Watford, United Kingdom - 23 may 2017
Con los recuerdos del ataque terrorista de Londres de marzo pasado aún grabado en la mente, el Reino Unido despertó a las repercusiones de otra atrocidad. El 22 de mayo por la noche en Machester, la segunda ciudad más grande del Reino Unido, fue víctima de otro acto de terrorismo. Al momento de escribir estas líneas, 22 personas, incluidos algunos niños, han perdido la vida con más de 60 hospitalizados con lesiones serias, después de un ataque suicida con una bomba al final de un concierto en el Estadio de Manchester. Una vez más, la nación se ve obligada a reflexionar sobre la futilidad de semejante brutalidad sin sentido.
En respuesta al ataque, Ian Sweeney, presidente de la Iglesia Adventista en el Reino Unido e Irlanda, reflejó lo que piensan todos los miembros de iglesia, al expresar: “Estamos pensando y orando por las víctimas y los fallecidos en el ataque terrorista en Manchester.
“Como comunidad de la fe, creemos que cada ser humano es de incalculable valor, y por ello, lloramos la trágica pérdida de vidas y más que eso, estamos comprometidos con hacer todo lo que esté dentro de nuestras posibilidades para apoyar y alentar a las personas que se han visto profundamente afectadas”.
El apoyo práctico proviene de dos iglesias adventistas cerca de la escena del ataque. Manchester Sur posee una gran población estudiantil, mientras que Manchester Norte está aún más cerca del Estadio de Manchester. Los pastores Víctor Marshall y Daniel Ebeneezer están trabajando juntos para brindar asistencia práctica a los que están traumados por el evento. El pastor Marshall ha abierto su iglesia para los que buscan la soledad y orar en silencio. Los miembros también están ofreciendo refrescos y servicio de consejería. El pastor Ebeneezer ha informado a la comunidad de los servicios que su iglesia ofrecerá durante estos momentos. Esto también incluye la apertura de la iglesia a la comunidad, y brindar un continuado apoyo de consejería.
Manchester es parte de la Asociación Norte de Inglaterra (NEC) de la Iglesia Adventista. Su presidente, Richard Jackson, hizo un llamado a los miembros: “Es con tristeza que escribo a nuestra familia de la fe al reflexionar sobre el trágico incidente que tuvo lugar en Manchester anoche. Sin duda, nuestras comunidades de Gran Bretaña y en particular de la zona de Manchester se encuentran en estado de conmoción e incredulidad. En momentos como estos, pedimos a la comunidad adventista de Manchester para que se junten y brinden todo el apoyo que sea necesario. Las iglesias estarán abiertas para orar y reflexionar, y los pastores estarán a disposición de los que necesiten algún tipo de apoyo.
“Pido que todos nuestros miembros sigan orando por los afectados de diversas formas, en especial para elevar en oración a los que han perdido a sus seres queridos, y también a los que han sido heridos. Como defensores de la justicia social, como seres humanos, esto nos impacta a todos y sin duda tenemos que mantenernos unidos contra el odio y seguir comprometidos con la inclusividad, la tolerancia y el amor, ahora más que nunca”.
Emmanuel Osei, su homólogo en el sur de Inglaterra, también expresó condolencias a las familias y el pueblo de Manchester. “Estamos orando y pensando en todos los afectados por esta tragedia y la Asociación Sur de Inglaterra apoyará toda acción tomada por la Asociación Norte de Inglaterra para ser de ayuda a las víctimas y al pueblo de Manchester”.
Al hablar en nombre de los adventistas de Europa, Raafat Kamal, presidente de la región Transeuropea de la Iglesia Adventista, expresó su horror por el ataque que apuntó mayormente a los niños y jóvenes. “No hay causa, sea política o religiosa, que justifique acciones de brutalidad sin sentido, en ningún lugar y en ningún momento”, dijo. “Animo a nuestras congregaciones adventistas a que oren por los que están pasando por estos oscuros momentos de dolor”.
Al igual que en los ataques previos en Londres, Suecia, París, Bruselas, y ante la violencia continua en Siria, Irak y otros lugares, el pastor Kamal enfatizó: “No permitimos que actos como este nos derroten, sino que por el contrario, sentimos un mayor impulso de compartir el amor de Dios que puede tocar y transformar a todas las personas”.
A medida que surjan detalles adicionales en los próximos días, las sensibilidades se incrementarán, y las personas procurarán hallar un significado a este acto sin sentido. Las reuniones de oración de mitad de semana y los cultos especiales de este próximo fin de semana pueden ser un momento apropiado no solo para orar, sino para extender una mano de apoyo a las familias de las víctimas y a una nación y comunidad que sufre.