Un grupo de jóvenes de la Iglesia Adventista Horeb recorrieron las calles principales en Route des Dalles, en Puerto Príncipe, ciudad capital de Haití, el pasado fin de semana, con el fin de despertar conciencia entre los espectadores respecto a las medidas de prevención que se necesitan en la lucha contra la pandemia de coronavirus.
Los jóvenes distribuyeron también panfletos y volantes provistos por el Ministerio de Salud Pública, repasaron las medidas preventivas, explicaron cómo lavarse apropiadamente las manos y distribuyeron 500 ejemplares del libro misionero “Esperanza en medio del caos”, por el evangelizador adventista Mark Finley.
Con las iglesias, escuelas y la mayoría de los negocios cerrados, los jóvenes, vistiendo sus uniformes de Guías Mayores y utilizando guantes y mascarillas de protección, pasaron varias horas del sábado 18 de abril avanzando a través de ocho sitios específicos.
El gobierno ha informado sobre 57 casos positivos de personas contagiadas de coronavirus y tres defunciones hasta esta semana (21 de abril).“Los jóvenes definitivamente desean brindar esperanza a los miembros de su comunidad en estos tiempos de crisis”, dijo Caleb Désir, anciano de iglesia al cuidado de los jóvenes, en la Iglesia Adventista Horeb, quien le dio esta idea al grupo de jóvenes. La iniciativa fue financiada por miembros de la iglesia que tomaron parte pagando por los libros misioneros y las mascarillas protectoras para esta actividad del sábado de tarde.
Louandijie Charles, una de las jóvenes que participaron en esta actividad misionera, dijo que un joven perteneciente a otra denominación religiosa se impresionó tanto con esta iniciativa, que quiso comprar los libros misioneros y los materiales sobre el tema de salud, a fin de llevarlos a su grupo de jóvenes para que hicieran lo mismo en la comunidad. “Estaba tan emocionado y determinado, que le dimos toda la información necesaria”, dijo.
“Hubo tantas personas que apreciaron esta iniciativa y que nos pidieron que les trajéramos cloro, mascarillas de protección y otros artículos para enfrentar la pandemia”, dijo Arafat Duclaire, pastor principal de la Iglesia Adventista Horeb. “Pudimos ver que la gente se siente realmente preocupada por la incertidumbre del coronavirus, así que hicimos lo que pudimos con los recursos limitados que teníamos”.
En medio de tanta incertidumbre, violencia e inestabilidad política, fue importante para los miembros de iglesia tomar parte en la tarea de dar un mensaje de esperanza en tiempos tan desesperados. Más de 700 miembros de iglesia adoran en la Iglesia Adventista Horeb.Traducción – Gloria A. Castrejón