dijo Wahlen. “Alabo al Señor por esta sólida evidencia sobre el crecimiento continuo en la capacidad financiera de las organizaciones de la iglesia y de nuestros miembros de iglesia en el mundo”, expresó.

Gastos y asignaciones

Después “de la disminución que causó la pandemia”, los gastos se han incrementado, reportó Wahlen. Al mismo tiempo, las asignaciones se han incrementado para las instituciones de la Asociación General, para contrarrestar el efecto de la inflación. Los Empleados del Servicio Internacional (ISEs) y los Servicios de Auditoría de la Asociación General (GCAS) también recibirán montos crecientes para financiar sus servicios.

Wahlen también reportó sobre los cambios a los fondos administrados por la Asociación General, con una mayor asignación (de 3,35 millones de dólares) a la Estrategia Digital Misionera (lo que incluye el evangelismo híbrido), las plataformas de programas informáticos de la iglesia, los grandes encuentros y asambleas de la iglesia y las pólizas de seguros. La única disminución importante es una reducción presupuestaria de 2,3 millones de dólares en los gastos de la revista Adventist World.

“Alabamos al Señor por los activos que él ha encomendado a la iglesia mundial, que han provisto cierto clase de flexibilidad durante tiempos de incertidumbre”, dijo Wahlen.

Uso de los diezmos

Wahlen también reportó sobre el uso de los diezmos, recordando a los administradores y juntas directivas sobre los reglamentos prescritos para “comprender los consejos de las Escrituras y del espíritu de profecía relacionados con el uso de los diezmos”, “evaluar su aplicación dentro de sus territorios”, y “llevar a cabo un informe anual para presentar a sus juntas directiva” de manera que sirva para tener discusiones significativas.

“Los diezmos son un recurso bíblico sagrado que se ofrece a la iglesia”, dijo Wahlen. “Tenemos buenos reglamentos que detallan para qué se puede usar el diezmo, pero sin una revisión periódica, es posible que sin querer, el diezmo sea destinado a áreas que no representan la prioridad más grande para el progreso de la misión”, expresó.

El objetivo general, dijo Wahlen, es controlar los gastos operativos relacionados con la administración, con el propósito de incrementar los gastos para los pastores, evangelistas y obreros de avanzada. “Recuerden que tenemos que enfocarnos en el uso del diezmo para su objetivo primordial: el apoyo a los pastores y sus actividades de ganancia de almas”, dijo Wahlen.

El Reenfoque Misionero, una realidad

Después de la presentación de Wahlen, Douglas regresó al estrado con un llamado a la acción para los miembros de la EXCOM. “Dios nos ha brindado los recursos; hagamos el trabajo. Hagamos el trabajo a nivel local, y hagamos esta obra a nivel global”, expresó.

Douglas también destacó que el Reenfoque Misionero, una iniciativa de la Asociación General que revisa y reasigna más fondos para la misión de avanzada, “nos brinda el marco para trabajar tanto a nivel local como global en la obra de buscar y salvar a los perdidos”. “El Reenfoque Misionero ya no es un sueño; el Reenfoque Misionero ya no es un proyecto; ¡el Reenfoque Misionero es una realidad!”

Douglas también enfatizó que la Asociación General está comprometida para repensar sus estrategias y enfocar sus recursos para garantizar un impacto mayor. Anunció que en el siguiente quinquenio, la Asociación General está planeando gastar aproximadamente 75,5 millones para apoyar la obra misionera de avanzada en la Ventana 10/40 (una región del mundo en la que la vive la mayoría de las personas pero donde los cristianos son una minoría), las poblaciones postcristianas, y las sociedades urbanas en el mundo.

Un ejemplo de servicio

Al concluir su presentación, Douglas compartió un informe de video sobre un viaje misionero que el equipo de Tesorería de la Asociación General realizó a la isla caribeña de St. Croix en abril. Según los organizadores, la iniciativa creó sinergia entre diversas entidades de la iglesia, pero lo que es más importante, hizo que todos se involucraran en la misión. También resultó en muchos bautismos en toda la isla.

El viaje a St. Croix fue solo una de muchas iniciativas misioneras y de evangelización a cargo de los tesoreros de la Iglesia Adventista en el mundo, dijo Douglas.

“Mis hermanos, el Señor viene, y necesitamos usar toda nuestra energía para cumplir con la obra que tenemos por delante”, leyó Douglas al final del informe de video, citando a Elena White, cofundadora de la Iglesia Adventista (Obreros evangélicos, p. 115). “La misión es para todos, y hay algo que nosotros podemos hacer para el Maestro”, dijo Douglas. “Hagamos nuestra parte para edificar el reino de Dios […], para que podamos terminar la obra e ir a casa”.

Traducción de Marcos Paseggi