14 de marzo, 2011 – Portmore, St. Catherine, Jamaica…Nigel Coke/DIA
Oración, alabanza y agradecimiento fueron los temas del día cuando centenares de niños, jóvenes y adultos llegaron a la Unión Asociación de Jamaica de los adventistas del séptimo día (JAMU por sus siglas en inglés), a la actividad «Constantes en la Oración» para niños y jóvenes en la Iglesia Adventista del Séptimo Día de Portmore, en Portmore, Jamaica.
El programa, el cual fue dirigido por el departamento de ministerios infantiles y juveniles de JAMU, enfatizó la oración y lo que los niños y la juventud necesitan para mejorar su vida espiritual.
La parte cumbre del día llegó al final cuando Lavar Thomas, de 31 años, un Consultor en Informática decidió entregar su vida a Cristo y ser bautizado. Thomas, invitado a la iglesia ese día, sintió algo especial cuando un miembro de la iglesia oró por él.
«Yo podía oír a Dios hablándome a través de esta persona», dijo Thomas. Eso me hizo reflexionar sobre mi vida y el propósito para el cual Dios me ha hecho. En el transcurso del día sentí la necesidad de ser liberado y permitir que Dios tome las riendas de mi vida. Se trataba de mí y Dios».
Thomas compartió su testimonio de su búsqueda de la verdad después que estudió libros que le fueron dados por el pastor Levi Johnson, presidente de la iglesia de Jamaica Central. Uno de ellos, que marcó una diferencia fue el manual «Constante en la oración» de la División Interamericana.
Eso me llevó a relacionarme con las conferencias y sus peticiones y el proyecto especial por el cual están orando. Antes, no estaba animado a orar, pero el libro, de hecho me hizo ver que la iglesia está activa y firme a cerca de la oración y su misión. Cada día oré por las conferencias programadas».
«Thomas estará entre muchas personas que serán bautizadas en el «Día de Pentecostés», el 19 de marzo, 2011 en el Gimnasio-Auditorio de la Universidad del Caribe del Norte en Mandeville, Jamaica, el sitio principal para la oficina sede.
En su saludo a la iglesia, el pastor Everett Brown, presidente de la iglesia en Jamaica retó a los niños y a la juventud para que hagan buen uso de su tiempo para Dios.
«Usen la red social y las páginas para glorificar a Dios», dijo el pastor Brown. «Úsenlo para enviar una oración, la palabra de Dios y para animar a la fidelidad a Dios. «Constante en la oración» no es un evento. Es un medio para permitir ser usados por el Espíritu Santo para reavivamiento, reforma y renovación. Esto nos ayuda a crecer espiritualmente y ser mejores testigos para Cristo».
Los mensajes del servicio de adoración fueron dados por Gavieal Gordon y Brandon Coleman de 11 y 15 años de edad, en ese orden, procedentes de la Asociación Oriental y Asociación Central respectivamente
Antes, el pastor James Daniel, secretario de campo de la DIA tuvo una presentación con el tema «El Poder de la oración» en la cual amonestó a los niños y jóvenes a cuidar las avenidas de la mente porque la lucha es por la mente, la cual controla todo el cuerpo».
«Fue muy benéfico», dijo Jodian Walker una higienista dental de 23 años. «Ir allá, anticipé, estaríamos orando, pero no esperaba que fuese tan refrigerante espiritualmente. Una de las cosas con las que dejé el lugar es que si se puede pasar un sábado en oración, alabanza y dando gracias, entonces yo puedo hacer eso cada día de mi vida en forma similar».
«Creo que lo propuesto para el día fue logrado», dijo el pastor Charles Blythe, director de ministerios juveniles de JAMU. «Fue un grandioso éxito, según las opiniones de muchas personas durante y después del programa. Ahora esperamos que esto pueda triplicarse en las iglesias locales. No es un evento. Es un proceso que esperamos continúe en la vida cotidiana de nuestros jóvenes al procurar caminar con Dios más estrechamente».
«Constantes en la oración» es el programa de reavivamiento espiritual y reforma de la DIA y sus 21 regiones de iglesia, incluyendo JAMU. Es un llamado a la iglesia en todos los niveles a reconocer la importancia de la oración en la vida espiritual de sus miembros de iglesia.
Traductora: Aleida T. Romero