5 de julio, 2005 San Luis, Missouri, Estados Unidos … [Braden Blyde/ANN]
Carlton Wright, embajador designado por la Comunidad de Naciones de las Bahamas para la República de Cuba, siente que detrás de su traslado hay un gran propósito más que solo asuntos diplomáticos.
«Vamos primero que nada a representar a Dios, en segundo lugar, a nuestro país, » dice Wright.
Wright, un Adventista del Séptimo Día, es puesto para ser la primera persona de las Bahamas residente en Cuba como embajador. Wright, su esposa Audrey y su hijo adolescente planean viajar a La Habana a finales de Agosto.
«Tengo la esperanza, que al estar presente físicamente, se amplie y fortalezca la relación entre los dos paises,» dice. «Y, como un Adventista del Séptimo Día, para fortalecer la relación entre nuestra iglesia y los cubanos.»
Trabajando con el gobiernos de las Bahamas en varias funciones desde 1972, a Wright se le pidió asumir la posición en base a su experiencia diplomática en áreas volátiles que incluyen Haiti y El Salvador.
Wright se graduó de la Universidad de La Sierra en 1972 con una especialidad en lenguas modernas y tiene un diploma de graduación en relaciones internacionales de la Universidad de las Indias Occidentales.
Admitiendo que ser un cristiano comprometido y estar en una posición gubernamental puede traer complicaciones, Wright cree que estableciendo un standard se asegura que el respeto de las creencias de cada quien. «Tel vez no las acepten, pero las respetan,» dice.
La comunidad adventista en Cuba ha crecido rápidamente en los últimos años, a pesar de las restricciones existentes.
«Todo debe ser hecho dentro de las paredes de la iglesia,» dice Wright, agregando, «pero el Señor encuentra los medios y los caminos.»
Wright cree que el ambiente politico restringente en realidad ayuda al trabajo de la iglesia en Cuba. «Donde le trabajo es difícil, el interés es mayor,» dice. «Nuestro trabajo se disemina mucho más rápido.»
A pesar de las diferencias culturales, Wright siente que al ir a Cuba entrará «en territorio familiar». El ha visitado Cuba desde hace 30 años, por ambas razones, asuntos de trabajo y por el ministerio musical de su esposa.
Coros dirigidos por Audrey Wright cantan regularmente en iglesias en Cuba y en las Bahamas. Después de la muerte del Primer Ministro de las Bahamas Sir Lynden Pindling, también un adventista, a ella le pidieron formar un grupo para participar en el funeral. «La gente asocia la música con los Adventistas del Séptimo Día,» dice.
Directora actual del Meistersingers Adventista del Séptimo Día de las Bahamas, que participó dos veces en San Luis Missouri, ayer, y sub directora del Coro Nacional Infantil de las Bahamas, Audre Wright espera llevar su ministerio musical al nuevo puesto de su esposo.
«La música es una parte importante de nuestro ministerio,» dice ella.
«Nos sentimos muy honrados de que nuestro país nos haya dado esta oportunidad, y principalmente Dios, para ir a Cuba,» dice Carlton Wright.
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