El grupo de líderes y delegados posan para una fotografía durante el inicio del Primer Congreso de los Ministerios de Necesidades Especiales en el territorio, que se llevó a cabo en Villahermosa, Tabasco, México, del 26-29 de junio de 2019. Decenas de administradores de la iglesia, pastores y personas con necesidades especiales en toda Interamérica se reunieron para estudiar y responder a las necesidades de personas con discapacidades en las iglesias y comunidades circundantes. Fotografía de Libna Stevens/DIA

2 de julio de 2019 | Villahermosa, Tabasco, México | Libna Stevens/DIA

Hanel Iván Rosales tiene 26 años. Le encanta estudiar la Biblia y compartir a Jesús con todos aquellos que encuentra. Rosales es ciego de nacimiento, pero sabe cada título y número de los himnos de memoria, y ha memorizado la mayor parte de la Biblia. Se encuentra muy activo en la iglesia adventista Central de Emiliano Zapata en Tabasco, México, de la que es miembro. Él fue uno de decenas de personas a los que se celebró durante el Congreso de Ministerios de Necesidades Especiales de Interamérica, que se llevó a cabo del 26-29 de junio de 2019 en Villahermosa, Tabasco, México.

Rosales ha sentido la importante necesidad que tiene la iglesia de alcanzar a otros como él, no solo los ciegos sino también los sordos, los mudos, los que sufren discapacidades físicas y otras personas con necesidades especiales. Él quiere que los líderes de la iglesia vean esas necesidades y respondan a ellas.

Los que asistieron a ese congreso, el primero de su clase en todo el territorio, incluyeron a casi doscientos administradores y directores de las uniones y asociaciones, además de intérpretes, cuidadores y personas con necesidades especiales de todo el territorio de la División Interamericana. Los asistentes fueron desafiados durante los cuatro días del evento para ministrar a los que tienen necesidades especiales en las iglesias.

Hanel Iván Rosales, de Tabasco, desafía a la delegación del congreso para que busquen a los que tienen necesidades especiales y satisfagan primero sus necesidades. Fotografía de Libna Stevens/DIA

Implica “ir al otro lado, hallar a alguien más, no esperar que alguien venga a nosotros”, dijo Rosales sino “aprender de sus necesidades. Hablar con ellos y satisfacer todas esas necesidades en primer lugar”. Una vez que esos tres pasos se llevan a cabo, entonces, dijo Rosales: “Díganles como les dijo Cristo: ‘Sígueme’”.

Seguir las practices de evangelismo de Cristo

Es tan fácil como seguir las prácticas de evangelismo de Jesús, dijo Rosales al citar la historia de la mujer samaritana en Juan 4. “El Salvador nos dice que tenemos que alcanzar a los que no conocen a Jesús, especialmente a los que sufren, y suplir sus necesidades como él nos ha suplido”.

Eso significa que la iglesia mundial tiene que alcanzar al 15 por ciento de la población mundial, o 1100 millones de personas, que se las considera con alguna discapacidad, explicó el pastor Larry Evans, asistente del presidente de la Iglesia Adventista mundial para los Ministerios a los Sordos y de Necesidades Especiales.

“El mundo ha cambiado nuestro pensamiento de que una persona es valorada por lo que puede hacer y devaluada por lo que no puede hacer”, dijo Evans, “y ese pensamiento ha limitado inclusive el reino de Dios”.

El doctor Larry Evans, director de Ministerios Adventistas a los Sordos y de Necesidades Especiales de la Iglesia Adventista mundial, señala que necesitamos ser una voz de esperanza que hable a todo tipo de personas. Fotografía de Libna Stevens/DIA

“¿Podría la misión de la iglesia verse limitada por la manera en que nos vemos unos a otros?” preguntó Evans. “Tenemos que mirarnos de manera diferente de lo que el mundo nos ha enseñado”.

Se necesita una voz de esperanza que hable a todo tipo de personas, añadió Evans. “Esa voz es usted y yo”.

Aprender a ser más compasivos

El objetivo es avanzar para llegar a ser una iglesia más compasiva y que incluya a todos, desafió Evans. “Dios quiere que seamos personas que él puede usar, porque todos somos una posibilidad.

El congreso tuvo la intención de crear una cultura de mayor conciencia sobre la inclusión, para cambiar actitudes hacia las personas con discapacidades o necesidades especiales, darle nuevas habilidades a los cuidadores y profesionales de necesidades especiales para implementar el ministerio en cada iglesia local, dijo el pastor Samuel Telemaque, director de ministerios de necesidades especiales de la Iglesia Adventista en Interamérica y principal organizador del evento.

El pastor Samuel Telemaque, director de ministerios de necesidades especiales, dijo que la intención es crear una cultura de mayor conciencia de inclusión, para cambiar las actitudes hacia las personas con discapacidades o necesidades especiales. Fotografía de Libna Stevens/DIA

El primer paso para avanzar es que “los líders, los pastores y los presidentes confiesen a Dios de que no hemos sido fieles al ministrar a las personas con discapacidades”, dijo Telemaque. El evento también implicó enviar un claro mensaje a los administradores y líderes, para asegurarse de que las instalaciones de las iglesias y las instituciones educativas sean accesibles para personas que sufren discapacidades físicas.

A eso tiene que seguirle buscar a identificar a los que tienen necesidades especiales.

El congreso incluyó presentaciones y seminarios sobre tendencias en los ministerios a las necesidades especiales, el niño autista, métodos para enseñar a las personas con discapacidades, la cultura de los sordos, qué ven las personas ciegas, la sordera y sus causas, las discapacidades mentales en el hogar, la psicología de las personas con necesidades especiales y maneras prácticas de ayudar a los ciegos de la comunidad, entre otros temas.

Entre los oradores invitados estuvieron el doctor Larry Evans y el pastor Jeffrey Jordan, de Ministerios Adventistas a los Sordos y a las Necesidades Especiales; Tadia Rivero, de la División Transeuropea, el pastor Tomás Torres de la División Interamericana, Faye Patterson de la División Interamericana, la doctora Elvetha Telemaque de la División Intermericana, María Cristina Rivera de la Unión Puertorriqueña, Marisol Cordón e Hilda Ortíz de Guatemala, y el doctor Sergio Lepe de México, entre otros.

Kathia Matamoros ora en Lengua de Señas  de Costa (LESCO) para cerrar el culto del sábado el 29 de junio de 2019. Matamoros ministra a un grupo de personas con discapacidad auditivas en Costa Rica, y está trabajando para traducir la Biblia para otros Sordos como ella, junto con la Sociedad Bíblica de su país. Fotografía de Libna Stevens/DIA

Algunos regiones de la iglesia han comenzado a crear mayor conciencia y solicitar la participación activa de los miembros en las iglesias desde que el se lanzó el ministerio en Interamérica en 2014.

Inclusión total, aceptación, accesibilidad y arreglos especiales

Desde entonces, la Iglesia de Jamaica se ha comprometido para garantizar que todas las personas con necesidades especiales reciban tratamiento y privilegios igualitarios al igual que los demás, informó el pastor Everett Brown, president de la Iglesia Adventista de Jamaica.

“Por demasiado tiempo hemos sido negligentes, aun desinteresados con relación a las necesidades de las discapacidades físicas en nuestras iglesias y en la comunidad”, dijo Brown. “Los que ocupamos puestos de liderazgo en la iglesia tenemos la responsabilidad de usar nuestros puestos de influencia para producir esos cambios que impactarán y mejorarán el bienestar social, económico y espiritual de las personas con necesidades especiales”.

Brown explicó que cada iglesia local tiene el mandato de elegir un coordinador de los ministerios a las necesidades especiales para que sea parte de la junta de iglesia, para garantizar que cada iglesia observe el sábado anual de conciencias obre las necesidades especiales cada marzo. Lo que es más, las administraciones de las asociaciones adventistas locales de toda la isla firmaron un memorando de entendimiento como compromiso, para garantizar que las personas con necesidades especiales sean atendidas y las iglesias sean accesibles para ellas, además de ofrecer actividades para brindarles diversos artículos, aparatos especiales, alimentos y prendas de vestir, entre otras cosas.

El pastor Coniel Morgan, que ministra a un Grupo de personas con discapacidad auditiva en la iglesia adventista de Portmore, en Jamaica, disfruta de la ceremonia de apertura del Congreso de los Ministerios de Necesidades Especiales, el 26 de junio de 2019. Fotografía de Libna Stevens/DIA

La Iglesia Adventista de Jamaica también estableció siete clubes de lengua y una iglesia para los sordos en la iglesia adventista de Portmore con un pastor de tiempo completo que atiende a cuarenta creyentes, 28 de los cuales son miembros bautizados.

“Nuestro énfasis es la inclusión total, la aceptación total, la accesibilidad total, los arreglos especiales totales”, dijo Brown.

“Los ministerios a las necesidades especiales son una responsabilidad del liderazgo”, dijo Brown.

Ayudar a los que sufren discapacidades auditivas

Ayudar a los sordos y a los que sufren discapacidades auditivas en México, donde más de 700 mil personas son discapacitadas, ha sido un factor motivador para la iglesia en el Norte de México.

Álvaro Pérez, de Sinaloa, en la región Mexicana del Norte, lee la Biblia durante el culto de la iglesia del 29 de junio de 2019. Fotografía de Libna Stevens/DIA

La iglesia, en coordinación con la Universidad de Montemorelos, ya llevó a cabo un congreso para los sordos en 2017, además de reunir a los pastores, ancianos y laicos de sus iglesias que sufren de discapacidades para una cumbre en 2015 para atender a los miembros con necesidades especiales.

“Me siento avergonzado de reconocer que como iglesia en la región Mexicana del Norte no hemos hecho lo que deberíamos estar haciendo”, dijo Arturo King, presidente de la iglesia en ese territorio. “La necesidad más grande es enseñar a la iglesia sobre los que tienen necesidades especiales”. King dijo que pudo aprender tanto de invitar a los intérpretes y otros individuos con necesidades especiales para que sean parte de las juntas de unión que se llevaron a cabo en mayo.

Hasta el momento, la Iglesia Adventista en la región Mexicana del Norte ha organizado un segundo taller de lengua de señas a fines de este mes para más de cincuenta intérpretes adventistas que se llevará a cabo en Villahermosa, Tabasco. Asimismo, la Iglesia Adventista en esa región ha estado apoyando un congreso nacional adventista anual para los sordos, que se llevó a cabo cada año durante los últimos tres años. Este año, en octubre, se espera que más de trescientas personas con discapacidades auditivas, intérpretes y líderes de la iglesia asistan a la cuarta edición del evento en coordinación con las Unión Mexicanas del Sureste e Interoceánica, informó David Maldonado, director de ministerios de necesidades especiales de la Iglesia Adventista en la región Mexicana del Norte.

Rodrigo Martínez, que estudia teología en la Universidad de Montemorelos, quiere llegar a ser pastor para los que viven con discapacidad auditiva y sueña con ser misionero. Él ha vivido con discapacidad auditiva desde nacimiento. Fotografía de Libna Stevens/DIA

Maldonado dijo que varias iglesias con miembros sordos en la región Mexicana del Norte han sido visitados por Rodrigo Martínez, un estudiante de segundo año de teología de la Universidad de Montemorelos, que sufre de una discapacidad auditiva. Martínez, que tiene 25 años, predica en lengua de señas y sueña con que en su país exploten los ministerios a las personas con necesidades especiales en cada iglesia. “Quiero llegar a ser un pastor misionero en México y entonces viajar por el mundo, ministrar en España, doquiera Dios me guíe”, dijo Rodrigo.

La iglesia de la región Mexicana del Norte también opera la Escuela Adventista Soledad Acevedo de los Reyes con un plan de estudios que incluye clases de lengua de señas para los estudiantes del Jardín de Infantes hasta el duodécimo grado, donde enseña la docente e intérprete Mónica Vera.

Búsqueda en la comunidad

En Venezuela Occidental, se instruyó a la feligresía de la iglesia local sobre qué significan los ministerios a las necesidades especiales y se trabajó para identificar a los profesionales de salud dentro de cada congregación. El plan seguido trata de buscar a los que tienen necesidades especiales en la comunidad, comenzando con la comunidad que está alrededor de la iglesia, hasta los doscientos metros al este, oeste, norte y sur”, dijo Fernando Toala, director de ministerios de necesidades especiales de la iglesia en la región Venezolana Occidental.

Como resultado, la iglesia comenzó a identificar las necesidades de las personas con alguna discapacidad: los ciegos, los sordos y los sufren discapacidades físicas y sus familias.

El pastor Fernando Toala (tercero desde la izquierda), director de ministerios de necesidades especiales de la región Venezolana Occidental, ora con su delegación durante una sesión especial, el pasado 29 de junio de 2019.

“Hallamos que 1700 personas con necesidades especiales viven cerca de las iglesias adventistas y comenzamos a asistir a 476 personas de ese grupo”, dijo Toala. “La iglesia continúa trabajando duro para ayudar a las personas con necesidades especiales y compartir la esperanza de salvación aun en medio de la crisis económica que ha afectado nuestro país”.

Asimismo, se comenzó a enseñar capacitación en lenguaje de señas por medio de los Clubes de Conquistadores y Guías Mayores. La iglesia también ha completado las lecciones de estudios bíblicos “La fe de Jesús” en lenguaje de señas.

“Cada persona con necesidades especiales posee habilidades especiales y queríamos asegurarnos de que tuvieran la oportunidad de participar durante todo el programa”, dijo Telemaque. “Necesitamos garantizar que todos estén incluidos en la vida de la iglesia… para que cuando regresen a sus respectivas regiones, se lleven a cabo congresos similares de ministerios a las necesidades especiales en diferentes uniones y asociaciones de todo el territorio”.

Telemaque animó a cada grupo de unión y asociación a que diseñe un plan para que la iglesia identifique problemas, cree una declaración de misión con blancos y objetivos, establezca un plan de acción, gestione un presupuesto y evalúe el plan.

Parte de la delegación de la Asociación Sur del Caribe en Trinidad y Tobago analiza planes para atender a las personas con necesidades especiales en sus iglesias y comunidades, durante una sesión grupal el 27 de junio de 2019. Fotografía de Libna Stevens/DIA

“En la iglesia se está produciendo un gran cambio”, dijo Telemaque. “Como iglesia, tenemos que seguir creando una cultura de mayor conciencia e inclusión, para cambiar actitudes hacia las personas con necesidades especiales”.

Para ver una galería de fotografías del Congreso de Ministerios a las Necesidades Especiales de Interamérica, ingrese AQUÍ

Traducción de Marcos Paseggi

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