Los componentes ayudan a reducir la contaminación por microplásticos en los cultivos frutales.
15 de septiembre de 2024 | Chillán, Región Ñuble, Chile | Rosse Ramírez, División Sudamericana y Adventist Review
El desarrollo de un sistema agro foto voltaico es un proyecto innovador y sostenible que la Universidad Adventista de Chile (UNACH) está llevando a cabo a través de su Facultad de Ingeniería y Administración de Negocios. Dicho proyecto es notorio por su doble propósito: la generación de energía eléctrica utilizando radiación solar y el desarrollo de huertos frutales bajo las estructuras de los paneles fotovoltaicos. La UNACH está situada en Chillán, Región Ñuble, en Chile.
Este proyecto, financiado por el Fondo de Competitividad del Gobierno Regional de Ñuble, contempla la producción de cerezas y fresas utilizando paneles solares semitransparentes que facilitan el pasaje de luz en los cultivos debajo de ellos. Este tipo de tecnología procura reducir los costos de producción y aumenta la sostenibilidad, la calidad y la producción.
Beneficios compartidos“El propósito de este proyecto es crear una sinergia entre los sistemas agrícolas y los sistemas fotovoltaicos”, dijo Víctor Pizarro, director del proyecto. Y detalló los beneficios de estos dos componentes. “El cultivo se beneficia porque evitamos quemaduras solares y exceso de radiación; pero hay también un incremento en la eficiencia del uso del agua. Por otra parte, los paneles son también de beneficio, porque el tener un cultivo debajo de ellos crea un ambiente más fresco y eso beneficia a los paneles”, dijo.
Otro importante beneficio es la descarbonización de energía al utilizar energía fotovoltaica solar, que puede representar un cien por ciento de ahorro en costros de energía, así como protección de la agricultura, siendo que la altura en la que están situados los paneles (4.5 metros; 14.75 pies) los protege de eventos meteorológicos, tales como heladas, granizo, insolación, lluvias torrenciales, reduciendo considerablemente la pérdida de la fruta.
Únicos en el mundoLos paneles utilizados en este proyecto están hechos de vidrio semitransparente, lo cual permite la reducción de contaminación en la fruta, haciéndola verdaderamente única en el mundo.
Jorge Retamal, un investigador en fruticultura delInstituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) Quilamapu, explica en relación a este proyecto, que “el cultivo de cereza, según la forma como lo estamos planificando, que es un estructura de cubierta, presenta un importante punto destacado que es único en el mundo. En la actualidad, se usan cubiertas para cultivo de cereza; pero están hechas de plástico. Estamos también tratando de reducir la contaminación por microplásticos en la fruta que consumimos”. En otras palabras; hay un compromiso hacia la salud y el cuidado ambiental.
Gira por EuropaEl director Pizarro, juntamente con representantes del sector agrícola en la Región Ñuble, participaron recientemente en una gira de tecnología en Europa, organizada por la UNACH, la cual les permitió visitar varios proyectos pioneros agrofotovoltaicos en cultivos frutales en Suiza, Alemania y España, a fin de aprender acerca del potencial que representa la aplicación de esos sistemas en la industria agrícola.
El desarrollo de este proyecto ha llevado a la UNACH a abrir sus puertas a otras instituciones educacionales y a agricultores en la región, de manera que puedan aprender de primera mano acerca del progreso del proyecto y, a través de talleres de trabajo, conferencias y seminarios, educar y despertar conciencia acerca de los beneficios de integrar energía renovable, vinculando así el proyecto con los sectores público y privado.
La versión original de esta noticia la publicó la División Sudamericana en su sitio en español.
Traducción – Gloria A. Castrejón