Silver Spring, Maryland, Estados Unidos… [Tereza Byrne/Todd Reese/Personal de ANN]

La Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) internacional, celebró su vigésimo aniversario en la tarea de proveer desarrollo y asistencia social en todo el mundo. La celebración tuvo lugar durante una ceremonia especial en la sede mundial de la Iglesia Adventista del Séptimo Día el pasado 14 de abril.

 

“A lo largo de los 20 años pasados, ADRA ha cambiado permanentemente las vidas de decenas de millones de personas –tanto las vidas de aquellos que se beneficiaron directamente de nuestros proyectos, como la vida de cada miembro del personal y cada voluntario o voluntaria que dedicó momentos y años de su vida para cumplir la misión de ADRA”, dijo Charles Sandefur, presidente de ADRA Internacional. “Al celebrar este aniversario, estamos agradecidos con cada individuo, fundación y gobierno que ha colaborado con ADRA a través de su apoyo financiero, su oración, su tiempo y otras formas de apoyo”.

ADRA ha experimentado un significativo crecimiento en los pasados 20 años. En 1984, tenía menos de 600 empleados en todo el mundo, tenía operaciones en 75 países y había provisto un total de ayudas de 24.7 millones de dólares americanos. ADRA tiene actualmente más de 4,000 miembros de su personal en todo el mundo, tiene presencia en 120 países, y ha provisto desarrollo y asistencia social avaluada en más de 120 millones de dólares en 2003, beneficiando a más de 22 millones de personas. Desde 1984, ADRA ha sido dirigida por Robert R. Drachenberg (1984-1985), Ralph S. Watts Jr. (1985-2002) y Charles Sandefur (desde 2002 hasta hoy).

“El mundo en el cual vivimos es uno que siempre está en gran necesidad. Mientras celebramos los logros de ADRA en los 20 años pasados, también nos mantenemos enfocados y apasionados con la tarea que está por delante: hacer prosperar las vidas de quienes están en la angustia y la pobreza alrededor del globo”, dijo Sandefur.

Entre los proyectos que tienen el ánimo de ayudar a estas personas en el mundo entero está una nueva campaña de “Donar 20” para los agricultores en el área rural de Myanmar, una población también conocida como Burma. En la árida zona de Nyuang Oo en Myanmar, la vida es dura. La fuente principal de ingresos es el cultivo de la palma Toddy. Las palmas Toddy son árboles altos, algunos de hasta 60 pies, y sus hojas producen un jugo azucarado que, hervido y procesado, se convierte en Jaggery. Jaggery es una forma de azúcar que se usa para repostería, puede comerse como un dulce y tiene otros usos.

ADRA lanzó al mercado una innovadora estufa ahorradora de energía que permite a las familias cocinar cuatro ollas de Jugo de palma Toddy al mismo tiempo. Con sólo 20 dólares se pueden conseguir todos los materiales necesarios para que una familia construya y opere una estufa ADRA ahorradora de energía. Este es un tipo de proyecto que ADRA ha tomado sobre sus hombros en muchas comunidades alrededor del mundo.

A fin de conmemorar el aniversario de lo que oficialmente comenzó el 6 de abril de 1984, ADRA Internacional ha producido un folleto especial llamado “ADRA en un Vistazo”, el cual da un reporte de sus proyectos actuales y sus logros históricos. Se pueden pedir copias gratuitas llamando al 1-800-424-2372 en Norteamérica o en las oficinas locales de ADRA.

La Iglesia Adventista del Séptimo Día comenzó sus actividades de ayuda humanitaria organizada a nivel internacional en 1918, justo después de la Primera Guerra Mundial, cuando envió ayuda a regiones devastadas por la guerra. Una labor adicional fue hecha en Europa, África del Norte y Asia después de la Segunda Guerra Mundial. A causa del incremento en los desastres y el hambre, la Iglesia Adventista del Séptimo Día a nivel mundial creó una organización llamada Seventh-day Adventist Welfare Service (SAWS, Obra Social Adventista para el Bienestar) –después conocida como Seventh-day Adventist World Service (Servicio Mundial Adventista del Séptimo Día)–en 1956, con la tarea de fortalecer los esfuerzos adventistas de beneficencia.

Cuando las actividades internacionales de desarrollo llegaron a ser más importantes para su misión, en 1984 la organización recibió el nuevo nombre de Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales, para reflejar este énfasis más amplio. Desde entonces, ADRA ha provisto a la comunidad desarrollo y recuperación de los desastres sin distinción de afiliación política o religiosa, edad u origen étnico. Su portafolio básico de actividades incluye seguridad alimenticia, desarrollo económico, saneamiento básico, preparación y respuesta para el desastre y educación básica.

Se puede conseguir información adicional acerca de ADRA en www.adra.org.

Image by ANN. Tereza Byrne/ADRA
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