Más de 1700 jóvenes adventistas de todo Panamá se reunieron para el primer congreso de jóvenes de todo el país para hacer una pausa, examinar su vida espiritual, y reiniciar su relación con Cristo. Decenas de jóvenes de Costa Rica, la República Dominicana y Colombia también asistieron al evento de tres días de duración en Ciudad de Panamá, Panamá, del 18 al 20 de agosto de 2023.
“Están aquí para hacer lo máximo de la experiencia que este congreso brinda, para aprender más de Cristo y conectarse con otros jóvenes de todo el país y aún más allá”, dijo el pastor José De Gracia, presidente de la Unión Panameña. El congreso, que llevó el lema “Reiniciar”, había sido planificado desde que se organizó la unión como tal en 2015, pero el evento se vio retrasado cuando llegó la pandemia, dijo.
Reiniciar una conexión con CristoReiniciar una vida con Cristo es exactamente lo que los líderes de la iglesia tenían en mente cuando reunieron a tantos jóvenes para el congreso, dijo el pastor Misael González, director de ministerios jóvenes de la Unión Panameña y principal organizador del congreso. “Los jóvenes estaban aguardando con ansias este evento, que tiene el propósito de capacitar, animar y motivar a los jóvenes para que abracen la misión de la iglesia con sus habilidades, talentos y dones espirituales en servicio a Dios y su comunidad”, dijo González. El congreso también brindó principios bíblicos que pueden aplicar a sus vidas, para profundizar su compromiso con Cristo y su iglesia, expresó.
Los jóvenes participaron en sesiones generales y seminarios sobre salud mental, desarrollo del liderazgo, discipulado digital, liderazgo de la sociedad de jóvenes, diario personal bíblico, servicio misionero y caligrafía, entre otros, además de involucrarse en sesiones de oración, conciertos especiales y actividades de impacto comunitario.“Nuestros jóvenes estuvieron ciento por ciento involucrados en cada parte del evento”, dijo González. Los jóvenes se sintieron entusiasmados al donar sangre para salvar la vida de decenas de personas, distribuir alimentos, compartir impresos, oraciones y abrazos con otros en las plazas, las calles, las comunidades, entre otras actividades, añadió. El congreso también hizo que cientos de jóvenes participaran de una caminata de 5000 metros por la ciudad el domingo temprano por la mañana, antes de la sesión matutina del pasado 20 de agosto.
El pasado permanece en el pasadoEl orador destacado, el pastor Arnaldo Cruz de la Asociación Sureste de Florida, instó a los jóvenes para que despierten de la muerte espiritual a una vida con Cristo. “No importa lo que haya pasado en la vida de ustedes, eso está en el pasado”, dijo Cruz. “Jesús quiere detener ‘el funeral’ de ustedes y reiniciar una vida con él. Nadie puede minimizar lo que Dios está haciendo y puede hacer por ustedes”.
El pastor Andrés Peralta, director asociado de ministerios jóvenes de la Asociación General, animó a los jóvenes para que se aferren a Cristo al navegar por los desafíos que enfrentan. “Jesús puede darles paz durante las tormentas que están enfrentando”, dijo Peralta. También animó a los jóvenes a que llenen sus vidas con la Palabra de Dios, para que puedan cumplir mejor la misión de compartir el evangelio al dirigir reuniones de la sociedad de jóvenes, eventos de impacto comunitario y reuniones de jóvenes.
Asimismo, “Primera Fe”, un grupo musical de Chile, cantó y entonó alabanzas de adoración durante el congreso de jóvenes.Una bendición para otros jóvenes
Para Tanysha Grenald, llegar al congreso no fue fácil. Viajó en bote desde Bocas del Toro en el extremo sur de la Isla de Colón, en el norte de Panamá, y entonces en carro durante nueve horas para llegar al evento de jóvenes. “Llegar aquí fue un desafío porque tuvimos que recaudar fondos para llegar, pero gracias a Dios, ha sido una experiencia inolvidable y un verdadero reinicio para mi vida espiritual”, dijo Grenal. “Llegué aquí sin querer perderme nada, con un corazón dispuesto a ser movido por el Espíritu Santo, y tuve una experiencia espiritual, con una mayor convicción de ayudar y cuidar de los jóvenes, que son los más vulnerables, que se sienten juzgados y a veces rechazados”.
El compromiso, la amistad y la restauración fueron algunos de los elementos claves que Eira Rivas se llevó del congreso de jóvenes. Viajó desde la región occidental de Panamá, y se deleitó en las múltiples actividades que la ayudaron a encontrarse con otros jóvenes de su país y de otras naciones. “Esto para mí ha significado un nuevo comienzo, y me ha ayudado a comprender que cuando trabajamos para Dios, estamos trabajando para el Jefe más grande, y no importa cuánto hayamos tropezado en nuestro camino, Dios siempre está listo para ayudarnos a vencer cualquier desafío”, dijo Rivas. “Dios nos levanta cada día, y no es tan solo aquí que podemos reiniciar nuestra vida con él”. Los jóvenes esparcieron mensajes de esperanza en los semáforos de la ciudad, llevaron a cabo conciertos musicales en los centros comerciales y las plazas, esparcieron alegría y compartieron actos de bondad.El congreso de jóvenes y sus actividades recibieron la cobertura de la televisión nacional, la radio y los medios impresos de Panamá.
Una conexión más profunda con Dios
Se bautizaron ocho jóvenes en representación de cada una de las asociaciones y misiones de Panamá, sumándose a las decenas de jóvenes adicionales que se bautizaron después de cientos de campañas de evangelismo joven llevadas a cabo en las iglesias y congregaciones locales dos semanas antes del congreso, dijo González.
“Este [congreso] ha sido increíble,” dijo González. “Pudimos ver cómo se movió la mano de Dios en la vida de los jóvenes. El compromiso de ellos con Dios y sus responsabilidades en la iglesia y la misión se hicieron sumamente visibles”. Los líderes de la Iglesia Adventista en Panamá ya están fijando la vista en el próximo congreso de jóvenes, que se llevará a cabo en 2025, dijo González. “Nuestra iglesia cuenta con más de diez mil jóvenes activos, y queremos tener la posibilidad de recibir a más del doble de la delegación de jóvenes que tuvimos”, concluyó.Tomás Hils colaboró con información para este artículo.
Traducción de Marcos Paseggi