2 de enero de 2023 | República Checa | ADRA Europa, y Adventist Review
La época de la Navidad es, para la mayoría de nosotros, momentos festivos de alegría y cercanía. Para los niños, es un momento en el que aguardan recibir regalos. Para los cristianos, es momento de celebrar la venida de Jesucristo a la tierra. La Navidad 2022 también es la primera, y esperemos que la última, en que millones de personas tienen que pasar lejos de sus casas, separados de sus familias y amigos como resultado de la guerra en Ucrania. La Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) en la República Checa está haciendo lo mejor que puede durante los días de fiestas para que les resulten lo más agradable posible.
“Los niños están esperando reglas y no pierden la fe en lo mágico, pero extrañan mucho su hogar y a su padre”, dijo Vladislava, una refugiada ucraniana. “El Año Nuevo es realmente un momento mágico, y resulta fascinante ver de qué manera se celebran estas fiestas en la República Checa. Planeamos celebrar, como siempre, con la familia, pero por primera vez sin papá, algo que es muy triste”.
Aunque en Ucrania, la Navidad se celebra unos pocos días después que en la República Checa, y las costumbres y la manera de celebrar también son diferentes, el tiempo pasado con la familia y los amigos es lo que une a los dos países.ADRA preparó varios eventos conjuntos para los refugiados de Ucrania, la vasta mayoría de los cuales son mujeres y niños. Las festividades pusieron de relieve las tradiciones checas, dijeron los organizadores. Los líderes de ADRA buscaron ofrecer un ambiente de amistad y una comunidad abierta en la que todos pudieran sentirse bienvenidos, y pudieran olvidar, al menos por un tiempo, de qué manera cambiaron sus vidas más allá de todo lo que conocían como resultado de los eventos recientes.
“La Navidad no es una festividad real para mí este año, porque no estamos en casa y nuestro país está en guerra”, dijo Natalia, otra refugiada. “Pero aún tenemos los árboles de Navidad y la sonrisa de los niños. [Mi hijo] Denys se encuentra en modo festive, y se siente feliz con los árboles de Navidad; ahora está esperando los regalos. Vivimos con la esperanza de que lleguen tiempos mejores”.
Gracias al apoyo financiero de Air Bank, todos los 15 centros de voluntarios de ADRA República Checa han logrado organizar eventos para niños y adultos. En Praga, Brno, Ostrava, Pilsen, Frýdek-Místek y muchos otros lugares, las fiestas de Papá Noel, las manualidades, la decoración de árboles, los conciertos y otras actividades involucraron a refugiados de todas las edades.Una de las actividades tradicionales en la República Checa es conocida como “reuniones de San Nicolás”. El personaje de Nicolás o Papá Noel (Mikuláš) es bien conocido para los niños ucranianos, y resulta aún más significativo para ellos que para los niños checos. En Ucrania, los niños no encuentran presentes bajo un árbol, sino que Nicolás llega el 19 de diciembre y suele dejar regalos junto a la cama. Una tradición común es entonar cantos de Navidad o recitar poemas junto a árboles decorados en las plazas o las escuelas.
Los líderes de ADRA República Checa animaron a los voluntarios y partidarios para que abran sus corazones esta Navidad, recordando en especial a los necesitados. “Podemos apoyarlos por medio de la oración y las donaciones”, dijeron.
La versión original de esta noticia fue publicada por ADRA Europa.Traducción de Marcos Paseggi