21 de enero de 2020 | Loma Linda, California, Estados Unidos | Ansel Oliver, Loma Linda University Health News

El consumo de nueces de castilla puede ayudar a retrasar el deterioro de las funciones cognitivas en grupos considerados en riesgo dentro de la población de edad avanzada,  de acuerdo con un estudio llevado a cabo por investigadores de California, Estados Unidos y Barcelona, España.

El Walnuts and Healthy Aging Study (Estudio sobre nueces de castilla y envejecimiento saludable), publicado este mes en The American Journal of Clinical Nutrition (La revista americana de nutrición clínica), encontró que el consumo, en un periodo de dos años, de nuez de castilla por adultos ancianos saludables, tenía muy poco efecto sobre su función cognitiva, pero que tuvo un gran efecto en adultos ancianos que habían sido fumadores y tenían un puntaje más bajo que el estándar en pruebas neurosicológicas.

El estudio examinó un total de casi 640 ancianos que viven en forma independiente en Loma Linda, California, Estados Unidos y en Barcelona, Cataluña, España. Durante dos años, el grupo en estudio consumió nueces en su dieta diaria, mientras que en el grupo de control se abstuvo de su consumo.

Las nueces de castilla contienen ácidos grasos omega -3 y polifenoles, sobre los cuales ya se había encontrado anteriormente que pueden contrarrestar el estrés oxidativo y la inflamación, los cuales llevan al deterioro cognitivo.

Joan Sabaté, profesor de nutrición y epidemiología de la Escuela de Salud Pública de la Universidad Loma Linda e investigador principal del referido estudio, dijo que esta era la más larga y controlada prueba que se haya jamás llevado a cabo acerca de los efectos de las nueces en relación con la función cognitiva.

“Aunque este fue un resultado de menor escala, puede llevar a mejores resultados si se lo conduce durante mayores periodos de tiempo”, dijo el Dr. Sabaté. “Nuevas investigaciones serían definitivamente justificables según nuestros hallazgos, especialmente en relación con poblaciones en desventaja que podrían beneficiarse mucho al incorporar el consumo de nueces de castilla y otro tipo de nueces en su dieta”.

Sabaté y su equipo de investigación en la Universidad Loma Linda fueron los primeros en descubrir el efecto de disminución de colesterol por consumo de nueces, específicamente nueces de castilla. Esos hallazgos se publicaron primeramente en la New England Journal of Medicine  (Revista de Medicina de Nueva Inglaterra) en 1993. Subsecuentemente, hallazgos de parte de investigadores de la Universidad Loma Linda han ligado el consumo de nueces a una disminución de riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares.

El estudio sobre nueces de castilla y envejecimiento saludable fue financiado por una subvención por parte de la Comisión de Nuez de Castilla de California, la cual no tuvo ninguna incidencia en el diseño, colección de datos, análisis y redacción y sumisión del manuscrito.

La original story (historia original) se publicó en el news site (sitio de noticias) de Loma Linda University Health

Traducción – Gloria A Castrejón

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