La comunidad de Swannanoa en el oeste de Carolina del Norte, se tambalea tras la devastación causada por el huracán Helene. [Imagen: Fema –por Madeleine Cook/Liberada]

Los equipos de Servicios Adventistas a la Comunidad están ayudando a las comunidades a recuperarse.

20 de octubre de 2024 | Columbia, Maryland, Estados Unidos | Oficina de Comunicación de la División Norteamericana

Tres semanas después de que el huracán Helene; y una semana después de que el huracán Milton atravesaran en su devastación la región sureste de los Estados Unidos, continúan los esfuerzos para ayudar a los residentes afectados por esas dos tormentas. Servicios Adventistas a la Comunidad (ACS, por sus siglas en inglés) es una de las organizaciones que se ha movilizado para ofrecer ayuda. Su preparación comenzó antes de que los huracanes tocaran tierra y, después de que lo hicieron, los equipos de Respuesta a Desastres (DR) ACS evaluaron las zonas impactadas para determinar en dónde podrían prestar mejor sus servicios.

Lluvia y fuertes vientos del huracán Helene golpearon el sureste de los Estados Unidos, ejerciendo un severo impacto en las Carolinas, con serias inundaciones y deslaves —en algunos casos erradicando enteros poblados. El número de personas fallecidas a causa del huracán Helene se ha elevado a más de 250. El número de víctimas mortales por causa de Milton actualmente se calcula en más de 20. Más de 3.2 millones de personas estuvieron sin servicio eléctrico en los estados de Florida, Georgia, las Carolinas y el sureste de Virginia durante el paso del huracán Helene. Muchas personas están todavía sin corriente eléctrica en Florida, al atravesar Milton el territorio de ese estado, provocando por lo menos 45 tornados y mareas de tempestad récord. Se continúa restaurando el servicio eléctrico en esas zonas; pero al menos un millón de personas estaban todavía el 12 de octubre sin corriente eléctrica y miles de personas no cuentan con servicios de agua corriente.

Voluntarios del centro de distribución del Instituto Parity Achievement (Instituto de logros paritarios) de Asheville Buncombe—una organización local sin ánimo de lucro en Asheville, Carolina del Norte— unieron sus esfuerzos a los de las asociaciones South Atlantic y Carolina. [Imagen: Servicios Adventistas a la Comunidad/Asociación de Carolina]

Los estados con más daños significativos a raíz de los huracanes son Carolina del Norte, Carolina del Sur, Tennessee, Georgia y Virginia. El director de ACS de la División Norteamericana (NAD), W. Derrick Lea, dijo que para el 9 de octubre, ACS de la NAD y la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) estuvieron oficialmente de acuerdo en que ADRA contribuiría financieramente a los esfuerzos de ACS en las zonas afectadas. “La NAD y la Unión del Sur van a asegurarse de que este dinero se utilice para este fin; y agradecemos a nuestros socios de ADRA Internacional por su apoyo”, dijo el director Lea. “ACS y ADRA están unidos en una sola misión: Traer esperanza y prestar ayuda a las fuertemente azotadas comunidades en el sureste. ACS presta sus servicios en la División Norteamericana y ADRA trabaja mundialmente; pero en caso de crisis extrema, nos unimos como un solo cuerpo para servir y asistir a aquellos que lo necesitan”.

El director Lea continuó diciendo: “Por toda la Unión del Sur vamos a identificar las iglesias que van a usar la financiación en necesidades inmediatas de la comunidad. Esta asistencia va a asegurar el que se pueda dar la ayuda ahora mientras continúa la recuperación”.

Los equipos de DR ACS de la Unión del Sur —Asociaciones de Georgia-Cumberland, Carolina, South Atlantic, Southeastern, Florida y Gulf States—, se han desplegado en las zonas devastadas. Los equipos ACS de otras partes del país también se han movilizado, incluyendo, pero no limitándose a, la Asociación South Central, Asociación Rocky Mountain y la Unión North Pacific, todas las cuales enviarán voluntarios para ayudar según se necesite.

Voluntarios del centro de distribución del Instituto Parity Achievement de Asheville Buncombe —una organización local sin ánimo de lucro en Asheville, Carolina del Norte—, unen sus esfuerzos a los de las Asociaciones South Atlantic y Carolina. [Imagen: Servicios Adventistas a la Comunidad /Asociación de Carolina]


El director Lea dio a conocer algunos de los informes dados por los dirigentes de ACS en el terreno mismo de las zonas afectadas, indicando que para el 4 de octubre, sitios de distribución y manejo de almacenes están funcionando en Georgia, Carolina del Norte, Florida y Tennessee. Los informes locales de ACS se resumen como sigue.

Asociación de Carolina y Asociación Atlántico Sur

Estas dos asociaciones están trabajando juntas, siendo que la zona afectada es demasiado grande para ser cubierta por una sola asociación. El “equipo de ataque” ACS está manteniendo la distribución ACS en Asheville, Carolina del Norte. Ellos recibieron un camión U-Haul de aproximadamente 8 metros, procedente de Fayetteville, lleno de suministros. Se encontraban en alerta y listos para realizar las operaciones de almacenamiento y distribución una vez que el contrato del almacén se terminara de llevar a cabo. Dos de los equipos de gestión de almacenamiento de ACS están en Mooresville. El 5 de octubre se inició la distribución de suministros en un lugar de Asheville. “Ha sido una profunda bendición prestar servicios juntamente con tantas maravillosas personas que ayudan a otros. En medio de esta oscuridad, ha habido luz. Ha cambiado también la vida de aquellos que están prestando sus servicios”, dijo David Graham, director de ACS de la Asociación de Carolina. Los suministros donados incluyen agua, productos para bebés, (leche, pañales, etc.), estaciones de recarga solar y alimentos listos para consumirse.

En Georgia, voluntarios de Servicios Adventistas a la Comunidad comienzan a establecer un sitio de distribución para ayudar a la comunidad a recuperarse después del paso del huracán Helene. [Imagen: Servicios Adventistas a la Comunidad]

Asociación Georgia-Cumberland

Inicialmente se le pidió a la asociación que estableciera un almacén en Georgia. Mientras se llegaba a la finalización de algunos detalles para tal almacén, dos remolques para tomar ducha comenzaron a operar en albergues de la Cruz Roja en Valdosta. Los coordinadores de la Asociación están ahora administrando un sitio grande de distribución y están en los últimos arreglos para abrir y administrar en Augusta un almacén adicional de múltiples agencias.

Asociación de la Florida y Asociación del Sureste

Trabajando en conjunto, estas dos asociaciones abrieron para el estado un almacén de múltiples agencias en Ocala, Florida. Las asociaciones están también uniendo sus esfuerzos para operar cuatro o cinco sitios de distribución en iglesias. “Esto va a asegurar el que podamos tener contacto directo con la comunidad a la que servimos en Florida”, dijo el director Lea. “Como organización, tratamos de animar a nuestros líderes a siempre acoplar cualquier almacén nuestro con centros de distribución establecidos por nosotros. El público debe saber que la Iglesia Adventista del Séptimo Día está prestando sus servicios directamente en la comunidad”. Las iglesias son sitios para la distribución de suministros. La Iglesia First University y la Iglesia Bethany han recibido cada una dos remolques de suministros. Los artículos donados por miembros de iglesia se organizarán y guardarán para su distribución en esas y otras iglesias.

Servicios Adventistas de Voluntarios organiza suministros en el gimnasio de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, en Asheville, Carolina del Norte. [Imagen: Servicios Adventistas a la Comunidad /Asociación de Carolina]

“La actividad se está llevando a cabo y los ACS va a permanecer conectados en las comunidades locales en las que estamos, durante todo el año”, dijo el director Lea. “Nos sentimos orgullosos de poder ser de apoyo en esas zonas en donde vivimos, trabajamos y adoramos. La necesidad va a continuar presente por muchos meses, estamos muy agradecidos por todo el apoyo y oraciones”.

La versión original de esta noticia la publicó la División Norteamericana en su sitio de noticias.

Traducción – Gloria A. Castrejón

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