A continuación se encuentra un mensaje dirigido a la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Interamérica por el presidente de la División Interamericana, Elie Henry–Personal de noticias de la DIA.
23 de mayo del 2025 | Miami, Florida, Estados Unidos | Por Elie Henry, presidente de la Iglesia Adventista del Séptimo Día División Interamericana
Hola, hermanas y hermanos, Feliz sábado.
Al avanzar tan rápidamente en esta primera parte del año, damos gracias a Dios por cómo está guiando a su iglesia en cada rincón de Interamérica.
Con la participación de toda la iglesia, y especialmente con las familias involucradas en la misión, hemos sido testigos de grandes milagros y testimonios, que han resultado en mas de 87,000 personas que han entregado su vida al Señor, desde enero de este año, al día de hoy.
Este es un hecho sin precedentes, pero ¿saben? Aún falta mucho por hacer. Hoy más que nunca nos enfrentamos al desafío de llevar el mensaje de salvación a millones de personas que dedican horas consumiendo en internet y en las redes sociales, ideas, imágenes y videos que no ofrecen esperanza y distraen del propósito eterno. Ahí también debemos tener presencia con el evangelio, pues hay personas que necesitan escuchar de Jesús.
En Habacuc 2:14 encontramos una hermosa promesa: “Porque la tierra será llena del conocimiento de la gloria de Jehová, como las aguas cubren el mar”. Esta visión profética nos inspira a movilizarnos para que cada mensaje, cada pantalla y cada plataforma digital pueda reflejar la luz de Cristo.
Es por eso que la Iglesia Adventista del Séptimo Día ha diseñado una estrategia de evangelismo digital para la misión, cuyo objetivo es no solo tener presencia en línea, sino guiar a las personas hacia una relación viva con Jesús. Y como cada año, el segundo sábado del próximo mes de julio, ese será el énfasis en nuestras iglesias y además podremos participar juntos de una ofrenda especial mundial para el evangelismo digital.
Involucrémonos todos en esta misión, generando contenidos que comuniquen esperanza, capacitando en nuestras iglesias, diseñando proyectos de alcance digital, apoyando con nuestras ofrendas el 12 de julio, pero sobre todo, orando para que Dios nos use y miles puedan escuchar que Jesús viene pronto. ¡Maranatha!