Puerto Libre, Grand Bahamas, Bahamas…[Barrington Brennen/DIA]
El domingo 20 de marzo, líderes y miembros de iglesia se reunieron en Beach Bay Drive, en Grand Bahamas, para ser testigos de la ceremonia de colocación de la primera piedra para la construcción de su nueva sede. La nueva oficina alojará la sede administrativa de la Misión del Norte de las Bahamas de los Adventistas del Séptimo Día, la cual coordina los diversos ministerios desarrollados en Bahamas Central y la Isla de Abaco.
El Dr. Patrick Allen, presidente de la Unión de las Indias Occidentales de los Adventistas del Séptimo Día, presentó el discurso de apertura. Él subrayó el hecho de que la creación de la Misión del Norte de las Bahamas es el resultado del crecimiento de la Iglesia Adventista del Séptimo Día y del concepto de que una coordinación más eficiente de las iglesias en el norte requería la formación de una estructura administrativa para atender sus necesidades específicas, así como facilitar una mayor expansión en toda la región.
Otros comentarios fueron hechos por la Sra. Willie Moss, presidente del Grand Port of Authority, quien aplaudió a la Iglesia Adventista por su trabajo en las Bahamas. La Srta. Pleasant Bridgewater, miembro del parlamento de la ciudad de Marco, también habló.
De acuerdo con el pastor Keith D. Albury, presidente de la Misión, la edificación de la nueva sede de la misión es uno de los muchos proyectos planeados para la iglesia como parte de su plan estratégico de siete años, que fue aprobado en junio del año pasado. Los otros proyectos incluyen, pero no están limitados a, el establecimiento de un sitio para campamentos juveniles, que estará abierto a otros grupos cívicos cristianos, y la terminación de la segunda fase de la Academia de Grand Bahamas.
«Es mi esperanza», dice el pastor Albury, «que este complejo facilite una mayor coordinación de los diversos ministerios de todas nuestras iglesias, de modo que nuestro impacto en la comunidad pueda estar mejor enfocado y ser más efectivo para lo que estamos buscando: compartir el amor de Cristo con hombres y mujeres, chicos y chicas, en esta región».
Se espera que el proyecto sea terminado dentro de un plazo de 18 meses desde su iniciación.