Un perro callejero encuentra su propósito como animal de apoyo en las instalaciones de AdventHealth

Buddy, de seis años, es parte del programa de terapia con mascotas en Altamonte Springs.

28 de septiembre de 2025 | Florida, Estados Unidos | Naomi Chusid y José Luis Dieppa, AdventHealth News

Si alguna vez transitas por las salas de AdventHealth en Altamonte Springs, Florida, Estados Unidos, una mañana de miércoles, probablemente vas a encontrarte con Buddy, un ejemplar mestizo de labrador retriever que despierta sonrisas en cada persona con quien se encuentra.

Buddy tiene 6 años y es parte del programa de terapia con mascotas de AdventHealth. Su dueño, Rafael Fano, ha desarrollado una conexión especial con el hospital, así como con el propio Buddy.

Rafael Fano se encontró por primera vez con Buddy en 2022, cuando un vecino lo encontró errando solo por la calle. No llevaba collar de identificación y no había ninguna señal de su dueño. Después de varios días de búsqueda, Rafael Fano, estando determinado a ayudar, tomó al perro —a quien llamó Buddy—, a Servicios para Animales del Condado de Seminole, esperando poderlo reunir con su familia. Pero nadie acudió a reclamarlo. “Me llamaron entonces y me preguntaron si yo deseaba adoptar a Buddy. Inmediatamente dije ‘sí, yo quiero adoptar a Buddy’. Fui inmediatamente a recogerlo. Eso ocurrió hace más de tres años. Yo creo más bien que Buddy me encontró a mí”, recordó Rafael.

Desde entonces, los dos se han vuelto inseparables. A Buddy le encanta que lo acaricien, le gusta perseguir ardillas y se llena de alegría cada vez que tiene la oportunidad de visitar el hospital o las casas locales de retiro de ancianos.

Rafael Fano deseaba retribuir de alguna forma a la comunidad, así que exploró oportunidades con AdventHealth. “Descubrí que AdventHealth estaba en busca de voluntaries en su programa de terapia con mascotas. Les llamé y pasé por el proceso de obtener entrenamiento y una certificación para Buddy, antes de venir al hospital”, dijo.

Durante los últimos meses, Rafael Fano y Buddy han estado haciendo labor voluntaria casa miércoles en AdventHealth, Altamonte Springs, pasando tiempo con pacientes y miembros del equipo en todo el campus.

“Ellos quieren a Buddy”, dijo su dueño Rafael. “Sentimos que hemos hecho algo bueno por la comunidad —por los pacientes que hay aquí y por los enfermeros que experimentan estrés con su trabajo. Los enfermeros dicen: ‘Estoy feliz de que estés aquí’ y ‘Me has alegrado el día’”.

Para ser parte del programa de terapia con mascotas de AdventHealth, los dueños de perros deben registrarlos, recibir entrenamiento y convertirse en miembros de una organización aprobada de terapia de mascotas; tal como Alliance of Therapy Dogs, Pet Partners, or Intermountain Therapy Alliance. Deben también completar la orientación para voluntarios y someter registros de salud.

Se ha comprobado que la interacción con animales ayuda en el proceso de sanación. Es sabido que la terapia con mascotas reduce el estrés, la ansiedad y la depresión, al mismo tiempo que promueve la sanidad y levanta el espíritu.

Los voluntaries frecuentemente perciben esta experiencia como recompensante. “La terapia con mascotas no solamente beneficia a los pacientes”, dijo Rafael Fano. “Los dueños de mascotas obtienen también algo del programa”.

Al mirar hacia atrás, en donde todo comenzó, Rafael Fano anima a otros a considerar la adopción. “Hay en el centro de refugio de animales muchos perros en espera de que alguien vaya y los adopte. Y los perros son muy buenos y estarán muy felices de tener un hogar”.

“Esta es una maravillosa historia porque es acerca de Buddy, un perro común y corriente que fue abandonado; y Rafael fue capaz de brindarle un hogar lleno de amor y lo ayudó a convertirse en un perro de servicio para ayudar a la comunidad”, dijo Chris Stronko, jefe de Servicios para Animales del Condado de Seminole.

La versión original de esta historia la publicó AdventHealth en su sitio de noticias.

Traducción – Gloria A. Castrejón