Silver Spring, Maryland, Estados Unidos [Wendi Rogers/ANN]
¿Luces, cámara, Dios? Bienvenido al mundo de Paul Kim. Conozca al ex-pastor de jóvenes que hizo la decisión radical de mover la palanca de cambio y regresar a la escuela para estudiar filmación y televisión.
“Para hacer esto es para lo cual nací. En esto es que soy bueno”, dice Kim.
Kim comprende que, aunque no seguía la ruta tradicional de un pastor, podía administrar y llegar a las personas como un productor de películas adventista del séptimo día. Es donde “realmente encontré mi dones espirituales”, dice él, explicando que él quiso combinar el trasfondo teológico y pastoral con esta nueva profesión “para la gloria de Dios”.
Dejar el ministerio pastoral de tiempo completo, dice Kim, “fue la más fuerte decisión que jamás hice en mi vida”. No la veía bien. “Era como, ‘Ah, has perdido tu salvación’. Batallé con eso en diversas formas”.
También, fue la decisión más solitaria que alguna vez hizo, dice Kim. Solamente hay un puñado de adventistas produciendo películas. “En ciertas formas estamos por nuestra propia cuenta”, dice él. “Dentro de la iglesia, ser un productor de películas es algo fuerte porque, con frecuencia, lo que trata de hacer es mal comprendido. Eso sucede porque no hay muchos de nosotros haciendo eso”.
Añade, “Cuando usted es pastor, hay una enorme red de apoyo tal como reuniones, conferencias, reuniones campestres. Si usted es un productor de películas y trata de usarlas para el Señor, eso es algo extraño. En el pasado no ha habido un grupo de apoyo que reúna a estos individuos, primero porque en el pasado no ha habido tales profesionales, y los pocos que habían tenían que encontrar apoyo de otras fuentes”.
Kim batalló con esto por año y medio mientras estudiaba producción fílmica, antes de llegar a una conclusión: él y sólo un puñado de otros eran los pioneros.
Comprendió que la suya iba a ser “una experiencia solitaria”, pero pudo aceptarla. “Para aquellos que estamos en la vanguardia, solamente estamos intentando crear una ruta para los que están a nuestro alrededor, no solamente para que sigan nuestros pasos, mas para aprender y llegar más allá de nuestra maraca”.
Sin una base de apoyo considerable, dice Kim, tiene que depender “tanto más de Dios y estar mucho más sintonizado con mi espiritualidad y estudio de la Biblia”.
Kim ve los medios como un supuesto padre y, habiéndome criado con los medios desempeñando tan prominente papel en la sociedad, se considera a sí mismo como “bebé de los medios. Puedo entender esta forma de comunicar porque me crié en éste”, dice Kim a sus 27 años de edad.
“Más que cualquier maestro, predicador o político, las masas están escuchando a los músicos, diseñadores y productores fílmicos. Después de todo, ellos congregan las más numerosas audiencias, y están más en sintonía con el tiempo que ningún otro grupo de personas. Y si hay algo por lo que clama la cristiandad, es por relevancia”, dice el nativo californiano.
Lo que impulsa a Kim es esto: «Una cosas que realmente me apasiona es proyectar al cristianismo auténtico”. Kim habla de su tiempo como pastor de jóvenes. Vio muchos miembros de iglesia tratando de llevar una vida perfecta sin hablar de sus luchas mientras ocurrían. Pero esto “es lo que la gente necesita ver”, dice él.
“Para mí, comprender que otras personas batallan con las mismas cosas que yo batallo, me ayudó en mi cristianismo; ayudó mi andar espiritual. Lo que hago ahora con las personas a quienes oriento y personas más jóvenes… soy muy honesto acerca de quién soy, con lo que batallo. Porque cuando triunfo por la gracia de Dios, su fe se construye porque, como que comparten mi experiencia”.
Esta autenticidad es a la que Kim aspira como productor fílmico. Su documental, “Hasta los Confines”, muestra la lidia real de un “hospital” en Chad. Uno ve el elemento humano cuando el doctor y la enfermera son confrontados con las condiciones y enfermedades que el mismo doctor admitió no “haber visto antes”. Esto ayuda a la gente a relacionarse con el médico, dice Kim, porque éste es auténtico. «Quiero que la gente vea su humanidad, cuán difícil es, pero por ese medio, pienso que Dios es glorificado porque muestra que es Dios, no este hombre” el que hace este lugar el mejor lugar.
Kim ha participado en el festival fílmico anual, “SONscreen”, que empezó en 2001 es patrocinado por la iglesia adventista en Estados Unidos.
“Unto the Endes” (hasta los confines) quedó como el Mejor Show en el festival SONscreen de 2004.
“SONscreen” ha ayudado en muchas maneras y preliminarmente ha reunido a los productores fílmicos adventistas. Cuando usted reúne personas, de pronto usted se encuentra con personas que lo entienden, que piensan como usted y entienden lo que a usted le gusta. Usted tiene algún apoyo”, dice Kim.
“La película es sencillamente, en mi mente, el medio más vigoroso, o el medio más grande, por medio del cual cualquier grupo de personas puede comunicarse”.
La película es la forma más poderosa de comunicación, luego esta es la forma más potente e importante con la cual podemos anunciar a Cristo, y aún más, los principios de Cristo”, dice Kim.
“Cuando pienso en eso, mi espina dorsal tiembla de arriba abajo porque es una enorme responsabilidad».