Mandeville, Jamaica…[Nigel Coke/DIA]

Cientos de miembros adventistas del séptimo día convergieron en las parroquias de St. Catherine, St. Thomas y Clarendon para apoyar a aquellos afectados por el Huracán Dean, el huracán de categoría 5 que pasó justo al sur de la isla el mes pasado. Los vientos violentos de 145 millas por hora de Dean y lluvias torrenciales, causaron grandes daños a la propiedad y dejaron a muchos sin hogar.

«Estoy en gran necesidad de ayuda», dijo Thomas Collins, un pensionado de 85 años.

El señor Collins que vive solo en Dry Hill, Portland Cottage, Claredon, fue uno de muchos que están solicitando ayuda de los residentes de esa comunidad, la cual fue severamente dañada. Su residencia de dos cuartos, la cual fue dañada por el Huracán Iván en 2004, no tiene techo. Su dormitorio, el cual está cubierto en parte con lona impermeable, está a merced de la naturaleza.

Miembros de la iglesia adventista visitaron siete comunidades y distribuyeron 2,000 canastas de alimentos, así como agua, colchones, lonas impermeables y sábanas a los residentes necesitados. Médicos del Hospital Andrews Memorial (AMH por sus siglas en inglés) instalaron una clínica provisional en la Iglesia Adventista de Old Harbour Bay donde cientos de niños y adultos recibieron chequeo médico gratuito y medicamentos.

Discursantes y estudiantes del departamento de Ciencias del Comportamiento de la Universidad del Caribe del Norte (NCU por sus siglas en inglés) también estuvieron disponibles para aconsejar a los miembros traumatizados de estas comunidades.

La iniciativa fue organizada por Adventist-laypersons Services and Industries (ASI por sus siglas en inglés) y dirigida por el pastor Patrick Allen, presidente de la iglesia en la región de las Indias Occidentales.

En su apelación a favor de muchos de los residentes de estas comunidades, el pastor Allen afirmó que el tipo de ayuda que se necesita en este momento es una que va más allá de fronteras de clase, género, afiliaciones religiosas o políticas.

«Las necesidades que hemos presenciado son grandes», dijo él. «Hemos visto situaciones donde toda la residencias de las personas han sido demolidas por el huracán. Vimos que hay personas viviendo y durmiendo debajo de árboles con contadas láminas de zinc recostadas contra éstos como paredes y tablas como colchones. Estoy, en verdad, consternado y horrorizado por la situación y comprometo la lealtad de la iglesia adventista para ayudar en cualquier forma que podamos para ayudar a aquellos afectados para que vuelvan a normalizar sus vidas. Tendremos que regresar a estas áreas y dar más ayuda», agregó Allen.

Wayne Sawyers, cuya casa fue destruida, ahora vive debajo de una palma de coco. El equipo de adventistas le dio alimento y una sábana y se mostró muy agradecido.

«Las láminas de zinc están bien», dijo Wayne. «Todo lo que necesito es alguna madera, clavos y muebles y yo trabajaré con otros hombres de la comunidad para arreglarla».

Mientras, cientos de residentes se aglomeraron en la Iglesia Adventista de Old Harbour para recibir un chequeo médico y medicamentos gratuitos. La doctora Grace-Ann Cooper, principal oficial médico en el Hospital Andrews Memorial, fue una de tres médicos y cuatro enfermeras presentes en el lugar. Dijo que las necesidades médicas de la comunidad eran abrumadoras.

«Vimos más de 170 personas y tuvimos que rechazar a algunos por la premura del tiempo», dijo la doctora Cooper. «La mayoría de las personas que fueron examinadas sufrían infecciones por hongos y picazón de la piel. Con base en conversaciones con los residentes durante estos exámenes, hay necesidad de agua potable limpia, adecuada para tomar y otros usos domésticos en la comunidad. Hay varias áreas con aguas estancadas en la comunidad, lo cual debe ser atendido por la correspondiente autoridad con urgencia», lamentó ella.

Una farmacia de turno improvisada en el lugar surtida por AMH y McFarlane's Pharmacy, Old Harbor, dispensó productos de farmacia sin costo a los que fueron examinados por los medicos.

Image by ANN. Nigel Coke/DIA
Image by ANN Nigel Coke/DIA

Top news

Festival cinematográfico en Venezuela muestra marcados progresos, maneras efectivas de exaltar a Cristo
Barry Black, capellán adventista del Senado de los Estados Unidos, se recupera después de derrame
Si tan solo pudiera ser como la Navidad