Barquisimeto, Venezuela… [Libna Stevens/DIA]
La iglesia Adventista del Séptimo Día, en Venezuela y a través de toda Ínter América, llora la pérdida de cinco de sus miembros luego de un trágico accidente de automóvil el viernes, 3 de junio. Entre los muertos hay tres mujeres y dos niños. Una de las damas permanece en condición crítica.
«Nuestra División sufre debido a esta trágica pérdida, especialmente los fieles obreros en las carreteras yendo a sus sitios de trabajo. Extendemos nuestras más sentidas condolencias a la iglesia en Venezuela y especialmente a la familia ministerial quien ha sufrido esta tremenda pérdida», dijo el Pastor Israel Leito, presidente de la iglesia en Ínter América.
El accidente ocurrió mientras cientos de líderes de la iglesia y sus niños viajaban en autobús y automóvil de la ciudad de Barquisimeto a Barinas para un evento de líderes del Ministerio Infantil auspiciado por la iglesia en la Asociación Centro Occidental de Venezuela. De acuerdo a informes de testigos, las víctimas conducían un vehículo Renault cuando fue impactado por un Toyota Camry fuera de control.
«La iglesia Adventista del Séptimo Día extiende un mensaje de condolencia y esperanza a todas las familias que sufren la pérdida en el territorio centro occidental», dice Rodolfo Escobar, vicepresidente y director de comunicación de la iglesia en Venezuela.
Las víctimas fueron identificadas como Gloria de Linárez, quien era directora de Ministerio Infantil y de la Mujer en la región centro occidental, y su hija Maribel Linárez; Celilia Rojas Manrique, anterior directora del Ministerio de la Mujer, Laura, de 10 años de edad, y su hermano Jesús Gabriel Fernández, 4 años. La única sobreviviente fue Lorena Fernández, madre de los dos niños muertos. La señora Fernández fue atendida quirúrgicamente después del accidente.
Los servicios fúnebres para las víctimas fueron conducidos el sábado y domingo, donde cientos de líderes de iglesia y autobuses repletos de miembros de a través de todo el país estuvieron presentes.
«Nosotros estamos aún aterrados por esta tragedia», dijo el pastor Vladimir Kabas, presidente para la iglesia en la región centro occidental de Venezuela. «No existen palabras para expresar la pérdida de tantas vidas. Nosotros hemos perdido una líder maravillosa en Gloria de Linares quien fue una gran líder y también mi secretaria», añadió él.
«Solicitamos las oraciones de nuestros hermanos y hermanas a través de toda la División en estos momentos de pérdida», añadió el pastor Kabas.
Los líderes de la iglesia en Venezuela declararon el 6 y 7 de junio duelo nacional para las cerca de 600 iglesias y congregaciones a través de Venezuela.
Un equipo de paramédicos, consejeros y ministros se organizaron para proveer consejería a las familias de las víctimas y la gente que presenció el accidente.