Ministerio de la Mujer celebra su 30º aniversario durante el programa nocturno del Concilio Anual, el 10 de octubre de 2025. [Imagen: Peterson Fagundes]
Desde la actuación de las primeras defensoras hasta los equipos globales del presente, la Iglesia Adventista marca tres décadas de Ministerio de la Mujer a través de adoración e informes.
Cuando una joven colportora y obrera bíblica de Wisconsin, Estados Unidos, aceptó un llamado a Corea a principios de la década de 1900, probablemente no habría imaginado cuán lejos iba a trascender su impacto.
Durante el programa de la noche del 10 de octubre de 2025, el Ministerio de la Mujer de la Iglesia Adventista del Séptimo Día celebró su 30º aniversario, haciendo resaltar las historias de mujeres que han impactado al mundo a través de su dedicación a la misión y el servicio. El programa presentado en el Concilio Anual 2025, con el tema “Grato es Contar la Historia”, trazó una línea viva desde las antiguas pioneras, hasta las mujeres que prestan actualmente sus servicios de vanguardia en la misión de la iglesia.
Las mujeres hicieron su entrada portando banderas durante el programa del 30º aniversario de Ministerio de la Mujer, durante el Concilio Anual 2025. [Imagen: Peterson Fagundes]
Décadas antes de que existiera este departamento, Sarepta M. I. Henrye abogó por un ministerio con y para mujeres y recibió el apoyo de la AG. Comenzó a viajar, presentó seminarios y escribió en forma consistente para la columna “La Obra Evangelística de las Mujeres” en la Adventist Review and Sabbath Herald (Revista Adventista y Heraldo del Sábado).
Este esfuerzo organizado sufrió sin embargo una pausa después de su muerte. Casi un siglo después, surgió el moderno departamento a través de una junta consultiva a finales de la década de 1980, del establecimiento de una oficina de Ministerio de la Mujer en octubre de 1990 y de un voto el 4 de julio de 1995 que creó el departamento de Ministerio de la Mujer de la Asociación General, muy pronto adoptado por todas las divisiones.
El día de hoy, su misión es “elevar, alentar y desafiar” a las mujeres adventistas como discípulas, teniendo como prioridades Sustentar, Empoderar y Difundir el Evangelio, dijo Galina Stele, directora de Ministerio de la Mujer de la AG.
Mujeres de pie en la plataforma portando banderas durante el programa del 30º aniversario de Ministerio de la Mujer durante el Concilio Anual 2025 [Imagen: Peterson Fagundes]
Las historias narradas durante el programa ampliaron el enfoque desde el tiempo de los pioneros hasta el presente. Breves perfiles y testimonios realzaron la participación de mujeres líderes en educación, salud, publicaciones y servicio humanitario.
En América del Sur, la instrucción en liderazgo ha equipado a decenas de miles, a la par de la promoción de la salud, la concienciación sobre cáncer de mama y enditnow la movilización en prevención de la violencia. En los Estados Unidos, las mujeres organizaron sesiones de oración y ayuda práctica durante los incendios en el sur de California ocurridos en 2025.
En África Centro Oriental, el ministerio de las mujeres se extendió más allá de las paredes de la prisión en Kenia, al proveer apoyo y conexión tanto a los reos como a sus familias, mientras que, en Ruanda, se reabrieron siete iglesias debido a los esfuerzos unidos de las mujeres locales. Un Centro de Influencia en el occidente de Congo está enseñando computación y agricultura.
Niños cantan en diversos idiomas durante el programa del 30º aniversario de Ministerio de la Mujer. [Imagen: Peterson Fagundes]
En Ucrania, casi 2,000 mujeres usan una comunidad “Telegram” para hacer discípulos y para alentar a las personas.
“A través de las generaciones, las mujeres adventistas han llevado hacia adelante la misión, cruzando océanos, derribando barreras y transformando vidas con la Biblia en la mano y la disposición a servir”, enfatizó el informe vía video.
VividFaith, un ministerio adventista que conecta a las personas con el voluntariado enfocado en la misión y oportunidades de empleo mundialmente, vinculó el aniversario a una creciente cartera de servicios misioneros.
La Dra. Jocelyn Gayares, siquiatra y misionera adventista en Nepal, comparte su testimonio de servicio con los asistentes
durante el Concilio Anual 2025 [Imagen: Peterson Fagundes]
Desde 2023, más de 2,162 misioneros han aceptado llamados a través de esta plataforma, 60 por ciento de los cuales son mujeres, la mayoría de ellas prestando sus servicios como voluntarias en función de maestras, enfermeras, evangelizadoras y decanas.
Una misionera, Margie Mae, trazó su recorrido desde Filipinas hasta Palau, señalando la forma en que cada papel a desempeñar afirmó su vida espiritual y remodeló su sentido de autosuficiencia.
“Cada rol me ha mantenido afirmada en Dios, desarraigando mi autosuficiencia y afirmándome en él”, dijo.
La Dra. Jocelyn Gayares, una siquiatra con subespecialidad en siquiatría del niño y el adolescente, se unió al Hospital Adventista Scheer Memorial en 2021, como parte del enfoque misionero de la iglesia llamado Ventana 10/40. En un país de aproximadamente 30 millones de personas atendidas por solamente un poco más de 140 siquiatras, ella ha ayudado a expandir el acceso a los servicios de salud mental a través de labor clínica, caravanas basadas en escuelas y desarrollo del personal en el hospital.
Erton Kohler, presidente de la Asociación General, abraza y ora por la Dra. Jocelyn Gayares y su esposo Héctor, durante el programa de la noche. [Imagen: Peterson Fagundes]
Las restricciones legales en la evangelización en Nepal moldean la forma en que puede expresarse la fe en el medio clínico, pero quedan las avenidas prácticas, dice la doctora Gayares. En el hospital, los niños pueden encontrar libros de historias cristianas en la zona de juegos de pediatría; y la iglesia local involucra a las familias a través de la programación del sábado y actividades del Club de Aventureros
“Nosotros simplemente nos mantenemos sirviendo y dejamos que los encuentros cotidianos hablen por sí mismos”, dijo la Dra. Gayares.
Ese enfoque fue probado durante recientes disturbios. Mientras las protestas se extendían por las calles, el Hospital Scheer Memorial convirtió su espacio en lugar para brindar ayuda de emergencia, alimento y triaje. El personal atendió heridos producto de los motines a pesar de los toques de queda y los controles de carreteras.
“Fue realmente un tiempo aterrador”, dijo la Dra. Gayares. “Sin embargo, yo sabía que Dios estaba al timón”. Y añadió dirigiéndose a las mujeres adventistas de todo el mundo: “Sean valientes y tengan ánimo, porque nuestro Dios es fiel y nos protege bajo sus alas”.
Después de los comentarios finales y una oración en favor de la doctora Gayares y su esposo Héctor, Erton Köhler, presidente de la AG, instó a los asistentes, enfatizando la necesidad de la unidad en la misión.
Monumento de Mimi Scharffenberg en Sahmyook University. [Imagen cortesía de Kuk Heon Lee]
“Necesitamos a todos para terminar la labor”, dijo”.
Dentro de solo algunos meses de haber llegado a Corea, la misionera adventista Mimi Scharffenberg aprendió coreano, abrió lo que se entiende que fue la primera escuela para mujeres coreanas, organizó la obra de la Escuela Sabática, tradujo lecciones, editó la publicación de Signs of the Times (Señales de los tiempos) en coreano y ayudó a traer El Deseado de todas las Gentes, de la pionera adventista Elena G. White, al idioma local.
Años más tarde, cuando la enfermedad la llevó de regreso a los Estados Unidos, un monumento en la Sahmyook University la honró como la primera mujer adventista misionera en Corea. Prestó sus servicios como uno de los hilos dentro del tapiz del registro de mujeres adventistas sirviendo por generaciones en todo el mundo, dijeron los líderes adventistas.
Santrac Dragoslava, directora editora de la Enciclopedia de los Adventistas del Séptimo Día, concluyó: “Su jornada nos inspira a recordar que la vida más significativa es aquella dedicada apasionadamente al llamamiento de Dios a compartir con el mundo la esperanza en Cristo”.
Traducción – Gloria A. Castrejón