6 de septiembre, 2011 – David, Chiriquí, Panamá….Victor Caballero/Personal de la DIA
Miles de adventistas del séptimo día se tomaron las calles de David en Chiriquí, Panamá, el 25 de agosto, durante una marcha pacífica contra la prevaleciente violencia en la ciudad occidental del país centroamericano.
La actividad reunió a más de 1,000 miembros de la iglesia, conquistadores, estudiantes y maestros que tenían pancartas y cartelones y tocaban instrumentos durante la marcha de 3 kilómetros a lo largo de las calles en el centro de la ciudad de David. Líderes de la iglesia y empleados se unieron en la marcha vistiendo camisetas con la leyenda, «Juntos, digámosle NO a la violencia».
Los que marchaban fueron acompañados por la gobernadora de Chiriquí, Aixa Santamaría junto con representantes del Ministerio de Educación, Ministerio de Desarrollo Social, Instituto Nacional para Mujeres, Secretario Nacional para el Discapacitado, el jefe de la policía local y otros líderes comunitarios.
Los que desfilaban fueron recibidos por centenares de líderes y miembros de iglesia en el Parque Miguel de Cervantes Saavedra quienes les dieron la bienvenida para un programa especial.
La gobernadora Santamaría agradeció a la iglesia por la actividad que se aúna a los esfuerzos por el gobierno para combatir la violencia prevaleciente en la ciudad.
«Tenemos que decirle no al abuso y no a la violencia en el hogar», dijo el pastor Braulio Concepción, presidente de la región occidental de Panamá cuando le dábamos la bienvenida a la audiencia.
«El abuso en el hogar contra los niños y la mujer están aumentando más y más en nuestra sociedad aquí en Chiriquí», dijo Concepción. Según Concepción, hay un programa llevado a cabo por la iglesia para hacer menos sensitivos a sus estudiantes a través de las escuelas adventistas y miembros de iglesia en todos sus templos sobre lo que es el abuso.
«Estamos enfocados en educar nuestros miembros sobre lo que constituye el abuso y cómo identificarlo a fin de tratarlo en forma apropiada», explicó Concepción.
La marcha y el programa fueron transmitidos en vivo por estaciones de radio adventistas y cubiertos por los medios noticiosos locales.
Otras provincias en la región occidental en Panamá también organizaron desfiles contra la violencia el mismo día, agregó él.
El pastor Elvis Ramírez, un pastor de distrito joven, le recordó a la audiencia a cerca de la creciente violencia en la ciudad y la esperanza que encontramos en Dios.
«El Salvador del mundo es el más grande Pacificador de todos los tiempos», dijo Ramírez. «Los que no tienen ayuda son los más abusados por adultos tales como los padres, tíos, abuelos, hermanos y personas que los cuidan», agregó él cuando apeló a los líderes del gobierno y los congregados para unir esfuerzos para promover la paz y estar vigilantes por aquellos que son vulnerables en la comunidad.
La iglesia adventista en el oeste de Panamá tiene cerca de 50,000 miembros que adoran en 128 iglesias.
Traducción: Aleida T. Romero