Jamaica: Adventistas en ayuda de fumadores que desean dejar de fumar
13 de agosto de 2013 – Spanish Town, Jamaica…Nigel Coke -DIA
En su empeño por ayudar al gobierno en su lucha para lograr un ambiente libre de humo de tabaco, la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Jamaica ha incrementado sus esfuerzos, al entrenar a personas que ayuden a aquellos que desean dejar de fumar.
El Dr. Elie Honore, presidente de los Servicios Adventistas de Salud, en Interamérica, fue el presentador principal del seminario “Respira Libremente”, del 1 al 3 de agosto de 2013. Imágenes por Gary Witter.
El Dr. Elie Honore, presidente de los Servicios Adventistas de Salud, en Interamérica, fue el presentador principal del seminario “Respira Libremente”, del 1 al 3 de agosto de 2013. Imágenes por Gary Witter.
Mientras muchos jamaiquinos celebraban y reflexionaban sobre la Independencia de su país, más de 50 profesionales, pastores, maestros y practicantes médicos adventistas, se reunieron en las oficinas de la Asociación Central de Jamaica, del 1 al 3 de agosto de 2013, en Spanish Town, para aprender más acerca de “Respira Libremente – El Plan para Dejar de Fumar”.
“Desde la reciente prohibición por parte del gobierno, de fumar en público, muchas personas han expresado su deseo de dejar de fumar”, dijo el Dr. Milton Gregory, director de Ministerio de Salud de la iglesia en Jamaica. “Por tal motivo, la Iglesia Adventista ha visto la necesidad de habilitar a tantas personas como sea posible para ayudar a los fumadores a dejar de fumar”.
Siendo que el fumar es un problema de estilo de vida, “Respira Libremente” es un programa integral que implica preparaciones de orden mental, social, espiritual y físico – una combinación de terapia grupal, desintoxicación de la nicotina y cambios en el estilo de vida, con un sólido componente espiritual. Este ha sido un programa de la iglesia mundial desde 1964, cuando el plan cubría un período de cinco días. Actualmente cubre nueve sesiones que duran cuatro semanas.
Los tres días de entrenamiento incluyeron presentaciones, experiencia práctica en asesoramiento y representaciones o simulacros y, de acuerdo con un participante, el Pastor Devon Champier, tal experiencia abrió los ojos de los participantes al problema real.
“El entrenamiento fue sumamente informativo y revelador y permitió apreciar mejor lo difícil que es para los fumadores dejar de fumar”, añadió. Dijo también que el curso lo había habilitado para entender la necesidad de facilitar el proceso y ser paciente con las personas en su lucha para abandonar esta práctica.
El Dr. Elie Honore, presidente de Servicios Adventistas de Salud en Interamérica, dijo que la reciente prohibición de fumar en lugares públicos necesita atender también otros aspectos críticos.
Explicó además que este entrenamiento no es el requisito final para recibir certificación en este programa. “Tenemos que dirigir un programa grupal con personas que desean abandonar el hábito de fumar, antes de recibir la certificación. El período de tiempo requerido variará de acuerdo con la persona que está siendo aconsejada, porque el programa permite que la persona decida cuándo quiere dejar de fumar. El proceso de seguimiento se lleva a cabo después de un mes, tres meses, seis meses, a un año”.
El programa “Respira Libremente” está actualmente pasando por una revisión a causa del nuevo desarrollo científico y la necesidad de reflejar los nuevos conocimientos y experiencias. Existen más de veinte programas reconocidos para ayudar mundialmente a los fumadores a abandonar el hábito. El programa de nuestra iglesia, “Respira Libremente”, se encuentra entre los diez mejores programas por su eficacia, con un 74 por ciento de éxito después de seguirse por un año.
El Dr. Elie Honore, presidente de Servicios Adventistas de Salud en Interamérica, dijo que la reciente prohibición de fumar en lugares públicos necesita atender también otros aspectos críticos.
El Dr. Elie S. Honore, presidente de Servicios Adventistas de Salud en Interamérica, fue el orador principal y dijo que la reciente prohibición de fumar en lugares públicos necesita atender también otros aspectos críticos.
“La prohibición por sí misma no puede lograr mucho. Es solamente el aspecto legal del problema del tabaco”, dijo el Dr. Honore, quien ha estado dando el entrenamiento para el programa “Respira libremente” durante los pasados 23 años. “Protege tanto a los fumadores, como a los no fumadores, pero principalmente a los no fumadores. Hace enojar a las personas porque lo ven como impedimento a su libertad, pero debieran verlo como protección para quienes les rodean”.
Traducción por Gloria A. Castrejón