La Universidad de Montemorelos y la División Interamericana capacitan a cientos para integrar la fe y el bienestar físico y mental para la transformación de la comunidad.
24 de enero de 2025 | Montemorelos, Nuevo León, México | Laura Marrero y Noticias de la División Interamericana
“El mensaje adventista de salud es nuestra arma más poderosa para vivir y compartir esperanza”, el doctor Roel Cea, director de las Universidades Promotoras de Salud en la Universidad de Montemorelos, expresó hace poco ante cientos de asistentes a una capacitación para la promoción de la salud en Colombia. “Cada principio de salud que enseñamos es una invitación para una vida de propósito, equilibrio y fe”, añadió.
El mensaje adventista del séptimo día de salud sirve de piedra angular de la misión de la iglesia, ofreciendo una visión integral del bienestar arraigado en los principios bíblicos, dijo Cea. Explicó que este enfoque integra la salud física, mental y espiritual, enfatizando la importancia de los hábitos saludables como por ejemplo una nutrición equilibrada, el ejercicio regular, el suficiente descanso y, por sobre todas las cosas, la esperanza en Dios. “No es tan solo un conjunto de prácticas; es una filosofía de vida diseñada para mejorar la calidad individual de vida, a la vez que también transforma las comunidades al compartir esos principios”, expresó.
Este mensaje se encontró en el corazón de dos grandes congresos de promoción de la salud que se llevaron a cabo hace poco en Colombia. El primero se llevó a cabo en Cartagena del 1 al 3 de noviembre, y el segundo en Bogotá, del 15-17 de noviembre de 2024. Juntos, esos eventos reunieron a más de seiscientos promotores de salud, lo que incluyó a profesionales, líderes de la iglesia y miembros de la comunidad, ansiosos de llegar a ser agentes de cambio en su comunidad local, dijeron los organizadores.Los congresos contaron con el apoyo de la Universidad de Montemorelos y la División Interamericana, destacando la iniciativa Salud Total. Este programa impuulsado por la Universidad de Montemorelos, busca ayudar a que los individuos practiquen, compartan y brinden servicios por medio del mensaje adventista de salud.
En Cartagena, los asistentes exploran el programa Mente saludable, una iniciativa de sesenta día que promueve la gratitud y actos de bondad como prácticas claves para fortalecer el bienestar emocional. Mientras tanto, en Bogotá, el énfasis estuvo en Quiero vivir sano, un conjunto de ocho remedios naturales que está diseñado para guiar a los individuos hacia un estilo de vida más sano. Los principios incluyeron mantenerse hidratado, conservar una actitud positive, comer más ensalada, hacer ejercicio, descansar adecuadamente, evitar alimentos dañinos, comer un buen desayuno, limitar la comida a la hora de la cena y fomentar la felicidad. Ambos eventos destacaron la intersección fundamental de la fe, la salud física y el bienestar mental dentro del marco más amplio de la vida sana.
El doctor Cea, junto con Adriel Vega y Luis Aguilar, estuvo al frente de las capacitaciones, destacando la necesidad de empoderar a los líderes para que esparzan el mensaje de salud dentro de sus iglesias y comunidades. “El objetivo no es tan solo transformar vidas individuales sino crear un impacto colectivo que refleje el amor y la esperanza que provienen de Dios”, explicó el doctor Cea.Estos congresos son parte de una sociedad continua entre la Universidad de Montemorelos y la División Interamericana, dado que buscan extender el mensaje de salud a otras regiones del territorio de la división.
Al mirar hacia 2025, hay planes de incrementar todavía más el énfasis en la salud mental por medio de cursos tantos presenciales como en línea. El objetivo es hacer que el Mensaje Adventista de Salud sea una herramienta efectiva y práctica para capacitar a los líderes y miembros de iglesia, preparando a las comunidades para que satisfagan los desafíos actuales con esperanza y propósito.
Traducción de Marcos Paseggi